Peter Stein: "El poder pol¨ªtico no est¨¢ interesado en el arte, pero lo utiliza"
El director alem¨¢n, conocido como 'el se?or de la escena', trae a Espa?a 'Tito Andronico', de Shakespeare
El director teatral alem¨¢n Peter Stein, de 52 a?os, llega por primera vez a Espa?a con Tito Andr¨®nico, de Shakespeare. Este hombre m¨ªtico, conocido como el se?or de la escena, acude con el primer montaje que no realiza en alem¨¢n. El montaje, realizado con el Teatro Stabile de G¨¦nova, se presentar¨¢ a partir del d¨ªa 22 en el marco del Festival Internacional de Madrid. Stein, hombre de mirada inquietante, creador de la c¨¦lebre Schaub¨¹hne berlinesa, con la que ha alcanzado fama mundial, piensa que "el poder pol¨ªtico no est¨¢ interesado en el arte, pero lo utiliza"'.
Casi se podr¨ªa asegurar que Peter Stein es el ¨²nico creador teatral, con un prestigio internacional s¨®lo equiparable al de los grandes mitos, que nunca hab¨ªa tra¨ªdo ninguna producci¨®n a Espa?a. Su historia est¨¢ unida profesional y sentimentalmente a la c¨¦lebre Schaub¨¹hne berlinesa, instituci¨®n que fund¨® en 1970 y cuya direcci¨®n abandon¨® en 1985, aunque sigue ah¨ª. Durante todos esos a?os s¨®lo ha estado en esa ciudad, "y as¨ª tendr¨ªa que continuar siendo", comenta, "porque el teatro es un fenomeno regional, no internacional, aunque luego exista la contradicci¨®n de que hay que hacer teatro en todo el mundo para no quedarse cerrado".Para Stein, la historia de la Schaub¨¹bine es el resultado de la historia del teatro joven de la RFA. Lo que le impuls¨® a crear este templo del teatro europeo fue que quer¨ªa que los actores y todos los que trabajan dentro del teatro se autogestionaran y asumieran todas las responsabilidades.
El director alem¨¢n dej¨® entrar a un periodista a su bell¨ªsima e inmensa casa, situada en la calle principal de Berl¨ªn Occidental, para la realizaci¨®n de esta entrevista. El que abra su casa, algo inhabitual, habr¨ªa que achacarlo a que Stein no debe querer desplazarse con la escayola que lleva en una pierna rota recientemente. La casa es aut¨¦ntico material de primer orden para cualquier psicoanalista que se precie. La est¨¦tica de grandes espacios vac¨ªos no se puede achacar exclusivamente a que ¨¦sta sea una nueva moda en de coraci¨®n de interiores. El vac¨ªo del imponente hogar de Stein es opresivo, inquisidor, casi angustioso... como su mirada. Y al mismo tiempo es sugerente, atractivo, ag¨®nico, lleno de energ¨ªa, morboso... como su mirada.
Stein es el primero en reconocer que su trabajo no hubiera sido el mismo sin existir Bertolt Brecht y Fritz Kortner (gran actor expresionista huido a Estados Unidos en la ¨¦poca nazi y convertido, tras su exilio, en punto de referencia del teatro alem¨¢n).
"De Kortner he recibido un contacto directo, y de Brecht, indirecto", afirma. Pero la dura cr¨ªtica hacia Brecht no se hace esperar: "El inter¨¦s de Brecht por relacionar los problemas sociales con el teatro es parte tambi¨¦n de mis intereses teatrales, pero ¨¦l ofrece una teor¨ªa y ello significa no desarrollar todas las posibilidades del arte teatral". Seg¨²n Stein, despu¨¦s de la muerte de Brecht su escuela ha hecho mucho darlo, porque ha intentado establecer reglas y en teatro eso no se puede hacer. "Brecht ha introducido el totalitarismo en el teatro a causa de razones ideol¨®gicas estalinistas", dice.
La elecci¨®n de Tito Andr¨®nico fue por el inter¨¦s de Stein por un Shakespeare joven, con energ¨ªa. Descubri¨® en la obra, considerada mala y maldita durante siglos, hasta que Peter Brook la rescat¨® del olvido en 1956 (lo que impuls¨® entonces reflexiones filos¨®ficas e intelectuales), que hab¨ªa una tragedia en el sentido antiguo simple y al tiempo grangui?olesca. El estreno del Teatro Stabile de G¨¦nova del Tito Andr¨®nico, de Shakespeare, bajo la direcci¨®n de Peter Stein, ha sido uno de los grandes acontecimientos internacionales teatrales de la temporada 19891990.
Agresividad
Cuando Stein finaliza un largo discurso sobre la agresividad en la sociedad a?ade que Tito Andr¨®nico, "un aut¨¦ntico cuento de hadas al lado de lo que hoy nos encontramos en la industria del v¨ªdeo", tambi¨¦n muestra la historia de los desarrollos pol¨ªticos de todos los tiempos.
Interesado por los elementos ag¨®nicos del teatro -"sin ellos no funciona nada"-, rechaza el existencialismo de Beckett por pasivo, inactivo y reducido y a Brecht por haber sometido al teatro a una dial¨¦ctica marxista.
Arremete tambi¨¦n contra los pol¨ªticos, afirmando que no son ¨¦stos quienes tienen el verdadero poder, sino el mundo econ¨®mico. "La fuerza pol¨ªtica no est¨¢ interesada en el arte, pero lo utiliza, de acuerdo con un 90% de la poblaci¨®n que tampoco est¨¢ interesada". Stein piensa que en los ¨²ltimos a?os los que tienen el poder econ¨®mico han comprendido que el arte genera una industria que administra el tiempo libre y s¨®lo entonces la econom¨ªa se ha empezado a. interesar por el arte.
Babelia
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