No hubo 'goleada' de orejas
Ya se sabe lo que cuentan las orejas, para los que no van a los toros y para muchos de los que van. "Orejas son goles", proclaman en desafortunada frase, y as¨ª, cuando se da la goleada, se presume como inmensa la corrida. Ayer no la hubo.
No es art¨ªculo de fe que la relaci¨®n sea ¨¦sa, claro, pero en algunas ocasiones s¨ª que sirven las orejas como term¨®metro de lo inc¨®modas que llegan a resultar las almohadillas. En la corrida de ayer sentimos la dureza de la piedra, con almohadilla y todo, y cambiaba uno de postura, inquieto. ?se s¨ª que es s¨ªntoma, m¨¢s que las orejas, de si la corrida fue o no buena: a usted no le acaban doliendo las posaderas, corrida excelente; sale usted baldado, mal asunto.
Albayda / Ortega, Mora, Ramos
Toros del marqu¨¦s de Albayda, bien presentados y deslucidos. Ortega Cano: golletazo y estocada que asoma (pitos); estocada baja (oreja). Juan Mora: estocada y 10 descabellos (silencio); pinchazo, estocada corta tendida, pinchazo, media tendida, tres descabellos -aviso- y nueve descabellos m¨¢s (aplausos). Jos¨¦ Luis Ramos: estocada corta aguantando, rueda de peones y dos descabellos (silencio); Pinchazo y estocada (aplausos). Plaza de La Glorieta, 14 de septiembre. Tercera corrida de feria. Casi lleno.
La corrida no ayud¨®, ¨¦sa es la verdad. Los de Albayda, con hechuras de toro y cabezas libres de sospecha aparente (ya se sabe que hay artistas en todo), no acabaron de poner las cosas claras. No hicieron malas peleas con los caballos, pero se mugi¨® mucho ayer en la plaza por parte de algunos toros y claro, lo que se dice claro, con fijeza, alegr¨ªa, recorrido y tal, ni uno.
Ortega Cano estuvo desorientado, sin sitio y lleno de dudas en su primero, que se revolv¨ªa como un resorte. Con el cuarto, quiso reconciliarse con la plaza y aprovech¨® la nobleza del animal, que tend¨ªa a irse a cada pase, poni¨¦ndole la muleta en la cara y no quit¨¢ndosela. Estuvo menos afectado que en otras ocasiones y result¨® digna su labor.
Juan Mora, falta matando, sugiri¨® momentos bellos, sin cuajar ni mucho menos en nada consistente; gazap¨®n y probando un poco su primero y destemplado en su acometida el quinto.
Jos¨¦ Luis Ramos, convaleciente de una pericarditis, estuvo descentradillo y sin la confianza precisa para encontrarle el sitio a su andar¨ªn primero, o sujetar al sexto, que so?aba con estar solo.
Mejoran los toreros heridos
Espartacho Chico, que sufri¨® una cornada grave el pasado d¨ªa 9 en Utiel (Valencia) y ha permanecido ingresado en una cl¨ªnica de Valencia, mejora de sus heridas y ha sido trasladado por v¨ªa a¨¦rea a Sevilla, para seguir el post-operatorio en su domicilio.Joselito, herido de gravedad el pasado mi¨¦rcoles en San Mart¨ªn de Valdeigleslas (Madrid), evoluciona favorablemente aunque contin¨²a en observaci¨®n en la cl¨ªnica San Camilo, donde se encuentra internado.
Babelia
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