Se retrasa la reconstrucci¨®n del 'chiado' de Lisboa
Hace dos a?os un incendio destruy¨® el viejo chiado de Lisboa y amenaz¨® todo el casco viejo de la capital portuguesa. Aconteci¨® el 25 de agosto de 1988 y la televisi¨®n se encarg¨® de divulgar en todo el mundo im¨¢genes de tr¨¢gica belleza. Han pasado dos a?os. La sombr¨ªa belleza de las ruinas ha desaparecido tambi¨¦n, detr¨¢s del entramado de las obras provisionales realizadas apresuradamente bajo la presi¨®n del comercio local, que quer¨ªa, antes que nada, restablecer la circulaci¨®n de la zona.Pero las anunciadas y esperadas obras de reconstrucci¨®n, confiadas a la direcci¨®n del arquitecto Siza Vieira, a¨²n no han empezado. El proyecto existe. Fue aprobado por el Ayuntamiento de Lisboa hace meses y en abril, el alcalde de Lisboa, Jorge Sampalo, anunc l¨® que las obras empezar¨ªan en julio o agosto, pero ahora fuentes municipales se limitan a manifestar su esperanza de que los primeros contratos de obras se firmen antes de fin de a?o, sin avanzar motivos concretos para su atraso.
Siza Vieira subraya que, por su parte, cumpli¨® el calendario previsto y achaca las dificultades a problemas burocr¨¢ticos. La maqueta de Siza Vieira permite antever un nuevo chiado, modernizado, m¨¢s airoso y c¨®modo, dentro del respet o de sus tradiciones y de su historia.
En el interior de los seis bloques que constituyen el proyecto global, y cuya construcci¨®n estar¨¢ a cargo de los respectivos propletarlos, el uso de cada edificio de seis pisos est¨¢ distribuido en partes iguales, entre el comercio, oficinas y viviendas de habitaci¨®n. Los antiguos armazens do chiado ser¨¢n sustituidos por un hotel y el resto depender¨¢ de la voluntad de los propietarios.
El Ministerio de Obras P¨²blicas ha previsto la construcci¨®n de una nueva l¨ªnea de metro que tendr¨¢ una parada en el chiado.
Cr¨ªticas
Como siempre que se interviene en profundidad en el tejido vivo de una vieja ciudad, hay quien acusa al poder de preocuparse m¨¢s de la arquitectura del chiado que de las personas que en ¨¦l viv¨ªan y trabajaban. La mayor¨ªa de ¨¦stas han rehecho su vida en otro sitios, pero lo sindicatos acusan al Gobierno, en nombre de 776 personas que perdieron sus empleos con el incendio, de "violar las promesas hechas en materia de defensa de los puestos de trabajo". Son a¨²n unos 500 los que reciben sus salarlos de un fondo de solidaridad constituido con dinero del Estado o recaudado por suscripci¨®n p¨²blica, pero en septiembre dejar¨¢n de percibir a estas ayudas.
Dos a?os despu¨¦s, a¨²n se desconoce las causas del incendio.
El resultado de las investigaciones de la Polic¨ªa Judicial fue enviado, hace d¨ªas, al Departamento de Investigaciones y Acci¨®n
Penal.
Un juez decidir¨¢ si se debe archivar el expediente, o devolverlo a la polic¨ªa para abrir nuevas investigaciones. Segun una fuente policial, los investigadores no consiguieron pruebas suficientes a favor o en contra de la tesis del incendio criminal.
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