El compa?ero de la mujer muerta en un prado se declara culpable
M¨¢ximo Urrea Perucha, el compa?ero de la mujer muerta el s¨¢bado en un prado, ha cambiado totalmente su versi¨®n de los hechos. No fueron unos motoristas los que mataron a su compa?era ni el hecho ocurri¨® en un prado cercano a El Pardo. Los acontecimientos tuvieron lugar en Valdemorillo, y ¨¦l fue quien dispar¨® accidentalmente contra Carolina Ferreras con un bol¨ªgrafo pistola. La Brigada Provincial de Polic¨ªa Judicial, que ten¨ªa dudas sobre la primera versi¨®n dada por Urrea, le detuvo en la noche del lunes.
M¨¢ximo Urrea Perucha, una vez detenido, ha declarado a la polic¨ªa que ¨¦l fue el autor del disparo que termin¨® con la vicia de su compa?era sentimental, Carolina Ferreras R¨¢bano, de 27 a?os.Seg¨²n fuentes policiales, Urrea, un jardinero de 40 a?os con 16 antecedentes delictivos por robo, ha declarado que el s¨¢bado estaba con su compa?era y la hija de ¨¦sta, de dos a?os, pasando la tarde en una parcela de un camping de Valdemorillo que la pareja ten¨ªa alquilada y en la cual hab¨ªan aparcado una caravana.
Carolina se dirigi¨® al coche de Urrea y cogi¨® su bol¨ªgrafo pistola, un arma con un mecanismo muy simple, con ¨¢nimo de hacer un disparo en el campo. La idea no debi¨® gustar al jardinero, que, siempre seg¨²n su propia versi¨®n de los hechos, forceje¨® con Carolina para arrebatarle la pistola. Fue durante esa disputa cuando fortuitamente se le dispar¨® el arma, hiriendo gravemente a su compa?era en el pecho.
Hallada la pistola
Los hechos ocurrieron el s¨¢bado sobre las 18.30. El agresor traslad¨® a su compa?era malherida hasta la residencia sanitaria La Paz, donde ingres¨® cad¨¢ver.
La primera versi¨®n del compa?ero de la v¨ªctima fue un ilustrado relato en el que dos motoristas aparec¨ªan cuando la familia jugaba tranquilamente a la pelota y exig¨ªan a la pareja la entrega inmediata de las joyas y el dinero que portasen.
Carolina, seg¨²n esta primera declaraci¨®n, se resisti¨® a dar a los atracadores la cadena de oro que llevaba en el cuello. Urrea decidi¨® entonces buscar un arma defensiva, y cuando corr¨ªa a su autom¨®vil a coger un garrote que lleva en el coche habitualmente oy¨® el disparo y vio a su compa?era caer al suelo con las manos aferradas al pecho.
Los atracadores, siempre seg¨²n la primera versi¨®n de Urrea, subieron de nuevo a la motocicleta y huyeron sin apoderarse de las joyas de las v¨ªctimas al advertir que Carolina hab¨ªa quedado tendida en el suelo gravemente herida.
Esta versi¨®n de los hechos cont¨® con el aval de ser un caso corriente para la polic¨ªa, que ha conocido varios casos de atraco a excursionistas en la Casa de Campo, monte de El Pardo y otras zonas de Madrid frecuentadas por familias que van a pasar una jornada festiva.
El relato ten¨ªa cierta coherencia, y adem¨¢s Urrea dio la cara en todo momento. Cuando la polic¨ªa lleg¨® al centro hospitalario, avisada por los m¨¦dicos de La Paz, Urrea se hab¨ªa ausentado para dejar a la ni?a con su familia, pero regres¨®, relat¨® los hechos y se le dej¨® marchar a casa.
No obstante, el grupo de homicidios de la Brigada Provincial de Polic¨ªa Judicial investig¨® y hall¨® algunas contradicciones.
Finalmente, en la noche del lunes, los investigadores acudieron al domicilio de M¨¢ximo Urrea, y ¨¦ste, ante la evidencia de los hechos, admiti¨® la falsedad de su primera versi¨®n.
La polic¨ªa, siguiendo las Indicaciones del detenido, encontr¨® a ¨²ltima hora de ayer el bol¨ªgrafo pistola del calibre 22 en una alcantarilla de la calle de Armenteros, en el barrio del Pilar. Junto a ella se localizaron 15 cartuchos.
?ste hab¨ªa arrojado el bol¨ªgrafo pistola, un arma dificil de encontrar seg¨²n la polic¨ªa, desde el coche cuando iba camino del hospital. Seg¨²n el detenido hab¨ªa adquirido el arma en Las Ramblas de Barcelona.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.