Cuidado con la tensi¨®n repetitiva
Una directiva de la CE obliga a adoptar nuevas normas de seguridad sobre los videoterminales
La revoluci¨®n de los ordenadores ha tra¨ªdo aparejada una serie de riesgos laborales que est¨¢n convirtiendo la oficina en un lugar tan inseguro en algunos aspectos como la f¨¢brica. La Comunidad Europea aprob¨® el pasado 29 de mayo una ley que obliga a los empresarios de los 12 pa¨ªses comunitarios a adoptar medidas de sanidad y seguridad muy serias para prevenir la lesi¨®n por tensi¨®n repetitiva (LTR) que padecen los usuarios de videoterminales, pantallas de ordenador y teclados que reemplazan a las tradicionales m¨¢quinas de escribir.
Adem¨¢s de esa lesi¨®n son frecuentes tambi¨¦n los dolores musculares y ¨®seos, como el s¨ªndrome del t¨²nel del hueso carpiano (una inflamaci¨®n de los tendones que atraviesan un t¨²nel de huesos en la mu?eca). La LTR se caracteriza porque los afectados desarrollan un dolor agudo en sus manos y brazos como resultado de realizar la misma tarea todo el tiempo. En el mejor de los casos, deben realizar un descanso en sus trabajos, y en el peor, est¨¢n lisiados, incapaces de levantar cualquier peso e incluso de sujetar un bol¨ªgrafo.En 1981, la LTR supon¨ªa el 18% de los trastornos por causa laboral habidos en Estados Unidos, seg¨²n la Oficina de Estad¨ªsticas Laborales. Hacia 1987, cuando el ordenador personal ya era una pieza bien acoplada en el equipo de oficina, ese n¨²mero subi¨® hasta el 38%. Hace cuatro a?os, la LTR sustituy¨® a las enfermedades de piel como la causa principal de enfermedad laboral en Estados Unidos. Una de las peores epidemias de LTR ocurri¨® en Australia a mediados de la d¨¦cada de los ochenta, cuando las estad¨ªsticas se?alaron que entre el 20% y el 30% de los oficinistas del pa¨ªs sufr¨ªan dicha enfermedad.
En Europa, Suecia y la RFA tienen desde hace tiempo una estricta normativa laboral sobre videoterminales, pero la ley de la CE, que entrar¨¢ en vigor el 1 de enero de 1993, es m¨¢s amplia. Los ministros brit¨¢nicos se abstuvieron en la votaci¨®n aduciendo que el alcance de la directiva comunitaria era excesivo. La ley exige a los empresarios que los teclados no deben estar unidos a la pantalla, y que ambas partes deben ser regulables. Incluye normas sobre el asiento, las mesas y la luz, y pide que haya descansos regulares y revisiones oculares. Los empresarios deben examinar las condiciones sanitarias y de seguridad de los videoterminales y despu¨¦s eliminar los riesgos. Se les exige tambi¨¦n que den a los trabajadores entrenamiento sobre el uso correcto de los terminales.
Costosas reclamaciones
Seg¨²n algunos expertos, la directiva de la CE aumentar¨¢ considerablemente los gastos de los empresarios en sus negocios, pero la alternativa puede acabar siendo incluso m¨¢s cara.
Pleitos y reclamaciones de compensaciones han sido emprendidos en Europa y Estados Unidos por afectados por LTR.
En Gran Breta?a, el a?o pasado tres oficinistas de Inland Revenue exon LTR fueron indemnizados por m¨¢s de 177.000 d¨®lares y una secretaria consigui¨® un acuerdo para que le dieran 15.000 d¨®lares.
Incluso sin grandes recompensas en met¨¢lico, la LTR puede provocar serias interrupciones en el trabajo cuando los que lo sufren tienen que pedir la baja laboral, en algunas ocasiones por varios anos. Los expertos en ergonom¨ªa dicen que no son las m¨¢quinas por s¨ª mismas las causantes del problema, sino que es la forma de usarlas. "Un bol¨ªgrafo tampoco es seguro si te lo clavas en un ojo", opina Tom Steward, director de una consultor¨ªa de Conceptos de Ergonom¨ªa radicada en Londres. Steward cree que demasiado a menudo los videoterminales se colocan en oficinas sin nada pensado sobre los muebles y la luz necesarios para el nuevo equipo y sin entrenamiento alguno sobre su uso apropiado. Adem¨¢s, como los ordenadores pueden realizar el trabajo m¨¢s deprisa que una m¨¢quina de escribir, la cuota de trabajo y el nivel de stress a menudo crecen. Otros riesgos de salud relacionados con con los videoterminales, como tensi¨®n ocular, dolores de columna y de cuello, pueden ser eliminados casi por completo con mobiliario, iluminaci¨®n, entrenamiento adecuados y con descansos regulares, seg¨²n los expertos.
Estos factores pueden tambi¨¦n aliviar los s¨ªntomas de LTR, pero esta dolencia est¨¢ todav¨ªa relacionada en un importante grado con la disposici¨®n del teclado, que no ha cambiado en lo esencial desde principios de siglo. La disposici¨®n del teclado fue dise?ada pensando en la eficacia de escribir a m¨¢quina, no en la mano. John Hughes, director de un comit¨¦ que trabaja sobre videoterminales para la Asociaci¨®n Brit¨¢nica de Equipos Electr¨®nicos y de Negocios, dice que los industriales est¨¢n tratando de desarrollar nuevas formas de teclados inusuales en la industria de los ordenadores, porque ellos se centran en el usuario m¨¢s que en la tecnolog¨ªa.
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