Dimiten en Italia cuatro ministros de la izquierda democristiana

La tan debatida ley sobre la televisi¨®n italiana acab¨® anoche provocando una crisis en el Gobierno de Giulio Andreotti con la dimisi¨®n de los ministros de Defensa, Nino Martinazzoli; Ense?anza, Sergio Mattarella; Asuntos Extraordinarios para el Mediod¨ªa, Riccardo Misasi, y el de las Participaciones del Estado, Carlo Fracanzani, los cuatro pertenecientes a la izquierda democristiana.La dimisi¨®n se produjo tras el anuncio realizado anoche por Giulio Andreotti -reci¨¦n llegado de Mosc¨², en donde se entrevist¨® con Mija¨ªl Gorbachov- de que su Gobierno hab¨ªa decidido pedir el voto de confianza sobre los puntos m¨¢s espinosos de la ley que se est¨¢ votando en el Parlamento relativa a la publicidad y antitrust en materia de televisi¨®n.

?sta es una ley esperada en Italia desde hace 15 a?os y tiene por finalidad regular legalmente las televisiones privadas que, en realidad, estaban actuando ilegalmente, aunque permitidas ante la ausencia de una legislaci¨®n adecuada.

La izquierda democristiana, capitaneada por De Mita, que en todo este tiempo hab¨ªa polemizado sobre algunos puntos de la ley, se hab¨ªa opuesto a la propuesta del Gobierno de conceder a Silvio Berlusconi una moratoria de tres a?os antes de entrar en vigor la ley que reduce a s¨®lo tres interrupciones de publicidad en las pel¨ªculas retransmitidas por televisi¨®n.

La izquierda democristiana consideraba injusto ese regalo a Berlusconi, quien, como escrib¨ªa ayer en un dur¨ªsimo editorial el director de La Repubblica, Eugenio Scalfari, no merec¨ªa ning¨²n resarcimiento por da?os, porque hab¨ªa actuado hasta ahora "fuera de la ley". Scalfari ped¨ªa que el Gobierno se atuviera a las consignas de la Comunidad Europea (CE) y que la nueva legislaci¨®n sobre publicidad en televisi¨®n empezara en diciembre de 1991.

Scalfari lleg¨® a decir ayer ensu editorial que ¨¦ste es el quinto pa¨ªs industrializado del mundo, pero "la primera rep¨²blica bananera de Europa".

El Gobierno no escuch¨® a los democristianos de izquierda, y, ante el temor de que en el secreto de las urnas pudiera caer el Gobierno, Andreotti, apenas llegado anoche de Moscu y conocido el clima caldeado que se hab¨ªa creado, decidi¨® pedir un voto de confianza para evitar as¨ª sorpresas y zanjar el debate.

Sin embargo, los cuatro ministros de la izquierda democristiana presentes en Roma (el quinto, Callogero Mannino, de Agricultura, estaba ausente) hab¨ªan ya decidido dimitir antes del Consejo de Ministros que anunci¨® la decisi¨®n de plantear el voto de confianza.

Seg¨²n los primeros comentarios, si el Gobierno no se vuelve atr¨¢s de su decisi¨®n de pedir el voto de confianza, ser¨¢ inevitable hoy mismo la formalizaci¨®n de la crisis de Gobierno, cosa grav¨ªsima si se tiene en cuenta que hace s¨®lo unas semanas se ha inaugurado el semestre de la presidencia italiana de la CE.

Los ministros dimitidos han justificado su gesto afirmando que es incre¨ªble que el Gobierno pida un voto de confianza para "violar una norma de la misma CE" y s¨®lo para favorecer a Berlusconi.

Los democristianos de Andreotti y del secretario Forlani han respondido al gesto de protesta de la izquierda democristiana diciendo que se trata de "una aut¨¦ntica locura, una decisi¨®n in justificada e irresponsable que la opini¨®n p¨²blica no podr¨¢ entender".

Los izquierdistas democristianos insisten en que la locura es querer imponer con un voto de confianza un tema de tal trascendencia tras 15 a?os de espera y de debate nacional. Entienden tambi¨¦n que no se puede tratar a los diputados como a ni?os cuyo papel deba limitarse a obedece ciegamente la disciplina de partido.