Hay que ver c¨®mo son
"El que aguanta, gana". Con esta idea fija en su mente, Jos¨¦ ?ngel S¨¢nchez Asia¨ªn ha logrado resistir hasta el final afrontando toda suerte de embates hasta conseguir imponer su criterio de mando ¨²nico. Ha conseguido tambi¨¦n dejar bien colocado a su equipo. El precio ha sido su propia Inmolaci¨®n.Quiz¨¢ no pod¨ªa ser de otra forma, dada la extrema paridad de las instituciones del banco fusionado y la necesidad de no romper en exceso los equilibrios, como se?alaba Mariano Rubio en su documento de arbitraje. La muerte de Pedro Toledo desequilibr¨® de tal forma la c¨²pula del banco y el enconamiento de las posiciones de tal magnitud, que las cosas s¨®lo pod¨ªan volver a su curso con la salida de S¨¢nchez Asia¨ªn. Una soluci¨®n tan absurda como pr¨¢ctica.
Cinco semanas y media que han permitido ver de cerca lo que hay de verdad detr¨¢s de la imagen cuidada e impecable con que se presentan en p¨²blico los bancos y banqueros. Cinco semanas y media para devolver parte del poder a las familias y a Neguri ante la incapacidad de los ejecutivos para organizar el gobierno del banco. La solicitud de intervenci¨®n del Banco de Espa?a ha sido un paso atr¨¢s de muchos a?os en el camino de la profesionalizaci¨®n del banco.
Toledo y Asia¨ªn hab¨ªan situado a las familias en su sitio limitando su poder y su influencia. Ahora, para alcanzar un acuerdo han precisado el apoyo de los capitalistas, cuyo representante m¨¢s insigne es el nuevo presidente Emilio Ybarra. aunque es uno de los escasos personajes que une a su condici¨®n de accionista el haber trabajado desde hace muchos en la organizaci¨®n del antiguo Banco de Bilbao hasta alcanzar su puesto de vicepresidente y consejero delegado.
La intervenci¨®n
Pero las cinco semanas largas de duraci¨®n de la crisis tienen consecuencias muy importantes no s¨®lo para el primer banco del pa¨ªs sino para el conjunto del sistema financiero espa?ol con vistas al exterior y al interior. La incapacidad de alcanzar un acuerdo por parte de todas las partes -Independientemente de que al final haya prevalecido una u otra de las partes en conflicto- ha sido destacada en los mercados financieros internacionales y altos cargos de la Administraci¨®n central y del Gobierno vasco lo resaltaban en los ¨²ltimos d¨ªas. "Hay que ver c¨®mo son", se?alaba un alto cargo de Econom¨ªa poco antes de que se hiciera p¨²blico el arbitraje de Mariano Rubio, para a?adir a continuaci¨®n: "Parece mentira que no sean capaces de llegar a un acuerdo".
Miembros del Gobierno vasco afirmaban que "durante muchos meses hemos tenido que soportar las cr¨ªticas de los empresarios y financieros vascos por no poder llegar a un acuerdo con el Gobierno central. La pr¨®xima vez que pretendan decirnos algo similar se lo pensar¨¢n mucho, porque su ejemplo no ha sido especialmente positivo".
Aunque las declaraciones p¨²blicas de las autoridades econ¨®micas y de los responsables del sistema financiero han sido muy cautas desde el principio, en privado las afirmaciones eran bastante m¨¢s duras. Para algunos altos cargos de entidades financieras "la decisi¨®n de acudir al Banco de Espa?a para que desde ah¨ª se encontrara una soluci¨®n a la crisis interna es muy mala para todo el sistema". A partir de ahora, a?aden, "cualquier problema grave puede acabar siendo resuelto por las autoridades porque las partes en conflicto no quieran ceder lo suficiente para poder solucionarlo dentro. Han abierto la v¨ªa de la intervenci¨®n y eso no es bueno en absoluto".
Y la verdad es que tienen raz¨®n quienes dicen esto. A lo largo de las cinco semanas y media de la crisis el Banco de Espa?a ha recibido presiones de todo tipo para que interviniera. Y el gobernador se ha resistido todo lo que ha podido. Fuentes del banco emisor declaraban 24 horas antes de que se solicitara formalmente la mediaci¨®n que "tendr¨¢n que venir en manifestaci¨®n con pancartas ante el edificio de Cibeles para que se haga". Horas despu¨¦s, sin pancartas pero con el ¨¢nimo encogido, los responsables del banco entraban por la calle de Alcal¨¢ pidiendo la intervenci¨®n.
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