La sensaci¨®n de poder alarga nuestra vida

La conciencia de poder, o su carencia, est¨¢ relacionada con la capacidad para combatir las enfermedades. Judith Rodin, psic¨®loga de la universidad de Yale, afirma que as¨ª como el estr¨¦s incontrolado elimina el sistema inmunitario -seg¨²n los experimentos realizados con animales y con seres humanos-, la sensaci¨®n de dominio puede tener efectos beneficiosos sobre la salud en personas de cualquier edad, y muy especialmente en los ancianos.

Rodiri ha trabajado en varias investigaciones realizadas sobre la propia conciencia de poder. En uno de sus primeros estudios, realizado a mediados de los setenta, un grupo de pacientes de avanzada edad de una cl¨ªnica fue estimulado a hacer un mayor n¨²mero de opciones diarias para sentir por tanto que ten¨ªan m¨¢s responsabilidades y dominio sobre su vida. Intervinieron en cosas tales como la hora de comer, cu¨¢ndo pod¨ªan recibir visitas, qu¨¦ pel¨ªculas ve¨ªan, qui¨¦n pod¨ªa entrar en sus habitaciones. A un grupo similar de la misma cl¨ªnica, el administrador le dijo lo importante que era ¨¦sta y que el personal quer¨ªa colaborar m¨¢s con ellos; sin embargo, a los miembros de este grupo no se les dio ninguna oportunidad para tener mayor dominio sobre su vida.

Visitas

Dieciocho meses m¨¢s tarde, Rodin y sus colegas observaron que los pacientes a los que se les hab¨ªa dado responsabilidad y dominio se mostraban m¨¢s atentos y activos que aquellos a los que se les hab¨ªa estimulado a pensar que el personal intentar¨ªa satisfacer sus necesidades. No obstante, lo m¨¢s importante fue que el grupo responsable, o con mayor dominio, mostr¨® de manera significativa una mejor¨ªa en la salud. En cambio, con el otro grupo no sucedi¨® lo mismo. En ¨¦ste, 18 meses m¨¢s tarde, se pudo comprobar que hab¨ªa habido el doble de fallecimientos que en el grupo responsable."Ejercimos una gran influencia sobre lo que suced¨ªa en aquella cl¨ªnica", comenta Rodin. A partir de entonces, ella y otros investigadores han hecho descubrimientos similares con otros pacientes de diferentes cl¨ªnicas. Uno de los estudios destaca la importancia de la conciencia de poder al mostrar lo que sucede cuando ¨¦sta no existe. El psic¨®logo Richard Schulz, Ph D y sus colegas de la universidad de Pittsburgh permitieron que los pacientes pudieran controlar de alguna manera las visitas que recib¨ªan de estudiantes universitarios locales.

Los investigadores descubrieron que el tener control sobre los visitantes, o por lo menos informaci¨®n previa sobre ellos, hizo que los pacientes estuvieran mucho m¨¢s activos, contentos y sanos. Los experimentos terminaron al mismo tiempo que las visitas de los estudiantes. Dos a?os m¨¢s tarde, los investigadores comprobaron que aquellos que hab¨ªan tenido control sobre la planificaci¨®n de las visitas y que despu¨¦s se las hab¨ªan suprimido (as¨ª como el control), estaban psicol¨®gicamente peor que los otros. Esto, dice Rodin, supone que la p¨¦rdida de control puede ser a¨²n peor que no tenerlo en absoluto.

?C¨®mo puede un factor psicol¨®gico como la conciencia, poder causar importantes efectos en nuestra. salud f¨ªsica?. Seg¨²n Rodin la gente que cree ejercer un mayor grado de control tiene mayores posibilidades de sentir que sus acciones pueden cambiar su vida porque se siente m¨¢s capacitada para cuidar mejor de s¨ª misma, al comer alimentos m¨¢s sanos y realizar ejercicio.

La conciencia de poder tambi¨¦n parece tener un efecto directo sobre el cuerpo. En primer lugar, reduce el estr¨¦s. La raz¨®n se halla en la llamada respuesta luchar -o- huir. Cuando nos enfrentamos a un tigre furioso, a un empleo dif¨ªcil o simplemente a alguien que nos dice cu¨¢ndo debemos comer, nuestro cuerpo se prepara de inmediato frente al desaf¨ªo (luchar o huir), produciendo hormonas que aumentan nuestro ritmo de respiraci¨®n, el pulso y la presi¨®n sangu¨ªnea.

Una vez que el estr¨¦s desaparece, los niveles de hormonas y las reacciones corporales vuelven a la normalidad. Pero si nuestra vida se ve estresada, estamos siempre tensos. Con el tiempo, este continuo estado de tensi¨®n provocar¨¢ un agotamiento f¨ªsico y da?os corporales. Se ha relacionado la alta presi¨®n, algunas enfermedades cardiacas, la artritis y ciertos tipos de ¨²lcera con el excesivo estr¨¦s.

Respuesta lenta

A medida que se envejece, explica Rodin, nuestros mecanismos reguladores biol¨®gicos son cada vez menos efectivos. "No es que se deterioren", dice. "Simplemente la respuesta es m¨¢s lenta. Por tanto, si uno est¨¢ estresado y segrega hormonas en respuesta a ese estr¨¦s, el volumen de esas hormonas se mantiene m¨¢s elevado en una persona mayor que en otra joven. A lo largo del tiempo esto comienza a socavar el sisterna". No obstante, si se tiene mayor conciencia de poder, el estr¨¦s ser¨¢ menor. En este caso, el sistema no est¨¢ tan seriamente acosado, el volumen de las hormonas relacionadas con el estr¨¦s no se mantiene elevado durante mucho tiempo y se causa menos da?o al cuerpo.Rodin ha estudiado esta reacci¨®n en cierto n¨²mero cie personas que hab¨ªan pasado recientemente por hechos muy estresantes, tales como un cambio no deseado o una enfermedad en la familla. Comprob¨® que la gente que hab¨ªa vivido los acontecimientos m¨¢s incontrolados hab¨ªa eliminado, de manera significativa, los sistemas inmunitarlos haci¨¦ndolos as¨ª menos eficaces para combatir infecciones.

Si un factor psicol¨®gico, como ejercer un determinado dominio, puede tener un importante efecto sobre nuestros cuerpos, entonces ?qu¨¦ proporci¨®n del deterioro mental y fisico, que por lo com¨²n asociamos con la edad, se debe realmente a un envejecimiento psicol¨®gico? No tanto como el que esper¨¢bamos, aclara Rodin. Hasta hace muy poco, explica, cuando no exislia una enfermedad definida, la disminuci¨®n mental y flisica se atribu¨ªa al envejecimiento. "Muchos de nosotros", dice, "creen ahora que se ha exagerado con frecuencia sobre el papel del envejecimiento en este desgaste".

Rodin comenta que parte de este deterioro que viene con la edad puede explicarse en t¨¦rminos de factores que no tienen relaci¨®n con el proceso natural de envejecimiento. Por ejemplo, aumentos de la presi¨®n sangu¨ªnea, la gordura y el colesterol (factores todos ellos que pueden aumentar el riesgo de una enfermedad cardiaca) han sido generalmente relacionados con la edad.

Mientras estos cambios resultan comunes en las sociedades industrializadas, son, por el contrario, relativamente raros en las no industrializadas y pastoriles. Muchos de los cambios que atrlbulmos a la edad pueden estar relacionados con la dieta, el ejerciclo y factores psicol¨®gicos. Si es as¨ª, han aumentado las perspectivas de evitar o hacer retroceder los desgastes que vienen con la edad.

Cambio de hora

Para Rodin y sus colegas, uno de esos pasos implicar¨ªa incremeritar la conciencia de poder. Su trabajo ha demostrado que dar a la gente ma-yores opciones de control puede cambiar su corriportamiento y, puede como resultado mejorar la salud. Naturalmente, la mayor parte de su trabajo se realiz¨® en instituciones donde las cosas sencillas, tales como cambiar la hora de las comidas, de la proyecci¨®n de una pel¨ªcula, pueden resultar muy iniportantes para alquien que tierle pocas cosas que controlar."La conciencia de poder es muy importante", explica Rodin, "cuando se lleva a cabo en sectores que a uno le interesan".

Rodin sugiere que no se pierda el tiempo tratando de ejercer control en sectores que no son importantes para nosotros. En cambio, dice: "Imag¨ªnese lo que es importante para usted; ¨¦sas son las ¨¢reas donde el control producir¨¢ su mejor efecto".