Miembros de la ejecutiva exigen a Aznar que cambie de estilo y someta a discusi¨®n sus decisiones

JUAN G. IB??EZ Destacados dirigentes del Partido Popular, entre ellos Marcelino Oreja, Miguel Herrero, Fernando Su¨¢rez e Isabel Tocino, reclaman al presidente nacional del PP, Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar, que establezca unas relaciones m¨¢s fluidas con los dem¨¢s miembros del comit¨¦ ejecutivo y convoque reuniones con ellos y otros dirigentes para discutir algunos cambios en el funcionamiento y la estrategia del partido. Estas y otras personalidades populares, que por el momento s¨®lo tienen en com¨²n el pretender de Aznar que les consulte m¨¢s y distribuya mejor las tareas pol¨ªticas, coinciden en exigir un profundo debate en la c¨²pula del PP.

La dimisi¨®n de Marcelino Oreja como portavoz en el Grupo Popular del Parlamento Europeo, y consiguientemente como miembro del comit¨¦ ejecutivo del PP, ha servido para que otros dirigentes empiecen a exigir p¨²blicamente a Aznar que consulte m¨¢s las decisiones que torna. Incluso los partidarios del creciente acercamiento al Partido Popular Europeo (PPE, democristiano) reconocen que la integraci¨®n en el PPE como grupo observador debi¨® ser debatida en la junta directiva nacional, m¨¢ximo ¨®rgano entre congresos.El propio Oreja se aprest¨® ayer a explicar que su dimisi¨®n, dem¨¢s de expresar el enojo por la marginaci¨®n que sufri¨® en las recientes conversaciones con el presidente del PPE, Wilfried Martens, pretende influir para que "haya un cambio de circunstancias y estilos en el partido".

Fernando Su¨¢rez, adversario de la conversi¨®n del Partido Popular en democristiano, ha aprovechado la oportunidad para recordar que ¨¦l ya dijo que "Aznar ha heredado de Manuel Fraga la forma de tomar decisiones". "Si Aznar no cambia de maneras, desde luego no va bien", augur¨® en una entrevista en la COPE.

En un claro prop¨®sito de conseguir que Aznar se avenga a consultar m¨¢s sus decisiones, tras apelar a que no hab¨ªa logrado hablar con el presidente del PP en los dos ¨²ltimos meses, Su¨¢rez indic¨®: "Esta ser¨¢ la ocasi¨®n de demostrar que tiene voluntad de entendimiento con la gente que necesita para un proyecto pol¨ªtico grande. Si lo que le divierte es estar con los cuatro o cinco de la cupulilla que se trajo de Valladolid, es su problema, pero que no digan que tenemos que tolerarlo por la uni¨®n del centro-derecha".

Aunque las motivaciones y los deseos personales var¨ªan en cada caso, esta tesis es la defendida tambi¨¦n, hasta hace poco en ¨¢mbitos privados y ahora en p¨²blico, por Miguel Herrero, Isabel Tocino, Rodolfo Mart¨ªn Villa, as¨ª como un amplio grupo de diputados europeos y nacionales e incluso varios dirigentes provinciales y regionales. Seg¨²n algunos medios populares, Aznar no cuenta en Castilla y Le¨®n, regi¨®n que presidi¨® desde 1987 hasta 1989 con el apoyo de los presidentes provinciales del PP en Valladolid, Palenc¨ªa y Le¨®n. El propio sucesor de Aznar en la presidencia de la comunidad aut¨®noma, Jes¨²s Posada, lament¨® ayer "lo ocurrido con Marcelino Oreja, porque se trata de una de las personas m¨¢s valiosas en el PP y en la sociedad espa?ola".

Desaf¨ªo de Posada

Posada lanz¨® un cierto desafilo hacia el proyecto de Aznar de designar al vicesecretario general del PP Juan Jos¨¦ Lucas, candidato a la presidencia de la Junta de Castilla y Le¨®n. "No voy a dar una batalla extempor¨¢nea, pero, por supuesto, yo no renuncio a esa candidatura", advirti¨® ayer en Zamora, informa Jos¨¦ Ura.

Por su parte, el presidente del PP en Catalu?a, Jorge Fern¨¢ndez D¨ªaz, resalt¨®: "Oreja es un activo muy importante de la refundaci¨®n del PP", y confi¨® enque se restablecieran unas buenas relaciones entre ¨¦ste y Aznar, informa Llu¨ªs Ur¨ªa. No obstante, altos dirigentes del PP en Catalu?a han mostrado en privado su comprensi¨®n hacia Oreja. Seg¨²n estas fuentes, el conflicto es resultado de la marginaci¨®n a que se han visto sometidos importantes personalidades del partido y debe ser considerado como un aviso por la direcci¨®n nacional del PP.

Antonio Hern¨¢ndez Mancha, ex presidente del PP, larnent¨® la dimisi¨®n de Oreja por cuanto supone "que el centro-derecha sigue patinando en su gran error, el cainismo, ese ir derrocando a personas que previamente se han convertido en dioses".