Labradores en la ciudad
La Gran Fiesta del Campo intenta conciliar en Madrid el medio rural y el urbano
El primer intento de devolver a la ciudad de Madrid la cultura y la vida rural, 14 a?os despu¨¦s de que se celebrase la ¨²ltima Feria del Campo, ha concentrado en la Ciudad de los Ni?os de la Casa de Campo la primera Gran Fiesta del Campo. Mientras algunos agricultores calificaron de escasa la oferta ganadera y la exposici¨®n de maquinaria, los ni?os de la capital, poco habituados a ver un animal de granja, quedaban impresionados ante las dimensiones de un toro semental o el olor de un cerdo serrano.
"Venir aqu¨ª para comprar ganado o ver lo ¨²ltimo en maquinaria no merece mucho la pena. En todo caso, est¨¢ bien para acercarse a Madrid, vamos, de excursi¨®n", dijo Francisco Blanco Carrillo, vicepresidente de la Camara Agraria de Calzada de Calatrava, que vino desde esta localidad manchega exclusivamente para visitar la Gran Fiesta del Campo."Hay poca muestra de ganado, s¨®lo unas pocas razas, y en cuanto a las m¨¢quinas, las tendr¨¢n en papel, porque expuestas, muy poca cosa", apostill¨® Ram¨®n Garc¨ªa Garc¨ªa, presidente de otra de las cooperativas agr¨ªcolas de Calatrava, y que se enorgullece de ser "primo pol¨ªtico de Pedro Almod¨®var".
La Gran Fiesta del Campo, organizada por la Asociaci¨®n Agraria de J¨®venes Agricultores (Asaja), "busca sobre todo un acercamiento entre el medio rural y la vida urbana, y el reencuentro con unas tradiciones que siguen vivas en muchos rincones de Espa?a", seg¨²n fuentes de la organizaci¨®n.
Esta fiesta, organizada por los agricultores, tiene un presupuesto de 500 millones de pesetas, y desde el pasado mi¨¦rcoles ha recibido ya a m¨¢s de 75.000 visitantes. "No hemos contado con ninguna subvenci¨®n oficial, tan s¨®lo algunas comunidades aut¨®nomas que participan han pagado las conferencias o han aportado productos".
Toros, ovejas y cabras
Isidoro Rom¨¢n, ganadero de Ledesma (Salamanca) que expone sus hermosas ovejas de raza Assaf y vende los sementales, se quejaba de la organizaci¨®n. "Lo han hecho todo solos, sin ayuda oficial de ning¨²n tipo, y la primera oferta que hicieron sobre el precio del metro cuadrado ten¨ªa un precio muy alto, por eso ha habido gente que se ha quedado en casa", dijo."Con la cantidad de ganado que hay en Espa?a, y mira qu¨¦ pocos estamos aqu¨ª", contest¨® su mujer. En la explanada de la ganader¨ªa, nueve toros frisones de Cantabria, varias cabras de raza serrana y granadina procedentes de Ciudad Real, unas ovejas churras de Palenc¨ªa y algunos cerdos, eran los representantes de la ganader¨ªa nacional.
"Lo que m¨¢s me ha gustado han sido los animales, sobre todo los cerdos, porque en el resto no te dan nada gratis de merendar", dijo Javier, de ocho a?os, que ven¨ªa acompa?ado por su padre. "Ya merendamos ahora en ese chiringuito, hijo", le contest¨®. Y es que, lo que mas atrae al p¨²blico de estas ferias es "la posibilidad de que te inviten a algo".
"El primer d¨ªa dimos vino gratis, y aqu¨ª no cab¨ªa un alfiler Ahora hemos puesto el cartel de cata a cinco duros, y no se acerca casi nadie", explic¨® Santiago Ysart ?lvarez de Toledo, de 18 a?os, representante de la bodega familiar donde se cr¨ªan vinos de Villafranca del Bierzo.
Piment¨®n de calidad
"La gente siempre pregunta si regalamos el piment¨®n, pero despu¨¦s, cuando ven su calidad, acaban compr¨¢ndolo, porque de¨¦sto no hay en Madrid", explica Paloma, que vende piment¨®n de la Vera en el pabell¨®n de la Junta de Extremadura. Frente a ellos, la gente curiosea en los puestos de Canarias y Galicia, donde no se vende nada, pero que est¨¢n atendidos por unas amables azafatas, todas madrile?as.Los organizadores esperan la visita durante este fin de semana de m¨¢s de 100.000 personas, muchas provenientes de otras comunidades aut¨®nomas, generalmente agricultores que viajan en autobuses y se trasladan especialmente para la ocasi¨®n.
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