Un joven campe¨®n
Salvador Castell¨® Cano, de 17 a?os, campe¨®n en el trofeo de boulder de San Isidro en la modalidad de escalada interior, celebrado el a?o pasado en Madrid, explica que "este tipo de competici¨®n suele hacerse en pabellones cerrados". "Al aire libre es la primera vez que se realiza", especifica.El boulder empez¨® a practicarse hace 14 a?os en las monta?as de Yosemite, en Estados Unidos, donde existen enormes paredes de unos mil metros de altura.
Para Castell¨®, "los movimientos que vas superando en la escalada boulder suponen una satisfacci¨®n en la que est¨¢ en juego la continua superaci¨®n de uno mismo". Aunque Castell¨® lleva tan s¨®l¨® cuatro a?os practicando este deporte, se ha convertido en poco tiempo entre sus amigos y compa?eros en la estrella del boulder. En los ambientes de trepadores, Castell¨® es conocido como El Figura.
Concentraci¨®n
La concentraci¨®n es muy importante para Castell¨®. Antes de iniciar la escalada -sentado en una alfombrilla junto a su novia Patricia, que ha obtenido cierta categor¨ªa entre sus compa?eros por su estilo de escalada-, contempla el suelo con la mirada baja. Poco despu¨¦s se cambia de zapatillas y se pone unos pies de gato que se adhieren de forma especial a la pared de piedra. Cuando llega el momento de la escalada, Castell¨® se acerca lentamente a la roca, la contempla, la estudia, la examina y despu¨¦s de un r¨¢pido impulso intenta dominarla.Para ello se sujeta con los brazos y las piernas e intenta superar su altura en el menor tiempo posible. Poco a poco se desplaza a lo ancho y a lo alto. Con grandes zancadas, su cujerpo va separ¨¢ndose de la pared y de ella pende sujeto de pies y manos. En ocasiones lo hace tan s¨®lo sujet¨¢ndose de un dedo. Esta modalidad tambi¨¦n se denominada escalada acrob¨¢tica.
Castell¨® indica que "aunque los bloques que se emplean en esta escalada son cortos, de dos a cinco metros, ¨¦stos son de m¨¢xima dificultad y por lo general se hacen sin cuerda". La cuerda se utiliza s¨®lo por razones de seguridad en caso de ca¨ªda.
Para realizar la escalada, Castell¨® viste unas mallas estrechas de acetato de color negro y una camisa negra salpicada de estrellas. De su cintura cuelga una bolsa en la que guarda una sustancia, en cuya composici¨®n entra el magnesio, con la que continuamente se embadurna las manos para no resbalar.
Una vez superada la altura que marca la roca, Castell¨® baja, sonr¨ªe seriamente y acude a observar lo que ser¨¢ su pr¨®ximo reto: "Otra roca con mayor dificultad".
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