"El Atl¨¦tico no tiene equipo para ganar la Liga"
Clemente analiza las causas de su destituci¨®n
Javier Clemente dice que su cr¨¦dito en el mundo el f¨²tbol no se ha mermado tras su destituci¨®n como entrenador del Atl¨¦tico de Madrid. Asegura que no habr¨ªa renovado a menos que Gil le hubiera ofrecido el doble de lo que ganaba ahora, 55 millones de pesetas. El t¨¦cnico vasco afirma que no ha disfrutado en Madrid, ni con la ciudad ni con el equipo. "Como espectador tambi¨¦n me habr¨ªa aburrido muchas veces con nuestro juego", dice. Clemente tiene previsto volver r¨¢pidamente a Bilbao con su familia, a pesar de que no ha acabado el curso escolar. Su decisi¨®n la ha tomado despu¨¦s de que ayer un colegio bilba¨ªno aceptara la matriculaci¨®n de sus hijos a estas alturas de curso.
Pregunta: ?Cree que su reputaci¨®n se resentir¨¢ despu¨¦s de este cese?
Respuesta: Ni mucho menos. Salgo muy fortalecido. Me pidieron resultados y ah¨ª est¨¢n. El Atl¨¦tico de Madrid va segundo, una posici¨®n excelente bajo mi punto de vista. Mi ¨²nico fallo es que el equipo no va primero, como quiere el presidente. Vistas as¨ª las cosas, me parece que mi papel ha salido reforzado.
P. ?Tiene equipo suficiente el Atl¨¦tico para ganar la Liga?
R. No lo tiene. En la Liga espa?ola hay dos equipos, el Madrid y el Barcelona, que salen con id¨¦nticas posibilidades de ganar la Liga. Luego hay un peque?o grupo que siempre est¨¢ a la espera de lo que puedan hacer los dos favoritos. Tal y como est¨¢ la Liga, el Atl¨¦tico de Madrid figura en este paquete.
P. Gil parece que tiene otra opini¨®n.
R. ?se es uno de los inconvenientes del Atl¨¦tico de Madrid. Gil cree que lo suyo es lo mejor y que lo de los dem¨¢s no cuenta. Eso puede ser positivo en la vida, pero en el deporte es otra historia. Incluso cuando te enfrentas con un equipo muy inferior no puedes estar seguro de ganar.
P. ?Significa esto que usted ya sab¨ªa cuando lleg¨® al Atl¨¦tico que ser¨ªa despedido si no ganaba la Liga?
R. Si se hubiera dado esta circunstancia no habr¨ªa firmado. Yo estaba convencido de que podr¨ªamos intentar conquistar el t¨ªtulo o de que lograr¨ªamos una buena posici¨®n. Cre¨ªa que bien situados no ocurrir¨ªa nada.
P. ?Cuando comenz¨® a recibir avisos de Gil?
R. Nunca directamente. A trav¨¦s de los medios, en el ¨²ltimo mes.
P. ?Pens¨® que su cese estaba cercano cuando Gil inici¨® sus declaraciones contra usted?
R. Comenc¨¦ a pensar que la cosa se complicaba. Era una carga ajena a mi trabajo como entrenador. Aquello me afect¨® mucho.
P. ?No trataron todas estas cuestiones en las sucesivas entrevistas que mantuvieron?
R. Me dec¨ªa que no hab¨ªa problema alguno.
P. ?Y usted c¨®mo interpretaba esa respuesta?
R. Es que a Jes¨²s le pasa como a m¨ª. Nos ponemos a hablar y nos damos cuenta de las cosas fuertes que has dicho cuando las lees.
P. Gil le pidi¨® en numerosas ocasiones un trato de favor para algunos jugadores, mientras ped¨ªa que se apartara de la alineaci¨®n a otros, como Pizo G¨®mez, Bustingorri o Abad¨ªa. ?Que le parec¨ªa la actitud del presidente?
R. Me parece que un presidente est¨¢ en su derecho de hablar sobre los jugadores y sus preferencias.
P. ?Cu¨¢l debe ser la posici¨®n del entrenador en este caso?
R. Contestarle y permanecer firme. Yo le dec¨ªa: 'No juega fulano por esto y por aquello'. Y ya est¨¢.
P. ?Qu¨¦ respond¨ªa Gil?
R. Que la afici¨®n no los quiere, que si tal, que si cual. Y yo le contestaba lo mismo: 'Y a m¨ª qu¨¦'. Esas cosas no me importan.
"Afectado, cansado"
P. ?Se sinti¨® acosado?
R. Acosado, no. Afectado. Cansado.
P. ?Cuando pens¨® que no seguir¨ªa en el Atl¨¦tico?
R. El martes al llegar de Barcelona. De hecho, cuando le¨ª los peri¨®dicos por la ma?ana, me pareci¨® que el asunto estaba feo.
P. Da la impresi¨®n de que no se ha sentido feliz en Madrid.
R. As¨ª es. No me llevo un buen recuerdo de Madrid. No he disfrutado en esta ciudad. P. ?Ha disfrutado con el equipo?
R. Creo que el equipo ha rendido por debajo de su posibilidades. Es un equipo que jugar¨ªa mejor con otra mentalidad, m¨¢s arropados entre ellos.
P. ?Significa esto que hay castas aristocr¨¢ticas en el equipo?
R. En el equipo hay mentalidades contrapuestas. Con algunos jugadores se puede ir al fin del mundo; con otros, no.
P. ?Ha habido jugadores que no le han ayudado?
R. Alguno pod¨ªa haber hecho algo m¨¢s de lo que ha hecho, no tanto en el campo, como en la creaci¨®n de un buen ambiente. Queriendo o no queriendo, alguno ha creado un ambiente horroroso.
P. ?Forman parte los extranjeros de la gente que no le ha ayudado?
P. Paolo Futre es un buen chaval. Ha colaborado con todos los jugadores para formar una pi?a. Los brasile?os son m¨¢s independientes.
P. ?Independientes hasta el punto de que les eche en cara su actitud?
P. Donato no ha dicho absolutamente nada. Baltazar quiz¨¢ pod¨ªa haber hecho algo m¨¢s por ayudarme. Pero tampoco le echo nada en cara.
P. ?Se ha aburrido con el juego del equipo?
R. Yo vivo con mucha intensidad los partidos y no he tenido tiempo para aburrirme. Pero despu¨¦s de los partidos, he visto que hemos jugado en algunas ocasiones de forma horrorosa. Como espectador me habr¨ªa aburrido. Es l¨®gico que la gente diga que se ha aburrido, aunque tambi¨¦n hemos jugado buenos partidos.
P. ?Por qu¨¦ ha prescindido tanto de Baltazar fuera de casa?
R. Me parec¨ªa que muchos de aquellos partidos no le iban a su forma de jugar. Creo que el contragolpe no le va a Baltazar. A Futre y a Manolo, s¨ª. Baltazar es un hombre de ¨¢rea. Carreras de 40 0 50 metros son excesivas para su juego.
La opini¨®n sobre Gil
P. ?Ha cambiado en algo su opini¨®n sobre Gil?
R. No. Creo que su car¨¢cter tiene m¨¢s puntos positivos que negativos, aunque tiene algunos defectos fuertes.
P. ?Podr¨ªa enumerar alg¨²n defecto de Gil?
R. El mayor defecto de Jes¨²s en el aspecto futbol¨ªstico es que escucha a todos aquellos que le van con cosas malas sobre el Atl¨¦tico de Madrid.
P. ?Ha habido alguien en el entorno de Gil que ha buscado la ca¨ªda de usted?
R. Seguro. Que yo sepa, Roberto Dale dijo muchas cosas de m¨ª en una reuni¨®n de quince o veinte personas.
P. ?Qu¨¦ opini¨®n tiene de los medios de comunicaci¨®n?
R. Estoy decepcionado con la Prensa de Madrid. Cre¨ªa que era muy diferente. En la Prensa de Madrid hay cinco o seis que son unos sinverg¨¹enzas.
P. ?Lo dice porque le atacan?
R. No, porque utilizan la mentira como ataque. Creo que he tenido tantos ataques porque he venido al Atl¨¦tico de Madrid.
P. Si hubiera estado en el Real Madrid, ?habr¨ªa tenido tantos ataques?
R. No. Seguro que no.
P. ?No se cierra usted muchas puertas?
R. S¨ª, pero no me importa. Creo que en esta vida hay que decir lo que uno piensa. El problema es tener opini¨®n y que no te lo pregunte nadie. Yo tengo opini¨®n y me la preguntan.
P. Gil dijo el viernes que no quer¨ªa caras nuevas. ?Qu¨¦ le parece el fichaje de Peir¨®?
R. Pues que el viernes dijo una cosa y el s¨¢bado pens¨® otra
P. ?S¨®lo entrenar¨ªa a un equipo capaz de ganar la Liga?
R. No. Siempre escucho todas las ofertas.
P. ?Le gustar¨ªa ser presidente del un club de f¨²tbol?
R. Ahora no, pero dentro de cinco o seis a?os igual cambio de opini¨®n.
P. ?Habr¨ªa seguido en el Atl¨¦tico de Madrid si Gil le hubiera hecho una oferta?
R. No. S¨®lo si me hubiera ofrecido m¨¢s del doble de lo que me pagaba ahora. De lo contrario, me hubiera ido.
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