Thatcher dicide mide la incorporaci¨®n de la libra al Sistema Monetario Europeo a partir del lunes
El Gobierno brit¨¢nico sorprendi¨® ayer a los mercados financieros y a la naci¨®n con el anuncio de que la libra se integrar¨¢ de pleno en el Sistema . Monetario Europeo (SME) a partir del pr¨®ximo lunes. La divisa brit¨¢nica adoptar¨¢, al igual que la espa?ola, la banda ancha del 6%, con un tipo de cambio de 2,95 marcos por libra. La inesperada noticia, muy bien acogida en todos los sectores econ¨®micos, hizo subir como una -flecha la cotizaci¨®n burs¨¢til. El Gobierno anunci¨®, asimismo, el recorte en un punto de los tipos de inter¨¦s.
Margaret Thatcher hizo ayer de tripas coraz¨®n y decidi¨® dar el visto bueno a la vinculaci¨®n de la divisa brit¨¢nica a las del resto de la comunidad, una medida que siempre le ha desagradado y un momento que siempre hab¨ªa procurado posponer. Al poco de trascender la decisi¨®n, la primera ministra improvis¨® una conferencia de Prensa callejera frente a su residencia para decir que Ias pol¨ªticas econ¨®micas est¨¢n funcionando y se ve que lo hacen". Las advertencias de la patronal de que la pol¨ªticas restrictivas est¨¢n ya enfriando la econom¨ªa junto al estudio de otros ¨ªndices "y, sobre todo, las condiciones monetarias nos llevan a reducir los tipos de inter¨¦s del 15% al 14%; y esa claridad (de perspectivas econ¨®micas) nos permite, adem¨¢s, solicitar la integraci¨®n en el Sistema Monetario Europeo, lo que al tiempo ayudar¨¢ en la pol¨ªtica antiinflacionaria. Lo m¨¢s importante es rebajar la inflaci¨®n".Tensiones inflacionistas
La primera ministra se?al¨® que hab¨ªa pruebas palpables de que se estaban reduciendo las tensiones inflacionistas y, en consecuencia, hab¨ªa llegado la hora de alinear la libra con las otras divisas comunitarias. Thatcher dijo que ya se han cumplido las condiciones que puso en las cumbre comunitaria de Madrid para esa integraci¨®n, pues los restantes socios comunitarios han liberalizado la provisi¨®n de servicios financieros y la competencia aunque todav¨ªa no tanto -como ser¨ªa de desear.
En junio de 1989, Thatcher condicion¨® la libra a que la inflaci¨®n brit¨¢nica fuera an¨¢loga a la media de la Comunidad Europea, pero John Major, ministro de Hacienda, manifest¨® la semana pasada que se trata de que la inflaci¨®n tienda hacia la media comunitaria, que en la actualidad ronda el 5%. En estos momentos la inflaci¨®n brit¨¢nica es del 10,6% y al alza, aunque Major sostuvo ayer que "podemos ver claramente que la inflaci¨®n est¨¢ cayendo hacia la media europea".
La sorprendente decisi¨®n fue acogida con entusiasmo por la industria, los sindicatos y los mercados financieros, si bien tambi¨¦n se escucharon voces que advert¨ªan que la integraci¨®n en el SME no es ninguna panacea, como muestra el caso espa?ol y que se tardar¨¢ varios a?os en notar sus efectos. La bolsa subi¨® m¨¢s de 70 puntos como consecuencia del anuncio y oper¨® una hora m¨¢s de lo habitual.
Robin Leigh-Pemberton, gobernador del Banco de Inglaterra, se congratul¨® de la medida que, dijo, "proporciona un claro marco en que desarrollar la pol¨ªtica antinflacionaria". Un portavoz de la patronal Confederaci¨®n de la Industria Brit¨¢nica (CBI) se?al¨® que "esto traer¨¢ estabilidad frente a otras divisas europeas y, mayor predictibilidad para los negocios brit¨¢nicos". Para la CBI tambi¨¦n fue buena noticia el recorte en un punto de los tipos de inter¨¦s. Norman Wilis, secretario general dipl Trades Union Congress (TUC, sindicatos brit¨¢nicos) dijo que hac¨ªa tiempo que hab¨ªa que haber adoptado esa medida.
Un analista del Chase Investment Bank apel¨® a la cautela y se?al¨® que "hay pocas pruebas de que la inflaci¨®n de un pa¨ªs mejore en los cuatro o cinco primeros a?os tras la integraci¨®n en el SME", mientras David Kern, del Nat West, advert¨ªa que nadie podr¨¢ huir de la dura realidad de un proceso de contenci¨®n de la inflaci¨®n y de reducci¨®n del d¨¦ficit en la balanza de pagos que implicar¨¢ dolorosos reajustes en los a?os venideros.
Victoria de John Major
La entrada en el SME es un sapo que ha tenido que tragarse Thatcher, una victoria para Major y que la primera ministra acepta con la esperanza de que aclare los nubarrones que se ciernen sobre la econom¨ªa brit¨¢nica, un caldo de cultivo ideal para la alternativa laborista. Los analistas consideran que la libra en el SME es se?al del mayor compromiso europe¨ªsta del Gobierno brit¨¢nico, aunque ayer Thatcher volvi¨® a reiterar su "total oposici¨®n a la divisa ¨²nica" europea.
Ahora los observadores recuerdan las recientes manifestaciones de Major en las que precisaba que una inflaci¨®n elevada del 10,4%, como la que soporta Gran Breta?a, dificultaba una r¨¢pida incorporaci¨®n de la libra al SME. Pero el ministro brit¨¢nico tambi¨¦n dijo y, esto pas¨® m¨¢s desapercibido, que en cuestiones de inflaci¨®n lo determinante es el futuro. Ello se interpreta ahora que con la decisi¨®n adoptada Gran Breta?a persiguir¨¢, sobre todo, aprovechar el cors¨¦ que impone el sistema para reforzar la lucha contra la inflaci¨®n.
El acompa?amiento del ingreso de la libra en el SME con una reducci¨®n de los tipos de cambio, puede, a juicio de los analistas del mercado monetario, acentuar las presiones para que la peseta reduzca sus tipos de inter¨¦s.
El Ministerio de Econom¨ªa espa?ol, por su parte, no quiso hacer ayer ninguna valoraci¨®n del ingreso de la libra en el SME a la espera del dictamen que d¨¦ hoy el Comit¨¦ Monetario, que se reunir¨¢ en Bruselas. El Comit¨¦ Monetario -en el que est¨¢n presentes por parte espa?ola, el director general del Tesoro, Manuel Conthe y el subgobernador del Banco de Espa?a, Luis ?ngel Rojo- analizar¨¢ hoy los efectos del ingreso de la libra en el SME.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.