Sharon dimite por su enfrentamiento con Shamir

La reuni¨®n del comit¨¦ central de la formaci¨®n conservadora israel¨ª Likud termin¨® ayer como el rosario de la aurora, en medio de un griter¨ªo y un duelo verbal furioso entre su presidente, el primer ministro Isaac Shamir, y el ex general Ariel Sharon, abanderado del ala m¨¢s dura del partido, que present¨® su dimisi¨®n como ministro de Comercio.

Shamir y Sharon se enfrentaron quit¨¢ndose la palabra mutuamente y tratando de hacerse o¨ªr entre los 3.000 delegados rivalizando ante el micr¨®fono sobre cu¨¢l de ambos gritaba m¨¢s fuerte. Shamir abandon¨® la tribuna acompa?ado de sus ministros leales, en tanto Sharon permanec¨ªa en el lugar junto a sus dos aliados, el viceprimer ministro, David Levy, y el ministro de Planificaci¨®n Econ¨®mica, Isaac Modayi.Cuando comenz¨® la sesi¨®n del Likud estall¨® la bomba: Ariel Sharon presentaba su dimisi¨®n como ministro, y aduc¨ªa que el Gobierno del que formaba parte, "pese a mis continuos llamamientos desde hace dos a?os, no hizo nada para liquidar el terrorismo" -como es habitual, Sharon se refiere a la intifada cuando habla de terrorismo-. Shamir no termin¨® de creerse la dimisi¨®n y pareci¨® considerarlo como una pose. "Me ha sorprendido la dimisi¨®n de Sharon", dijo Shamir al comenzar su discurso, "porque esperaba que la presentase con una carta, de modo que yo hubiera tomado las medidas oportunas".

Conforme a la ley, cualquier ministro debe presentar su dimisi¨®n formalmente mediante una carta.

Voto de confianza

Sin embargo, cuando Sharon anunci¨® su decisi¨®n hubo una inmediata descarga el¨¦ctrica entre los delegados y comenzaron los gritos de "?Sharon se va y el Estado palestino entrar¨¢!"; "?Shamir es la verg¨¹enza!" y ?Shamir, dimisi¨®n!".Cuando el primer ministro termin¨® su discurso pidi¨® que la asamblea del Likud sometiera a un voto de confianza su programa. Un tercio de los delegados levant¨® la mano a su favor. Fue el momento en que Sharon se abalanz¨® hacia el micr¨®fono y grit¨®: "?Someto a votaci¨®n la liquidaci¨®n del terrorismo!". Un mar de manos alzadas apoyaron su grito, al que sigui¨® otro m¨¢s: "?Contra la participaci¨®n en las elecciones de los ¨¢rabes de Jerusal¨¦n este". Un numeroso grupo de los presentes core¨®: "De acuerdo".

El primer ministro Shamir intent¨® en vano apagar la voz de Sharon procurando que su moci¨®n recibiera una votaci¨®n ordenada, pero no lo consigui¨®, los delegados estaban enzarzados en discusiones al margen de lo que ocurr¨ªa en la tribuna. Shamir se levant¨® entonces y abandon¨® la sala.