"Si me atacan, no dudar¨¦ en apretar el gatillo"

CARLOS Y?RNOZ"Que embarquen ya el tr¨ªpode para la ametralladora". "Hay que retirar todas las gomas del suelo". "Todo el mundo tiene que estar embarcado a las 17.30". El tel¨¦fono no para de sonar y las decisiones de Zarco son r¨¢pidas y cortantes. La fren¨¦tica actividad de los marineros se paraliza al paso del comandante. Sus expresiones son una mezcla de respeto y miedo, con pinceladas de angustia o ignorancia. No falta el valiente: "Estaba en el Arag¨®n, pero he venido aqu¨ª voluntario. ?Para algo tiene que servir la mili! ".

Pregunta. ?Cree que lleva una tripulaci¨®n preparada?

Respuesta. La mayor¨ªa son veteranos y han participado en ejercicios de los que siempre hemos salido airosos. Ahora s¨®lo tienen que poner en pr¨¢ctica lo aprendido. Para ellos ser¨¢ una operaci¨®n casi de rutina.

P. ?Y los de reemplazo?

R. Hasta que lleguemos a nuestro destino, tenemos tiempo suficiente para adiestrarlos. Cuando estemos en el teatro de operaciones, toda la dotaci¨®n estar¨¢ preparada para llevar a buen fin y con la m¨¢xima eficacia la misi¨®n. La gente se vuelca cuando les pides algo.

P. Una "misi¨®n de paz", como la define el Gobierno, ?se puede hacer con barcos de guerra?

R. Yo no voy a atacar a nadie. Yo voy a defender el barco. Eso s¨ª, si me atacan, disparar¨¦. Y, si hace falta, lanzar¨¦ todos los misiles que tenga hasta agotarlos, sin ning¨²n cargo de conciencia.

P. ?Se plantea usted qu¨¦ le puede pasar por la cabeza antes de tomar una decisi¨®n as¨ª?

R. Analizar¨¦ las circunstancias. Si sospecho... o llego al convencimiento de que alguien viene a atacarme, no dudar¨¦ en apretar el gatillo. ?Y es que no puedes dudar! Si veo claro que vienen a por nosotros, no dudo. Se trata de t¨² o ellos, y yo prefiero que sean ellos los que caigan.

P. Estamos hablando de una "misi¨®n de paz".

R. Espa?a no est¨¢ en guerra con nadie. Eso me lo han dejado muy claro. Y es verdad, vamos en una misi¨®n de paz, de vigilancia. La decisi¨®n de colaborar con el resto de pa¨ªses de la UEO en el cumplimiento del embargo contra Irak decretado por la ONU me parece totalmente acertada.

P. ?Qu¨¦ instrucciones tiene si se inicia una guerra?

R. Me retirar¨¦ de la zona a la espera de recibir ¨®rdenes de la Armada. Pero en todo momento estar¨¦ listo para el combate.

P. ?Tiene autonom¨ªa para decidir cu¨¢ndo y contra qui¨¦n disparar?R. Tengo autonom¨ªa para decidir disparar y as¨ª lo dice la directiva del jefe del Estado Mayor , Si tengo que hacerlo

P. ?Qu¨¦ opina usted de los pacifistas?R. La paz es muy bonita. A nadie le gusta la guerra. A los militares tampoco. Los pacifista nos miran como si fu¨¦ramos los promotores de la guerra. Pero hay que tener en cuenta que cuanto m¨¢s fuerte es un ej¨¦rcito, m¨¢s f¨¢cil se evita la guerra, por respeto.P. ?Es usted cat¨®lico?R. Cat¨®lico y practicante Pero no me dar¨ªa cargo de con ciencia tener que usar la fuerza Primero est¨¢ la defensa de mi barco y de mi gente.Tripulaci¨®n contentaP. ?Observa des¨¢nimo o miedo en su tripulaci¨®n?R. No es que den saltos de alegr¨ªa, pero se les ve contentos porque ven que preparamos todo bien, a tope. Todos son conscientes de la importancia que para Espa?a tiene la misi¨®n que nos encomiendan. ?Su estado de ¨¢nimo? Voy a dar un ejemplo: un marinero excluido porque se licencia en septiembre -han sido desembarcados los que se licenciaban antes del 1 de enero de 1991 - me ha comentado que le hubiera gustado ir. La mayor¨ªa de los que han venido a cubrir las bajas son voluntarios. El estado de ¨¢nimo es excelente. ?Miedo? Hay algo de temor l¨®gico. Pero tambi¨¦n hay un componente de aventura... y se trata de gente joven, con ganas. Adem¨¢s, les explicar¨¦ con detalle a qu¨¦ vamos. ?Pero es que no va a ocurrir nada! Puede salir alg¨²n loco con una lanchita, pero...

P. ?Cu¨¢les ser¨¢n las amenazas m¨¢s probables?

R. Vamos preparados para hacer frente a todas ellas. Ante las amenazas de superficie y a¨¦rea, llevamos equipos de detecci¨®n a gran distancia, radar para vuelos a baja altitud, misiles superficie-aire y superficie-superficie, ca?¨®n de tiro r¨¢pido y ca?¨®n antimisil Meroka.

La principal amenaza submarina son las minas, y la defensa es el equipo de desmagnetizaci¨®n del buque. En cuanto a la guerra qu¨ªmica, el buque en s¨ª mismo es totalmente inmune porque no puede entrar gas una vez cerrado herm¨¦ticamente. Adem¨¢s, cada miembro de la dotaci¨®n lleva un traje especial para evitar la contaminaci¨®n. El adiestramiento en este terreno ser¨¢ exhaustivo. Hay detectores de gas, una alarma especial... ?La quer¨¦is escuchar?

P. ?Qu¨¦ experiencia tienen usted y su tripulaci¨®n en el manejo de los sistemas del barco?

R. Los continuos ejercicios realizados con nuestra Armada y con marinas extranjeras (con la OTAN, en las maniobras Sharp Spear y Dragon Hammer), unido a la formaci¨®n del personal. El nivel de adiestramiento es excelente. Estamos al nivel de las mejores marinas del mundo.

P. ?Tiene plena confianza en sus medios?

R. Dentro de este tipo de barcos, la Santa Mar¨ªa es uno de los m¨¢s modernos del mundo. Los que dicen que es un cascar¨®n no lo conocen, no tienen ni idea. Estados Unidos ha enviado varios similares al Golfo.

P. Justamente un barco americano de esa clase -la fragata Stark- fue alcanzado por un misil lanzado por un avi¨®n iraqu¨ª durante la guerra Ir¨¢n-Irak.

R. Tengo un informe as¨ª de gordo [extiende los brazos] sobre lo que ocurri¨®. Parece que alguien del CIC [Centro de Informaci¨®n y Combate] tard¨® en reaccionar. Pero conste que el misil fue localizado desde el barco con tiempo.

P. Podr¨ªa volver a ocurrir.

R. No tengo miedo a eso. Estados Unidos ya ha tomado medidas en la zona y me curan en salud. Estoy convencido de que avi¨®n iraqu¨ª no despega ni uno. Pueden utilizar misiles desde tierra y ¨¦sos no pueden alcanzar nuestra posici¨®n. Pero, en fin, hay momentos que pueden ser peligrosos, de duda... Son momentos muy duros.

P. ?C¨®mo asume el papel que le ha correspondido?

R. Lo asumo con orgullo, con satisfacci¨®n. Mis compa?eros dicen que tengo mucha suerte.

P. ?Y su familia?

R. Mi mujer se enter¨® por los peri¨®dicos. Yo no recib¨ª la orden por escrito hasta ayer [por el jueves]. Mi familia ha reaccionado con preocupaci¨®n, pero con serenidad. Saben que soy marino y tengo que cumplir cualquier misi¨®n que se me encomiende.

P. ?Qu¨¦ dir¨ªa a las familias de sus marineros?

R. Les quiero asegurar que la Marina ha preparado los barcos a conciencia y que est¨¢n perfectamente capacitados.

P. El ¨¦xito o fracaso de la misi¨®n influir¨¢ en la imagen del Ej¨¦rcito espa?ol para los pr¨®ximos a?os.

R. Soy consciente. Quedar¨¢ para la historia. Pero el pabell¨®n espa?ol va a quedar muy alto, m¨¢s alto que el pico [la bandera del barco].