Ej¨¦rcitos, ?para qu¨¦?
Las fuerzas de tierra se reducen y ampl¨ªan su movilidad
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ANDR?S ORTEGA Los ej¨¦rcitos de tierra occidentales -Incluido el espa?ol- est¨¢n buscando su raz¨®n de ser y su manera de estar. Las tendencias apuntan que los nuevos ej¨¦rcitos de tierra van a reducirse y aumentar su movilidad. Estados Unidos est¨¢ a la cabeza de este movimiento, que siguen otros pa¨ªses occidentales, como Francia, Italia o Espa?a, con la puesta en pie de unidades de despliegue r¨¢pido. Varios factores conducen a ello: las negociaciones de desarme, los recortes en los presupuestos militares o el cambio de la percepci¨®n de las amenazas, entre otros. Con ello, aunque se reducen las posibilidades de conflictos globales, puede acrecentarse la capacidad de intervenci¨®n europea fuera del Viejo Continente.
Hay una crisis moral que afecta a muchas de las fuerzas armadas occidentales, ¨¦sta se agudiza en el caso de los ej¨¦rcitos de tierra en Europa. Algo que no ocurre en Estados Unidos. El ministro de Defensa franc¨¦s, Jean-Pierre Chev¨¦nement, recorre los cuarteles para combatir esa desmoralizaci¨®n. Tambi¨¦n en Francia se debate sobre la oportunidad de ir hacia un ej¨¦rcito profesional a la vez que, seg¨²n oficiales franceses, se produce una crisis de vocaciones. Espa?a, donde se a?aden razones particulares de nuestra historia militar y pol¨ªtica, no escapa a esta cierta desaz¨®n -algunos hablan de desencanto-; otros, de "desmoralizaci¨®n"- entre algunos militares: "Tierra no sabe para qu¨¦ existe", indica un oficial que ve que ha perdido su rumbo profesional.Estados Unidos es la mayor fuente en donde beben las nuevas tendencias. En un estudio titulado Una fuerza estrat¨¦gica para los a?os 1990 y m¨¢s all¨¢ (fechado en octubre de 1989), el jefe del Estado Mayor de] Ej¨¦rcito de Tierra de Estados Unidos, general Carl Vuono, se?alaba: "Aunque parecen estar reduci¨¦ndose algunas amenazas a la seguridad de EE UU, emergen otros retos complejos y peligrosos. ?stos incluyen el terrorismo, el tr¨¢fico de drogas ¨ªlicitas, la proliferaci¨®n de modernos armamentos en naciones en desarrollo potencialmente hostiles y, la inestabilidad regional que amenaza a reg¨ªmenes democr¨¢ticos". Para algunos, ante el decaimiento de la amenaza sovi¨¦tica, los aliados occidentales buscan unos "nuevos b¨¢rbaros". En el, Sur?
El Ej¨¦rcito estadounidense del futuro, indica el estudio patrocinado por Vuorlo, debe ser "vers¨¢til", desplegable y letal", y "el despliegue r¨¢pido ser¨¢ a¨²n m¨¢s importante". En vez de estar desplegadas fundamentalmente fuera de EE UU, las fuerzas de Estados Unidos se repliegan sobre su territorio nacional, desde donde saldr¨¢n en caso de que se considere necesario. Una retirada militar sobre s¨ª mismo. En enero se avanz¨® que EE UU planeaba cerrar diversas bases. Tambi¨¦n se ha anunciado que el Ej¨¦rcito podr¨ªa pasar de 766.000 hombres a 630.000 (algunos medios hablan incluso de 513.000) para 1994-1995. Parte de esta reducci¨®n vendr¨¢ de la retirada parcial de fuerzas de Europa en el contexto de las negociaciones de las fuerzas convencionales en Europa (CFE) de Viena.
Los sovi¨¦ticos, tambi¨¦n
El Ej¨¦rcito de Tierra norteamericano es el arma que estaba, y est¨¢, m¨¢s ligada a la amenaza sovi¨¦tica en Europa, y como ¨¦sta se reduce, habr¨¢ de reestructurarse en profundidad. Hay que se?alar que tambi¨¦n la URSS va hacia un Ej¨¦rcito con mayor movilidad estrat¨¦gica, seg¨²n los expertos consultados. El pasado 24 de enero. el presidente norteamericano, George Bush, anunci¨® la pr¨®xima publicaci¨®n de un plan de reestructuraci¨®n de las fuerzas norteamericanas, apuntando a una nueva estrategia basada en fuerzas de intervenci¨®n r¨¢pida para operaciones puntuales y otras.
Es EE UU quien m¨¢s ha desarrollado la doctrina sobre unidades ligeras para hacer frente a conflictos de baja intensidad o para reforzar unidades m¨¢s pesadas. La movilidad de las unidades de infanter¨ªa ligera queda reflejada, seg¨²n medios militares, en los siguientes datos: trasladar una divisi¨®n de infanter¨ªa ligera requiere 500 vuelos de C-141 (Galaxy), una divisi¨®n paracaidista, 750 vuelos; una motorizada o de asalto ligero, m¨¢s de 1.250 vuelos, y una mecanizada. cerca de 3.000 vuelos. La unidad ligera tiene una gran movilidad estrat¨¦gica, estiman expertos militares, aunque su movilidad t¨¢ctica es limitada.
Es en estos modelos en los que se inspiran otras nuevas formaciones. Italia, en su nuevo modelo de defensa, quiere mantener una limitada fuerza de intervenci¨®n r¨¢pida para su empleo tanto en territorio italiano como en el exterior. Francia tambi¨¦n ha estado llevando a cabo un estudio -Arnz¨¦e 2000- sobre el futuro de su Ej¨¦rcito de Tierra. El ministro de Defensa, Jean-Pierre Chev¨¦nement, aseguraba a finales de enero pasado que-unareducci¨®n notable del formato de] Ej¨¦rcito de Tierra no est¨¢ hoy en el orden del d¨ªa".
La Fuerza de Acci¨®n R¨¢pida (FAR) francesa tiene un papel de vanguardia y de reserva estrat¨¦gica para hacer frente, seg¨²n la doctrina francesa, a amenazas m¨¢s diversificadas en su naturaleza, direcci¨®n e intensidad.
Los brit¨¢nicos se enfrentan a problemas a¨²n m¨¢s graves. En la guerra de las Malvinas, fueron las fuerzas de tierra principal mente las que reconquistaron el territorio. Pero la raz¨®n de ser de su Ej¨¦rcito est¨¢ en su presencia en Alemania: el British Ariny of the Rhine (BAOR, Ej¨¦rcito Brit¨¢nico del Rin). Los ¨²ltimos acontecimientos en Europa pueden llevar a pensar que la presencia brit¨¢nica en el continente no va a ser eterna. ?Qu¨¦ hacer entonces con el Ej¨¦rcito?
Planteamiento espa?ol
En este contexto internacional se produce el planteamiento espa?ol sobre el futuro de] Ej¨¦rcito de Tierra y su configuraci¨®n, cuando ya las negociaciones internacionales sobre control de armamento comienzan a afectar directamente a nuestras Fuerzas Armadas. Algunos militares estiman sin embargo que las conversaciones de Viena son una "excusa para reducir el Ej¨¦rcito de Tierra".
?ste dispone actualmente de unos 195.000 hombres. Seg¨²n fuentes militares, en el Estado Mayor se barajan planes de reducci¨®n que llevar¨ªa el total a unos 125.000. Las brigadas operativas pasar¨ªan (le 15 a 10. Analistas espa?oles se?alan que la propuesta inicial sovi¨¦tica en las negociaciones de Viena contemplaba un techo de 150.000 hombres en la pen¨ªnsula Ib¨¦rica, es decir, Espa?a Y Portugal sumados.
El Ej¨¦rcito, seg¨²n algunos militares consultados, es necesario frente a posibles amenazas provenientes del Magreb, "independientemente de que Ceuta y, Melilla sean espa?olas". En caso de conflicto es el Ej¨¦rcito de Tierra el que debe ultimar cualquier acci¨®n de envergadura, estiman los defensores de mantener este Arma a niveles importantes.
"El Ej¨¦rcito espa?ol se jug¨® su futuro el d¨ªa en que se decidi¨® la
Ej¨¦rcitos, ?para qu¨¦?
no integraci¨®n militar en la OTAN", opina otro experto militar. Seg¨²n un informe sobre el Escenario OTAN para el a?o 2000, del espa¨®l Grupo de Estudios Estrat¨¦gicos (GEES), que preside Rafael Bardaj¨ª, ante el "progresivo vaciamiento" de efectivos del hasta ahora Frente Central, crece en importancia la "capacidad de reintroducir en tiempos de crisis" unidades en la zona y la capacidad para la proyecci¨®n de la 1erza". "Las unidades ligeras Je alta movilidad ser¨¢n imprescindibles en los ej¨¦rcitos del ma?ana".Este inf¨®rme ve que, "de no impulsarse de nuevo la cooperaci¨®n entre los doce -o en el seno de la Uni¨®n Europea Occidental (UEO)-", las tendencias apuntan hacia "una progresiva nacionalizaci¨®n de las pol¨ªticas de defensa en Europa, habida cuenta de que la OTAN camina hacia su desestructuraci¨®n en tanto que ¨®rgano permanente de planificaci¨®n militar colectiva".
Pero justamente estos cambios hacen que la hoy "periferia de la OTAN cobre objetivamente mayor importancia". A la vez, las reducciones pactadas en Viena llevan a que las fuerzas residuales -entre ellas, las espa?olas- cobrentina mayor importancia.
Y de ah¨ª que concluya el GEES: "La posibilidad de contar con una fuerza de intervenci¨®n, despliegue o refuerzo r¨¢pido podr¨ªa servir como conductor de este redimensionamiento de las misiones del Ej¨¦rcito de Tierra".
Ej¨¦rcito peque?o y vers¨¢til
El Ej¨¦rcito espa?ol va hacia una configuraci¨®n "m¨¢s peque?a y, m¨¢s vers¨¢til", se?alaba recientemente en un seminario el experto norteamericano Diego Ruiz Palmer. Se configuraba para el movimiento estrat¨¦gico a trav¨¦s del territorio espa?ol y en Europa continental.
Las fuerzas de intervenci¨®n son "lo m¨¢s bonito para un profesional", seg¨²n un militar de alta graduaci¨®n. Para otro oficial, la "Fuerza de Intervenci¨®n R¨¢pida (FIR) es la ¨²ltima posibilidad de que el Ej¨¦rcito de Tierra busque un para qu¨¦".
Del tema de la FIR y de la FAR (Fuerza de Acci¨®n R¨¢pida, en la que participan los trees Ej¨¦rcitos), sin embargo, se habla actualmente poco, estiman analistas espa?oles. Aunque se disponga de las fuerzas que puedan componerla, la capacidad de transporte, seg¨²n estos medios. es "muy deficitaria". Y medios militares a?aden: "No tenemos., ni los aliados externos nos dar¨ªan, esos medios de transporte", Estas fuentes aeguran que "no, hay la capacidad para mover un. batall¨®n paracaidista, 700 hombres, de una sola oleada"
La FIR -cuya funci¨®n tampoco est¨¢ clara- podr¨ªa ser transportada por tierra, mar o aire. Las ventajas militares de la, nueva red de autov¨ªas y autopistas en Espa?a no escapan a los; observadores.
En todo caso, todas estas; transformaciones van despacio. "Una cosa es lo que se quiere, otra la realidad. Todo es m¨¢s lento de lo que parece", se?ala un oficial espa?ol. Si el Pent¨¢gono est¨¢ tratando de desarrollar un nuevo carro (le combate ligero, Newsweek recordaba que "se tarda un a?o en hacer crecer los cristales utilizados en el sistema ¨®ptico del tanque MIAI".
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