El toro arrodillado
Tabernero/ Mora, Lozano, CaminoCinco toros de Mercedes P¨¦rez Tabernero, de escaso trap¨ªo, tocados de pitones, inv¨¢lidos; 4? de Montalvo, serio y con cuajo, manso. Juan Mora: cuatro pinchazos bajos y descabello (algunos pitos); tres pinchazos, estocada corta ca¨ªda -aviso- y descabello (silencio). Fernando Lozano: estocada trasera ca¨ªda (petici¨®n y vuelta); bajonazo; aviso con retrase) (oreja). Rafi Camino: pinchazo Y estocada corta (petici¨®n y dos vueltas); tres pinchazos y se acuesta el toro (palmas). Plaza de Valencia, 15 de marzo. Sexta corrida fallera.
Una de las principales innovaciones de la tauromaquia contempor¨¢nea es la lidia de rodillas. No la lidia del torero puesto de rodillas, sino la lidia del toro puesto de rodillas. Produce singulares efectos esta innovaci¨®n. El p¨²blico lo celebra y los toreros seguramente lo celebrar¨¢n tambi¨¦n, porque no es igual torear a un toro que se arranca bufando sapos y culebras, que torear un toro arrodillado. El p¨²blico valenciano tuvo ayer ocasi¨®n de disfrutar la innovaci¨®n y asimismo los espadas del cartel, aunque pudieron sacarle mejor partido. Llegan a ser de corte tremendista, y salen todos a hombros.
Como no eran de corte tremendista los toreros del cartel ayer, no sali¨® a hombros ninguno. Se descuidan, y ni siquiera cortan orejas. Los toreros del cartel -ayer- pretend¨ªan dar naturales y derechazos abrochados con sus correspondientes pases de pecho, molinetes o trincherillas, y les sal¨ªa un churro casi siempre, porque torear seg¨²n los c¨¢nones de la tauromaquia antigua toros de la tauromaquia contempor¨¢nea constituye dif¨ªcil empresa. Juan Mora, por ejemplo, diestro de inspiraciones escol¨¢sticas, ensayaba el natural -o el redondo- cargando la suerte, templando exquisito, va ciando t¨¦cnico, y todo eso sol¨ªa d¨¢rselo al aire. Con el agravante de que sus toros no s¨®lo se arrodillaban sino que adem¨¢s se revolv¨ªan -el primero- o probaban la embestida -el cuarto- y a la frustraci¨®n art¨ªstica se un¨ªa el amargor del peligro. El diestro de inspiraciones escol¨¢sticas tuvo mal lote.
Los toros arrodillados que correspondieron a Fernando Lozano, en cambio, ser¨ªan todo lo pelmas que se quiera, mas peligrosos no, y su lidiador consigui¨® triunfar con ellos d¨¢ndoles los naturales y los redondos y las consecuentes abrochaduras, all¨¢ penas si sal¨ªan al toro o a su sombra, y si el toro se pon¨ªa pelma, ¨¦l m¨¢s. Al quinto, unas veces tirando de la mortecina embestida, otras aprovech¨¢ndola, otras porfiando tesoneramente junto a los pitones, le peg¨® 141 pases -?ofueron 142?-, despu¨¦s un bajonazo, y logr¨® la oreja en disputa. Si el toro llega a saber que su lidiador le iba a pegar tantos pases, seguramente le habr¨ªa dado la oreja gratis de principio, y que, le dejara en paz.
Por el mismo procedimiento de muletear con machacona insistencia obtuvo Rafi Camino el premio de dos vueltas al ruedo, dos, en el tercero, toro arrodillado colorao al que ni siquiera picaron porque, si lo pican, lo desbaratan. Aprovechando la feliz circunstancia de que el toro arrodillado embisti¨® un ratito sin arrodillarse, Camino le embarc¨® muy bien por redondos y desat¨® el entusiasmo de la banda, que atac¨® el pasadoble Nerva a pleno pulm¨®n, y ya no par¨®. Nadie par¨®, en realidad: ni la banda de tocar, ni Camino de pegar pases, ni el toro de arrodillarse, ni el p¨²blico de aplaudir.
El sexto fue el toro arrodillado por antonomasia, el toro arrodillado qu¨ªmicamente puro. Nada m¨¢s salir salt¨® al callej¨®n d¨¢ndoles un susto de muerte a los fot¨®grafos y dej¨¢ndose pegados en el borde de la barrera los pelos de la barriga. Se supone que eran de la barriga pues si proven¨ªan de m¨¢s delicados ¨®rganos, pobre toro. Despu¨¦s le citaba Camino con la muleta y el pobre toro se pon¨ªa de rodillas, como pidiendo perd¨®n. Pero no ped¨ªa perd¨®n: hac¨ªa alarde de modernidad, exhib¨ªa una de las principales innovaciones de la tauromaquia contempor¨¢nea. La proclamaci¨®n del toro arrodillado, adem¨¢s mocho, tiene en el hist¨®rico coso de la calle X¨¢tiva su templo catedralicio.
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