La Convenci¨®n de Zonas H¨²medas pide medidas urgentes para Do?ana

El incremento de las medidas de protecci¨®n en el ¨¢rea que rodea el Parque Nacional de Do?ana es considerado imprescindible por la Convenci¨®n Internacional sobre Zonas H¨²medas, que ayer termin¨® su reuni¨®n trienal en Montreux (Suiza), con asistencia de representantes de 90 pa¨ªses y de organizaciones internacionales. En la resoluci¨®n final de la conferencia se pide a los Gobiernos de Espa?a, Jordania, Rep¨²blica Federal de Alemania y Estados Unidos medidas urgentes de defensa de cuatro zonas h¨²medas amenazadas, entre ellas el Coto de Do?ana.

La recomendaci¨®n sobre Do?ana valora como muy negativo el impacto del proyecto urban¨ªstico Costa Do?ana sobre el parque nacional, reconocido como una de las zonas h¨²medas m¨¢s importantes de Europa. Los expertos y representantes oficiales reunidos en Suiza piden al Gobierno espa?ol y a las autoridades regionales que aseguren las medidas de conservaci¨®n en el ¨¢rea que rodea el parque nacional y ampl¨ªen la zona de protecci¨®n para evitar las amenazas derivadas del desarrollo tur¨ªstico.Tambi¨¦n se pide a Espa?a que el plan sobre recursos h¨ªdricos de? Guadalquivir tenga en cuenta la demanda de agua derivada de? riego y de los usos tur¨ªsticos y urbanos para garantizar las necesidades del parque, y que se preste atenci¨®n a lo que dicen los cient¨ªficos y las organizaciones ecologistas antes de tomar decisiones. Finalmente, se pide un mejor y m¨¢s estricto control de la extracci¨®n de agua y del uso de productos qu¨ªmicos para usos agr¨ªcolas.

La delegaci¨®n espa?ola a la conferencia la formaron dos cargos de] Instituto para la Conservaci¨®n de la Naturaleza (leona), sin representatividad pol¨ªtica. Espa?a tiene en la actualidad 17 zonas h¨²medas amparadas por el convenio, n¨²mero que es considerado insuficiente por las organizaciones ecologistas.

Ayer, la Federaci¨®n de Amigos de la Tierra valor¨® positivamente la recomendaci¨®n del convenio de Ramsar, como un claro apoyo de la comunidad internacional en favor de la conservaci¨®n de Do?ana y en contra del "delirante proyecto de Costa Do?ana".

Estados Unidos ha sido tambi¨¦n recriminado indirectamente por la conferencia, aunque ¨¦sta aplaude la reacci¨®n del gobierno federal de recurrir a los tribunales para obligar al estado de Florida a garantizar un flujo suficiente de agua en el parque de Everglades. Sin embargo, pide a las autoridades federales y estatales que tornen las medidas necesarias para purificar de nutrientes el agua que llega al parque. A la Rep¨²blica Federal de Alemania se le expresa la preocupaci¨®n por la construcci¨®n de nuevos diques en la zona h¨²meda de Leybucht y la falta de informaci¨®n sobre sus repercusiones.

En Jordania interesa el oasis de Azraq, de gran importancia para las aves m¨ªgratorias, del que se extrae actualmente agua para el consumo de la capital, Amman, en cantidades consideradas excesivas para su equilibrio ecol¨®gico.

Desaf¨ªo

La conferencia de zonas h¨²medas, que re¨²ne a los 57 estados firmantes -entre ellos Espa?adel convenio internacional de Ramsar (ciudad iran¨ª donde se firm¨® originalmente en 1971) atrajo a 400 participantes. Durante sus sesiones, de una semana de duraci¨®n, anunciaron su incorporaci¨®n cinco pa¨ªses: Burkina Faso, Chad, Checoslovaquia, Ecuador y Sr¨ª Lanka, y la lista de zonas h¨²medas protegidas en todo el mundo super¨® las 500.

Los participantes tambi¨¦n mostraron su preocupaci¨®n por los efectos de la miner¨ªa de titamo y otros metales pesados en la zona protegida de St. Luc¨ªa, en Africa del Sur y recomendaron al gobierno de Islandia que tenga en cuenta el impacto de la extracci¨®n de sedimentos en la zona de Myvatn-Laxa.

Daniel Navid, secretario gegeneral del convenio de Ramsar, declar¨® su satisfacci¨®n por el n¨²mero de asistentes y por el anuncio hecho por la Uni¨®n Sovi¨¦tica de designar 16 nuevas ¨¢reas protegidas, que representan un total de 8 millones de hect¨¢reas. Polonia anunci¨® por su parte la protecc¨ª¨®n del tramo medio del r¨ªo Vistula, uno de los pocos r¨ªos salvajes que quedan en Europa. Es tados Unidos, por su parte, pro puso establecer un fondo para asistencia t¨¦cnica a los pa¨ªses en desarrollo en la conservaci¨®n de zonas h¨²medas.

El convenio de Ramsar naci¨® de la necesidad de preservar las zonas h¨²medas para la conservaci¨®n de las aves migratorias, y ha producido estudios que demuestran la importancia de la conservaci¨®n de estas zonas para el equilibrio ecol¨®gico general.

Martin W. Holdgate, director de la Uni¨®n Internacional para la Conservaci¨®n de la Naturaleza (UICN), se?al¨® que el convenio tiene gran importancia como agente de conservaci¨®n en un mundo donde se produce una presi¨®n en aumento sobre la naturaleza y los recursos naturales. Tambi¨¦n se refiri¨® al desaflo que supone para la defensa de las zonas h¨²medas el cambio clim¨¢tico inducido por la acci¨®n humana.

El presupuesto del secretariado del convenio de Ramsar qued¨® fijado en 3,26 millones de francos suizos (233 millones de pesetas) para los pr¨®ximos tres a?os (1991-1993), lo que se considera modesto pero positivo.