Los nervios de los veteranos

Pedro Piqueras, Elena S¨¢nchez, Rosa Mar¨ªa Mateo, Mat¨ªas Prats y Jes¨²s Hermida tuvieron que estrenarse ante las c¨¢maras, el pasado lunes, con los nuevos informativos de TVE-1. Sus a?os de veteran¨ªa no pudieron impedir los nervios propios del estreno: carreras, paseos por la Redacci¨®n, ensayo de los guiones. Luego se mostrar¨ªan templados ante las c¨¢maras. La procesi¨®n iba por dentro. Ram¨®n Colom, director de TVE, satisfecho por el resultado de la primera jornada, declar¨®: "Esto es el principio de lo que queremos hacer".

Elena S¨¢nchez lleg¨® al Estudio apenas dos minutos antes de las tres de la tarde. En la sala de maquillaje se quejaba de su larga melena rubia. "Ya no hay tiempo para hacer una trenza" recriminaba la peluquera. En el control, el realizador, Eugenio Calder¨®n, exig¨ªa silencio a todos, mientras desgranaba una retah¨ªla de ¨®rdenes al regidor y ayudantes, momentos antes de salir a antena. Son¨® la nueva sinton¨ªa y apareci¨® la cabecera. Tres c¨¢maras, una de ellas gr¨²a, apuntaban a los bustos de los presentadores. No se les vio los pantalones vaqueros.Por unos segundos no funcion¨® el autocue (aparato en el que leen las noticias los locutores) y Elena S¨¢nchez hech¨® mano de su gui¨®n. La informaci¨®n del caso Naseiro lleg¨® por los pelos, despu¨¦s el sida y el embarazo de las j¨®venes espa?olas. No hab¨ªa grandes noticias. Piqueras y Elena compartieron entradillas. Se cayeron algunas informaciones por falta de tiempo. Pas¨® el trago. "?Lo hemos hecho muy mal?", preguntaron los tres. Felicitaciones, apretones de mano y muchos besos les acompa?aron hasta la Redacci¨®n, en el primer piso. "El dire quiere veros".

Nadie en la Redacci¨®n sab¨ªa que Mat¨ªas Prats, hijo, era la persona elegida a ¨²ltima hora por la direcci¨®n para presenta el segundo telediario en compa?¨ªa de la veterana locutora Rosa Mar¨ªa Mar¨ªa Mateo. "Es una decisi¨®n sorpresa", dijo Mar¨ªa Antonia Iglesias, directora de los servicios informativos.

Rosa aparentaba haber dejado los nervios en la puerta de Piruli, pero rechaz¨® varias llamadas, una de ellas del Club Siglo XXI. "No, ahora no puedo hacer ninguna declaraci¨®n", dec¨ªa a los periodistas. Mat¨ªas Prats entr¨® en la Redacci¨®n campechano, con temple. "No se lo que har¨¦, yo no valgo para esto", dijo bromeando. En el plat¨®, Rosa Mar¨ªa Mateo y Mat¨ªas Prats se entrecruzaron risas y calificativos cari?osos ante la prensa.

El canal p¨²blico de la televisi¨®n holandesa ten¨ªa permiso para grabar en directo. Los periodistas espa?oles fueron desalojados por los guardias de seguridad del edificio. "Son ¨®rdenes, y aqu¨ª no valen explicaciones", dijeron de forma tajante. En control, Julio S¨¢nchez advirti¨® con un contundente grit¨® a Mat¨ªas: "Est¨¢te quieto, macho, que te sales de la pantalla".

Durante la emisi¨®n del primer v¨ªdeo, Mat¨ªas brome¨® ante la orden del realizador de entrar despu¨¦s: "?Tengo yo que leer la segunda? No s¨¦ nada. A m¨ª no me han dicho nada". "D¨¦jate de cachondeos. Quince segundos y entras, ?vale?". Rosa abandon¨® el plat¨® r¨¢pidamente, segundos despu¨¦s de finalizar el informativo. A la pregunta, ante la puerta del ascensor, de si le gustar¨ªa m¨¢s presentar el telediario en solitario, contest¨® con una mirada inquisitiva: "?Por qu¨¦ dices eso?". Todos los responsables del segundo telediario sub¨ªan a la s¨¦ptima planta. Colom quer¨ªa intercambiar impresiones de nuevo. Jes¨²s Hermida y su equipo llevaban ya 15 horas en la Redacci¨®n. "El Jefe es exigente, pero no un negrero", afirm¨® uno de los periodistas del programa. Almudena Ariza, la encargada de la cr¨®nica de la noche, declar¨®: "Estoy muy nerviosa. Sobre todo por la c¨¢mara". Para Macarena Salazar, el proyecto "es maravilloso. Siempre es estupendo empezar algo nuevo". A las 12.25 el escenario de los anteriores telediarios se transform¨® para Diario noche. "Hermida es el mismo de siempre", comentan en control. Al final, todos afirman: "Esta banda horaria ya es nuestra". Y Hermida dice: "La gente vendr¨¢ al programa porque en mis palabras hay nobleza".