Recetas oficiales

Me dirijo a usted para exponerle y hacer p¨²blico, si lo estima conveniente, una pr¨¢ctica con la cual la Seguridad Social se ahorra dinero en subvenciones sobre los medicamentos, en detrimento del bolsillo de los usuarios, suponi¨¦ndoles a ¨¦stos una mayor participaci¨®n en la cotizaci¨®n que obligatoriamente se les detrae de la correspondiente n¨®mina mensual.Desde el a?o 1988 los hospitales y servicios de urgencia de la Seguridad Social no imparten recetas oficiales (subvenci¨®n del 60% sobre el importe de los medicamentos).

Tras una intervenci¨®n quir¨²rgica en el hospital, en el informe provisional de alta, dada en un s¨¢bado, nos indican el tratamiento posoperatorio a seguir con tal o cual medicamento, instruy¨¦ndonos verbalmente que lo consigamos en la farmacia de guardia hasta que el lunes siguiente, una vez conseguida la receta oficial del m¨¦dico de cabecera, podamos canjearla por el 60% subvencionado.

Pero resulta que las farmacias tienen absolutamente prohibido anticipar los medicamentos de la forma descrita anteriormente, y esto lo saben los m¨¦dicos.

As¨ª pues, si no queremos tener que volver por el hospital para ser atendidos nuevamente, nos costeamos ese 60%. Y si queremos recuperarlo, tal vez podamos reclamarlo al Departamento de Inspecci¨®n de la Seguridad Social (hecho que no he constatado), pero ?nos merece la pena reclamar 700 pesetas cuando nos tenemos que gastar m¨¢s dinero en desplazamientos y tiempo de trabajo? ?Cu¨¢ntos reclaman? ?Cu¨¢nto dinero se ahorra con esta pr¨¢ctica la Seguridad Social si sumamos los importes que cada fin de semana, e incluso d¨ªa a d¨ªa, nos costeamos los que ya estamos cotizando mes a mes mediante la aportaci¨®n de unos ingresos que no vemos?

Una de dos: o que levanten la prohibici¨®n a las farmacias o que entreguen en los hospitales y servicios de urgencia medicamentos suficientes a cuenta.-