El final del 'normalizador' Bartoncik

"En los ¨²ltimos 40 a?os, muchos checoslovacos han cometido actos contra la moral; pero no debemos ser nosotros quienes los juzguemos, sino alguna instancia m¨¢s alta". Con estas palabras, probablemente redactadas por el presidente Vaclav Havel, comenzaba ayer una conferencia de prensa que liquid¨® pol¨ªticamente a Jozef Bartoncik, uno de los protagonistas de la transici¨®n checoslovaca.Los colegios no llevaban cerrados siquiera un minuto cuando el asesor personal de Havel, Jiri Krizan; el viceministro del Interior, Jan Ruml, y el fiscal general de la rep¨²blica checa, Pavel Rychetsky, comparecieron ante la prensa en un gran sal¨®n del palacio del Hradshin de Praga para confirmar lo que muchos ya consideraban una certeza.

Bartoncik, presidente del Partido Popular, vicepresidente del Parlamento y presidente de la C¨¢mara alta del mismo, no s¨®lo hab¨ªa sido confidente de la polic¨ªa pol¨ªtica comunista (StB), sino uno de sus m¨¢s destacados agentes pagados. Durante m¨¢s de 17 a?os, desde el principio del periodo de normalizaci¨®n que sigui¨® al aplastamiento de la primavera de Praga, Bartoncik hab¨ªa informado regular y activamente sobre las desviaciones antisocialistas de sus compa?eros en aquel partido condenado a ser un t¨ªtere del poder comunista.

Bartoncik no hab¨ªa sido sometido a chantaje, que se sepa, pero escrib¨ªa informes en los que recomendaba represalias, como despidos o degradaciones laborales, para aquellos que formulaban cr¨ªticas o reservas al implacable r¨¦gimen impuesto en 1970 por Gustav Husak, Milos Jakes y Vasil Bilak.

En los ¨²ltimos a?os, seg¨²n ex miembros de la StB, los informes de Bartoncik ganaron en importancia y eran remitidos directamente a Jakes y a Alois Indra, otro de los cerebros del r¨¦gimen neoestalinista. El pasado d¨ªa 5, Havel hab¨ªa hablado con Bartoncik, le hab¨ªa mostrado las pruebas contra ¨¦l y le hab¨ªa solicitado que desmintiera todo o se retirara de la vida p¨²blica.