Una apariencia de borracherra
La doctora Morales sufri¨® en el Himalaya un edema cerebral, una de las complicaciones m¨¢s graves del mal agudo de monta?a, provocado por la hipoxia, es decir, la disminuci¨®n del ox¨ªgeno ambiental "Fue antes de la avalancha' recuerda. "Una noche en el campamento base -a 5.100 metros-, despu¨¦s de la cena y la tertulia me fui para mi tienda haciendo eses. Angel Ortiz, uno de los monta?eros, me lo hizo notar, muy extra?ado porque no le hab¨ªa parecido que estuviese borracha. Algo preocupada me tom¨¦ una aspirina y unos diur¨¦ticos. Creo que esto me salv¨® la vida. Me despert¨¦, al d¨ªa siguiente, con un gran edema facial y parcialmente obnubilada".
"Entonces fui a C¨¦sar P¨¦rez de Tudela, jefe de la expedici¨®n, y le dije: 'O me met¨¦is en la c¨¢mara hiperb¨¢rica (una especie de saco en cuyo interior se produce una presi¨®n equivalente a los 2.000 metros), o me baj¨¢is, o me muero"."C¨¦sar", recuerda, "rne dijo que me prohib¨ªa que me muriera y orden¨® que me bajaran inmediatamente. Fue lo ¨²ltimo que dije porque luego tengo de todo un recuerdo muy confuso, cada vez estaba menos consciente. El problema era que s¨®lo yo sab¨ªa manejar la c¨¢mara hiperb¨¢rica".
Decidida la evacuaci¨®n pusieron a la doctora Morales encima de un burro y dos monta?eros la acompa?aron hasta los 3.800 metros de altitud. El viaje dur¨® cuatro d¨ªas de lluvias y otras vicisitudes. "Me ten¨ªan que sujetar porque me ca¨ªa del burro, y hasta ten¨ªan que ponerme a orinar. Una de las noches, alguien me rob¨® los pantalones y uno de mis compa?eros me prest¨® los suyos. ?l iba en calzoncillos por el Himalaya. Deb¨ªamos parecer un cuadro". Al cabo de una semana se reincorporaron al resto del grupo, ella con 10 kilos de menos, y poco despu¨¦s ocurri¨® la tragedia de la avalancha.
A pesar de los dramas vividos, Mal¨¦n Morales, que tiene dos hijos adolescentes, Jos¨¦ y Manolo, afirma que volver¨¢ a estar en la pr¨®xima expedici¨®n. "Al principio piensas que no es justo que por tu aventura puedas hacer da?o a tus familiares, pero despu¨¦s vas asumiendo de nuevo el riesgo de la monta?a".
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