El Ministerio de Cultura acude en ayuda de Gabriel Celaya y de Alfonso Grosso

La grave situaci¨®n econ¨®mica y de salud del poeta Gabriel Celaya, de 79 a?os, y del novelista Alfonso Grosso, de 62, ha obligado a la Direcci¨®n General del Libro y Bibliotecas del Ministerio de Cultura a acudir en su ayuda. Ha concedido una asignaci¨®n de dos millones de pesetas a cada uno, y, en el caso de Celaya, el abono de los gastos que ocasione su estancia en la cl¨ªnica Ruber de Madrid.

Ayer, la salud del poeta, que hab¨ªa ingresado el viernes 16, mejor¨® notablemente, lo que, en opini¨®n de su m¨¦dico, Pedro Caba, permite "ser optimistas, aunque a¨²n faltan datos para un diagn¨®stico definitivo".Jos¨¦ Manuel Velasco, director general del Libro, afirm¨® ayer que con la concesi¨®n de dichas ayudas "podr¨¢ cumplirse, en el caso del poeta, su deseo de mudarse a vivir a alguna instituci¨®n apropiada". Las ayudas, renovables, aunque no tienen car¨¢cter de pensi¨®n, se iniciaron en 1985 con la concedida a la escritora Rosa Chacel, y no tienen, "en principio", un sentido permanente. Fernando Lucini, portavoz de la familia de Gabriel Celaya, asegur¨® ayer tarde que a¨²n no se les hab¨ªa confirmado directamente esta ayuda del Ministerio de cultura. Por otra parte, el alcalde de Madrid, August¨ªn Rodr¨ªguez Sahag¨²n, tambi¨¦n ofreci¨® ayer ayuda econ¨®mica al poeta.

Un representante de la Sociedad General de Autores de Espa?a visit¨® al poeta en la ma?ana de ayer y manifest¨® su deseo de abonar los gastos de la cl¨ªnica. A su vez, la Asociaci¨®n Colegial de Escritores trabaja en la elaboraci¨®n de un congreso nacional de escritores "que aborde su estado de indefensi¨®n ante el futuro", en palabras de su presidente, Andr¨¦s Sorel. Por otra parte, tanto el Gobierno vasco como la Diputaci¨®n Foral de Guip¨²zcoa, ofrecieron ayer a la familia ayuda econ¨®mica para correr con los gastos de su asistencia m¨¦dica, informa Aurora Intxausti. Hace tres a?os la Diputaci¨®n Foral de Guip¨²zcoa compr¨® la biblioteca del poeta por un valor de diez millones de pesetas.

Pedro Caba, m¨¦dico que atiende a Gabriel Celaya, prohibi¨® ayer que los periodistas le visitaran ante los "abusos cometidos en los primeros d¨ªas de estar internado". Sobre la posible evoluci¨®n del estado de salud del poeta donostiarra, Pedro Caba a?adi¨® que "al menos es previsible una estancia de 10 o 15 d¨ªas en la cl¨ªnica". Su opini¨®n se basa en el hecho de que Gabriel Celaya no atraviesa por ninguna enfermedad concreta, "sino por un cierto estado de autoabandono, del cual necesitaba salir, y lo est¨¢ consiguiendo con sorprendente rapidez".

La recuperaci¨®n le ha permitido recibir a mediod¨ªa de ayer la visita de Camilo Jos¨¦ Cela y de algunos amigos de la familia. Los minutos que Celaya pas¨® en compa?¨ªa del premio Nobel comenzaron, en versi¨®n del portavoz, con una sorprendida exclamaci¨®n del poeta: "?Hombre, me visita un premio Nobel!". A lo que Cela respondi¨®: "No, te visita tu amigo".

Amparo Gast¨®n, esposa de Celaya, se mostraba ayer abrumada por la reacci¨®n que ha tenido mucha gente al conocer el estado de necesidad por el que atraviesan ella y su esposo, lo que ha motivado que en la habitaci¨®n de la cl¨ªnica se recibieran cartas que conten¨ªan cheques por diversas cantidades de dinero, e incluso la an¨¦cdota de una anciana que subi¨® a visitarles para regalarles un cup¨®n de la ONCE que acababa de adquirir. Estas reacciones, que emocionaron al matrimonio, "tambi¨¦n han causado que Amparo se sienta a estas horas culpable de no haberse explicado bien o de no ser bien entendida", seg¨²n un portavoz de la familia.

Celaya comunicaba ayer a su mujer su preocupaci¨®n porque quiz¨¢ no pudiera acudir a San Sebasti¨¢n, donde la Universidad Internacional Men¨¦ndez Pelayo impartir¨¢ un curso sobre su obra entre los pr¨®ximos d¨ªas 16 y 18 de julio. El ministro de Cultura, Jorge Sempr¨²n, del que se esperaba su visita a la cl¨ªnica, no podr¨¢ acudir, seg¨²n fuentes del ministerio, "por encontrarse en Par¨ªs representando al presidente del Gobierno en un congreso organizado por varios peri¨®dicos europeos", entre ellos EL PA?S. Amparo Gast¨®n se encontraba en la tarde de ayer m¨¢s optimista, y confiaba en la recuperaci¨®n de su esposo, "siempre que vuelva a desear abrir los ojos y no se deje ir".