Fujimori: "Combatir¨¦ la pobreza con desarrollo"
El rival de Vargas Llosa para la presidencia peruana insiste en que es necesario celebrar la segunda vuelta electoral
"Combatir¨¦ la pobreza con el desarrollo", asegura Alberto Fujimori, de 51 a?os, de ascendencia japonesa, que el pasado d¨ªa 8 dio la gran sorpresa al pisar los talones al escritor Mario Vargas Llosa en la primera vuelta de las elecciones presidenciales peruanas, lo que le convirti¨® en gran favorito para imponerse en la segunda, el pr¨®ximo junio. Fujimori, en una entrevista concedida a EL PA?S en Lima, afirma para defender la segunda vuelta: "El se?or Vargas Llosa y yo no podernos decidir a puerta cerrada el destino de la naci¨®n mediante dos votos".
La entrevista con Fujimori se efectu¨® la noche del mi¨¦rcoles (madrugada del jueves en Espa?a) y su propio domicilio fue v¨ªctima de un apag¨®n que afect¨® a toda Lima. Fue una noche peruana, con un polic¨ªa muerto, m¨¢s de 20 civiles heridos, una treintena de atentados con explosivos, un coche bomba, 50 detenidos y fogatas en los montes que dibujaban la hoz y el martillo. Fujimori, que se define como un pol¨ªtico de centro, defiende la iniciativa privada y un Estado orientador "no planif¨ªcador-productor". Sonriente, se?ala que Jap¨®n no ha reaccionado todav¨ªa a su triunfal aparici¨®n pol¨ªtica; tampoco el Departamento de: Estado norteamericano. "Debe ser la sorpresa", dice.Pregunta. ?Qu¨¦ piensa de la respuesta de Sendero Luminoso al resultado electoral?
Respuesta. No es una reacci¨®n frente a las elecciones. Ellos siguen su rutina de crear terror, de destruir infraestructura, particularmente la el¨¦ctrica. Durante las elecciones no hubo reacci¨®n por parte de Sendero ha llamado la atenci¨®n la poca cantidad de votos nulos y viciados, una de las m¨¢s bajas de las ¨²ltimas d¨¦cadas. ?ste es un atentado m¨¢s de Sendero.
P. ?C¨®mo combatir¨ªa la subversi¨®n un Gobierno presidido por usted?
R. Este combate depende de la estrecha relaci¨®n entre el Ejecutivo y las fuerzas armadas, evitando las violaciones de los derechos humanos que han existido. La acci¨®n de las Fuerzas Armadas, sobre todo en las zonas de emergencia, debe ampliarse a proyectos de desarrollo. Sendero se ataca, entre otras cosas, con un servicio de inteligencia y luchando contra la pobreza.
P. ?Y c¨®mo combatir¨ªa la pobreza?
R. Combatir¨¦ la pobreza con el desarrollo del pa¨ªs. Buscando proyectos de inversi¨®n. No queremos aplicar un programa recesivo. La crisis econ¨®mica del pa¨ªs tiene esa caracter¨ªstica muy marcada: una recesi¨®n profunda. Queremos reactivar nuestra econom¨ªa, antes que nada, en varios sectores. Per¨² es un pa¨ªs rico en recursos naturales y tambi¨¦n en el sector industrial, donde tenemos capacidad competitiva para la exportaci¨®n. Por supuesto, tambi¨¦n esperamos contar con el apoyo de la cooperaci¨®n internacional como la mayor¨ªa de los partidos lo tiene previsto. El problema principal es la falta de rentabilidad. Hay una capacidad instalada, ociosa. Por ejemplo, queremos hacer productivas las minas, simplemente d¨¢ndoles seguridad con el apoyo de las fuerzas armadas.
Generar confianza
P. ?Qu¨¦ se puede hacer contra la inflaci¨®n y, sobre todo, contra la hiperinflaci¨®n?
R. El proceso inflacionario se debe en un 15% a la devaluaci¨®n de la moneda, y en un 10% a otras causas inherentes a los procesos econ¨®micos. Las expectativas especulativas hacen el resto. Por esto tenemos que establecer un Gobierno que genere confianza en el pa¨ªs, en los inversionistas, en los empresarios, y en los trabajadores, con una pol¨ªtica monetaria y fiscal conducida de forma muy racional, muy t¨¦cnica.
P. ?A qu¨¦ se debe el fen¨®meno Fujimori?
R. Cuando yo he enarbolado la bandera de la honradez, con una trayectoria que lo respalda, se me ha cre¨ªdo. Hay varios factores que me han ayudado. El de la honradez es uno de ellos. Tambi¨¦n mi origen japon¨¦s. La candidatura a la presidencia de la Rep¨²blica surgi¨® hace como un ano pero no s¨²bitamente, sino como producto de una evoluci¨®n y tras comprobar que todo es un desastre. Los partidos pol¨ªticos y los pol¨ªticos profesionales no tienen capacidad para conducir el pa¨ªs. Son los responsables de la crisis y, de verdad, si la situaci¨®n no fuera tan grave no estar¨ªa en la pol¨ªtica. Estoy asumiendo una grav¨ªsima responsabilidad dada la actual situaci¨®n de Per¨².
P.?Cu¨¢nto dinero se ha gastado en su campa?a?
R. No s¨¦ exactamente cu¨¢ntos d¨®lares, pero una miseria. No, no he mencionado a nadie la cantidad y en ciertas revistas est¨¢ inflada. Seguramente la proporci¨®n ha sido de 1.000 a 1: 1.000 de Frente Democr¨¢tico (Fredemo) y 1 de Cambio 90. Es tan poco que entre pocos amigos lo pudimos recolectar, realmente poco.
P. ?Qui¨¦n hizo todo el montaje publicitario de su candidatura?
R. La publicidad la he llevado personalmente yo, sin hacer caso a los publicistas y pol¨ªticos. Todo lo tengo anotado. Se merece un libro.
Vargas Llosa debe seguir
P. ?De todas maneras usted va a una segunda vuelta electoral?
R. El se?or Vargas Llosa y quien le habla no podemos decidir a puerta cerrada el destino de la naci¨®n mediante dos votos. Le plante¨¦ nuestra responsabilidad de continuar con la segunda vuelta. Espero que Vargas Llosa no renuncie. En caso afirmativo habr¨ªa que analizar el punto de vista legal y constitucional de esta decisi¨®n.
P. ?En qu¨¦ basa su antagonismo con Vargas Llosa?
R. En que ¨¦l est¨¢ respaldado por los viejos partidos y representa la fusi¨®n del poder econ¨®mico con el poder pol¨ªtico. Esa fusi¨®n no conviene para el gobierno del pa¨ªs.
P. Usted ya estuvo en Espa?a. ?Qu¨¦ recuerda del pa¨ªs9
R. Estuve en el a?o 1965. Conoc¨ª Barcelona, Alicante, Valencia, Granada, Madrid, Toledo. Es un pa¨ªs maravilloso, me gusta.
P. ?Le gustan los toros?
R. Poco. En realidad no asisto a los toros. He ido varias veces, por supuesto, pero no, no le he encontrado el sabor.
P. ?Su mandato va a tener toques japoneses?
R. Quiz¨¢ una de mis caracter¨ªsticas sea realmente la honradez, y la segunda la disciplina. Lo he expuesto en varios m¨ªtines y tienen gran acogida. Per¨² necesita un poco de organizaci¨®n, de orden, de disciplina, menos caos.
P. Hay cola para inscribirse en su movimiento.
R. Son incontables los adeptos. Es toda una fiebre a nivel nacional. Es una especie de Fujiman¨ªa, como dice usted. Felizmente esta Fujiman¨ªa tiene un sustento t¨¦cnico, un programa de gobierno, un equipo t¨¦cnico.
P. Se dice que los evangelistas tienen que ver mucho en su campa?a.
R. Los evang¨¦licos me han apoyado mucho y son de gran ayuda porque conocen el mecanismo de la evangelizaci¨®n y sus m¨¦todos, me parece, han sido utilizados. Aunque yo soy cat¨®lico mi movimiento no tiene nada que ver, absolutamente nada, con lo religioso.
"Me siento cien por cien peruano"
A. M. "Tengo un gran n¨²mero de t¨ªos y familiares en Jap¨®n", afirma Fujimori, para quien el racismo que ha surgido a ra¨ªz de su presencia en la liza electoral ha sido instigado por sus enemigos Pol¨ªticos. "Si hubiera tal racismo", asegura el cand¨ªdato, "en unos sectores que han perdido un tanto sus expectativas, yo no tendr¨ªa ese apoyo mayoritario de la poblaci¨®n. Ese peque?o sector racista ni siquiera es de. todo el Fredemo [bloque de derecha que lidera el escritor Marlo Vargas Llosal".
Fujimori insiste en que hay una manipulaci¨®n de su ascendencia ¨¦tnica. "Se ha escogido a j¨®venes y dirigentes del Fredemo para que declaren contra m¨ª, y que lo ¨²nico que tienen son ojos achinados y su carn¨¦ del Fredemo. La colonia nunca debe pronunciarse como tal. No es una agrupaci¨®n pol¨ªtica ni civil. Es una comunidad que est¨¢ integrada. Yo no distingo la comunidad peruano-japonesa de la nacional. Ese concepto de comunidad minoritaria como una etnia debe desaparecer. Soy partidario de una integraci¨®n total. Me siento cien por cien peruano".
Fujimori reconoce: "Entiendo japon¨¦s. Mi lengua es el japon¨¦s. Ya no lo hablo con fluidez porque tengo 51 a?os, pero hasta los 6 habl¨¦ a la perfecci¨®n japon¨¦s...".
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
?Tienes una suscripci¨®n de empresa? Accede aqu¨ª para contratar m¨¢s cuentas.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.