Los narcotraficantes "arrepentidos" de Colombia evitar¨¢n la extradici¨®n

Los narcotraficantes colombianos podr¨¢n evitar la tan temida extradici¨®n para ser juzgados en otros pa¨ªses -en Estados Unidos, principalmente-, si se entregan voluntariamente a la polic¨ªa, seg¨²n las nuevas medidas judiciales anunciadas en la noche del mi¨¦rcoles por el presidente de Colombia, C¨¦sar Gaviria, durante su primer mensaje a la naci¨®n difundido por radio y televisi¨®n.

A partir de ese momento, a un traficante de droga que se entregue voluntariamente a las autoridades y confiese la totalidad de los delitos cometidos, el juez, adem¨¢s de reducirle su condena en una cuarta parte, le dar¨¢ plenas garant¨ªas de que ser¨¢ juzgado en Colombia. Si gracias a sus declaraciones son detenidos sus c¨®mplices, la reducci¨®n de la condena podr¨¢ elevarse hasta la mitad. A esta nueva medida tambi¨¦n podr¨¢n acogerse los miembros de grupos paramilitares.Los delincuentes deber¨¢n, adem¨¢s, entregar todos los medios o recursos utilizados para cometer los delitos de que son acusados. En el caso de los grupos paramilitares, ser¨¢ suficiente la entrega de las armas, y si no han sido acusados de otros delitos que no sean los de tenencia ?legal de las mismas, ser¨¢n puestos en libertad condicional.

Para el presidente Gaviria, esta reestructuraci¨®n del sistema judicial no significa de ninguna manera la apertura de una v¨ªa para el di¨¢logo con las organizaciones de narcotrafl¨¦antes. "Se trata de combatir de manera m¨¢s efectiva la criminalidad, fortalecer la Administraci¨®n de Justicia y afianzar la paz", dijo Gaviria.

Las reacciones no se hicieron esperar. Mientras unos calificaban de revolucionarias y realistas las medidas, y acogieron con benepl¨¢cito las declaraciones del presidente como una respuesta t¨¢cita a la propuesta de rendici¨®n hecha por los extraditables, otros se mostraron m¨¢s cautos y recordaron que a partir de 1987, cuando un fallo de la Corte Suprema de Justicia anul¨® el tratado de extradici¨®n, el asesin ato y el chantaje de jueces no ces¨®.

Ahora queda el interrogante sobre la actitud de los narcotraficantes y los m¨¢s de 150 grupos paramilitares ante las nuevas medidas. Hasta ahora dec¨ªan que prefer¨ªan "una tumba en Colombia a una c¨¢rcel en Estados Unidos".