Coca-Cola 96
La multinacional niega haber influido en la elecci¨®n de Atlanta como sede ol¨ªmpica
ALBERT MONTAGUTLos directivos de la multinacional de refrescos Coca-Cola Company han negado que hayan influido en el Comit¨¦ Ol¨ªmpico Internacional (COI) para que la ciudad de Atlanta (Georgia, EE UU), hogar de la famosa firma, sea designada sede ol¨ªmpica para 1996. El presidente del COI, Juan Antonio Samaranch, tambi¨¦n se ha manifestado en ese sentido. Pero nadie ha podido evitar la sospecha de que la influencia de la multinacional haya sido decisiva.
En una declaraci¨®n oficial de Coca-Cola, efectuada a este diario por Carol Martel, portavoz de la compa?¨ªa en Atlanta, se expresaba la postura de la compa?¨ªa: "Coca-Cola no ha realizado maniobras para influenciar [al COI] sobre la sede de los Juegos de la Olimpiada de l996". Coca-Cola, que cuenta con la imagen de marca m¨¢s conocida del inundo, por delante de Sony, Mercedes Benz y Kodak, asegura que su empresa ha jugado un papel "neutral" en la decisi¨®n del COI. Algunos datos indican lo contrario.Si bien parece ser cierto que la empresa madre de esta multinacional de las burbujas, la Coca-Cola Company, se ha mantenido aparentemente al margen de los miembros de la familia ol¨ªmpica durante las deliberaciones del COI, durante los meses que precedieron a las votaciones en Tokio los responsables de la compa?¨ªa se volcaron sobre los delegados que visitaron Atlanta para conocer de cerca su proyecto Ol¨ªmpico.
Adem¨¢s, las dos subsidiarias norteamericanas de la compa?¨ªa entregaron al Atlanta Organizing Committee (AOC) mucho m¨¢s dinero que el invertido por sus hermanas de Melbourne, Toronto o Atenas a los comit¨¦s ol¨ªmpicos de sus ciudades. Se estima que Coca-Cola USA y Coca-Cola Enterprises invirtieron en la candidatura de Atlanta 350.000 d¨®lares (35 millones de pesetas). Esta apuesta y el ¨¦xito de la inversi¨®n justifican las sonrisas y la alegr¨ªa que reina estos d¨ªas en las instalaciones de Coca-Cola en Atlanta, donde la muchos empleados lucen chapas en sus solapas en las que se puede ver el logotipo de la compa?¨ªa junto a los aros ol¨ªmpicos y la leyenda "Atlanta 96".
Empresa ol¨ªmpica
Pero existen m¨¢s datos, adem¨¢s de que Roberto Goizueta, el presidente de la compa?¨ªa, sea de origen espa?ol y un gran amigo personal de Samaranch. La subsidiaria inglesa de Coca-Cola no dio ni un solo penique a los miembros del comit¨¦ de Manchester, uno de los contendientes de Atlanta, porque sus responsables consideraban "inapropiado" invertir su dinero para apoyar una candidatura que compet¨ªa con Atlanta. Las cr¨ªticas levantadas en Gran Breta?a decidieron a la Coca-Cola Company aconsejar a su filial de Manchester que colaborara con el proyecto para no levantar m¨¢s suspicacias.
Coca-Cola, con sede en 163 pa¨ªses y cuyo lema es "Piensa globalmente, act¨²a localmente", est¨¢ ¨ªntimamente ligada a los Juegos y al COI, a pesar de que Samaranch diga que "calificar los Juegos del 96 como los Juegos de Coca-Cola vende peri¨®c1icos". Samuel Pisar, uno de los abogados del COI, ha explicado que si bien Atenas ayud¨® a nacer a los Juegos, Coca-Cola los consolid¨®.
Todo comenz¨® en los Juegos de Amsterdam. Coca-Cola envi¨® 1.000 cajas de botellas para refrescar a la delegaci¨®n norteamericana; en 1936 ayud¨® a sus atletas a competir contra los nazis en los Juegos de Berl¨ªn; en 1979 cre¨®, conjuntamente con el COI, la Galer¨ªa de la Fama Ol¨ªmpica en Colorado Springs (EE UU); en 1988 se convirti¨® en el primer patrocinador oficial del COI, con la cantidad de 15 millones de d¨®lares (1.500 millones de pesetas) anuales; en 1987, Coca-Cola pag¨® un mill¨®n de d¨®lares (100 millones de pesetas) como contribuci¨®n al Museo Ol¨ªmpico, uno de los sue?os de Samaranch, en Lausana (Suiza).
La inversi¨®n de Coca-Cola en Se¨²l fue de 40 millones de d¨®lares (4.000 millones de pesetas), cantidad que se superar¨¢ en Barcelona y que se disparar¨¢ en Atlanta. Los Juegos del 96, a pesar de Samaranch, ser¨¢n los Juegos de Coca-Cola, y adem¨¢s por simple l¨®gica: porque Atlanta es Coca-Cola.
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