Copas en el colegio

San Lorenzo de El Escorial se convierte durante la ¨¦poca estival en punto de reuni¨®n de pol¨ªticos, cient¨ªficos, fil¨®sofos, escritores y personajes del mundo de la far¨¢ndula. Este encuentro viene motivado por la celebraci¨®n en el municipio escurialense de los cursos de verano de la Universidad Complutense, cuya tercera edici¨®n se lleva a cabo este a?o. ?ste es un lugar en el que se puede encontrar, adem¨¢s de una excelente gastronom¨ªa, un variado ambiente que cuenta adem¨¢s con el incentivo de encontrarse con la cara de alg¨²n famoso.La terraza de Eurof¨®rum, situado en la falda del monte Abantos, es el lugar m¨¢s frecuentado por conferenciantes y periodistas que cubren los cursos de verano. Sobre las ocho de la tarde, cuando los seminarios ya han concluido, es imposible encontrar una mesa libre. La hora de la sobremesa tambi¨¦n es ideal para tomar un caf¨¦ al aire libre, a la vez que se disfruta de buenas vistas.

El Cafet¨ªn Croch¨¦, situado en pleno centro urbano, tambi¨¦n es lugar de reuni¨®n de ponentes y profesores de los cursos de la Universidad Complutense, que buscan un ambiente acogedor, y, para aquellos que desean algo m¨¢s movidito, en el tablao El Roc¨ªo encuentran m¨²sica sevillana y buen fino.

Los que gustan tomar unas tapas eligen el Mes¨®n Serrano, La Cueva o Bocatas, y los que prefieren sentarse en un merendero al aire libre lo hacen en los quioscos de la calle de Floridablanca, un ¨¢mbito urbano caracter¨ªstico por su arboleda y su entorno.

L¨ªmite de hora

Los alumnos asistentes a los seminarios prefieren sitios como las discotecas ?Qu¨¦ m¨¢s da!, La Boite, La Embajada o El Parador de la Moncloa, lugares donde se puede encontrar mucho ambiente hasta pasadas las tres de la madrugada, aunque los estudiantes saben que si antes de esa hora no han acudido a dormir se encontrar¨¢n con las puertas del colegio universitario cerradas. Este l¨ªmite en la hora de llegada ha provocado las protestas de los alumnos.A la hora del almuerzo, tanto conferenciantes como alumnos prefieren hacerlo en Eurof¨®rum o en el colegio universitario Mar¨ªa Cristina, lugares respectivos donde se alojan, aunque a lo largo de las cinco jornadas que dura cada curso suelen hacer alguna comida fuera y de paso, y si el horario de trabajo lo permite, realizar la obligada visita al monasterio. San Lorenzo ofrece una variada gastronom¨ªa para el paladar m¨¢s exigente y para todos los bolsillos. Uno de los mejores restaurantes y que m¨¢s frecuentan ponentes y profesores es el Charol¨¦s, cuya cocina ofrece especialidades tan sugerentes como alcachofas rellenas de langostinos o salm¨®n con salsa de acederas, y cuyo precio puede resistirse a algunas carteras. Un cubierto viene a costar entre 5.000 y 5.500 pesetas. Para los bolsillos de los estudiantes est¨¢n La Cueva, El Horizontal o Castilla, que cuentan con men¨²s especiales cuyo precio est¨¢ en torno a las 1.000 pesetas. Pocos son, sin embargo, los alumnos que no comen en Mar¨ªa Cristina, puesto que la beca incluye, adem¨¢s de las clases, alojamiento y comida.

Cuando concluye la semana, y con ella los cursos universitarios correspondientes, los alumnos no se resisten a despedirse de San Lorenzo del Escorial sin realizar una fiesta. Normalmente se hace los jueves, para poder em palmar la movida nocturna con un chocolate con churros en El Miranda Suizo o en cualquiera de los quioscos de la calle de Floridablanca, para posteriormente dirigirse al colegio universitario a recoger los diplomas del curso.