El primer plan de Espa?a

El Plan Director para la Gesti¨®n de Residuos Industriales, aprobado el pasado d¨ªa 23 de enero por el Consell Executiu de la Generalitat de Catalu?a, ha provocado una considerable pol¨¦mica, especialmente en las comarcas afectadas. El plan, con un presupuesto de 11.800 millones de pesetas, prev¨¦ la instalaci¨®n de cuatro vertederos, dos plantas de tratamiento f¨ªsico-qu¨ªmico y una planta de incineraci¨®n, repartidos en un total de seis comarcas de la geograf¨ªa catalana.El Gobierno catal¨¢n todav¨ªa no ha decidido la ubicaci¨®n de un vertedero previsto en Gerona y ha aplazado su decisi¨®n sobre la planta incineradora, que, con capacidad para 60.000 toneladas al a?o, deb¨ªa instalarse, en un principio, en el Pla de Santa Mar¨ªa, en la comarca tarraconense del Alt Camp.

El plan, primero de estas caracter¨ªsticas en Espa?a, es el fruto de cuatro a?os de trabajos de la Junta de Residuos, dependiente del departamento de Pol¨ªtica Territorial y Obras P¨²blicas, que preside el conseller Joaquim Molins. Seg¨²n los responsables del plan, los criterios seguidos para decidir la ubicaci¨®n de las instalaciones han sido, por este orden, la impermeabilidad, la baja actividad hidrol¨®gica y la morfolog¨ªa cerrada del terreno, la proximidad de los centros productores de residuos y las facilidades de acceso por carretera.

Seg¨²n los estudios realizados, la cantidad total de residuos industriales que se generan anualmente en Catalu?a es de 3,7 millones de toneladas Los sectores que producen mayores porcentajes son el qu¨ªmico, con un 44,5% del total, y el sider¨²rgico. con un 25,5%.

Mientras Catalu?a produce 1,6 toneladas de residuos peligrosos al a?o, la disponibilidad de infraestructuras para el trata miento. de los mismos alcanza s¨®lo 335.000 toneladas anuales. Seg¨²n el informe de la Junta de Residuos, "la gesti¨®n inadecuada de las basuras industriales, m¨¢s que una amenaza para la poblaci¨®n, comporta una degradaci¨®n lenta y progresiva del entorno natural, cuya reparaci¨®n es dif¨ªcil y costosa". En la actualidad, estos residuos industriales son eliminados a trav¨¦s de la red p¨²blica del alcantarillado, o en vertederos de basuras.

El movimiento de oposici¨®n al plan ha ido en aumento hasta culminar con los incidentes ocurridos en la localidad de Montblanc, en cuya sede del consejo comarcal el conseller Molins permaneci¨® retenido durante 10 horas por unos 350 manifestantes enfurecidos.

Los habitantes de las comarcas de la Conca de Barber¨¢ y el Alt Camp han sido capaces de recoger m¨¢s de 18.000 firmas, editar revistas y llevar a cabo manifestaciones en diversas localidades. A la oposici¨®n al plan de residuos se han sumado los alcaldes de la zona, de mayor¨ªa de Convergencia? Uni¨®, algunos de los cuales han dimitido de sus cargos.