Guardas jurados vigilar¨¢n los de Archy para evitar el consumo de coca¨ªna
La empresa Nascron, propietaria de la discoteca Archy, se ha comprometido a colocar dos vigilantes jurados en los servicios para impedir que los clientes inhalen coca¨ªna en el interior. El consumo de estupefacientes fue la raz¨®n esgrimida por la Delegaci¨®n del Gobierno para cerrar la discoteca el pasado 12 de julio. Los propietarios del famoso local gastar¨¢n al mes medio mill¨®n de pesetas m¨¢s para cumplir las exigencias policiales previas a la apertura del local que se realiza hoy.
Los due?os de la conocida discoteca han eliminado una de las puertas de acceso a los servicios de la planta superior, que dejaba aislado y oculto un pasillo en el que la polic¨ªa sospechaba que se preparaban las rayas de coca previas al consumo,. Este pol¨¦mico corredor quedar¨¢, pues, a la vista y con un vigilante jurado para "hacer m¨¢s estricto el control", seg¨²n manifest¨® Jos¨¦ Lozano, uno de los propietarios del local. En otros locales de Madrid la luz de los aseos es azul o rosa para evitar que se distinga el color blanco del polvo de la coca¨ªna.Hasta el momento, el seguimiento de posibles consumos de estupefacientes estaba siendo realizado por los camareros y maitres del local, que ahora ser¨¢n sustitu¨ªdos "por profesionales de la seguridad vestidos de uniforme", seg¨²n confirm¨® Lozano, respondiendo as¨ª a los requerimientos de la comisar¨ªa de Chamber¨ª y de Delegaci¨®n del Gobierno para permitir la reapertura de la sala despu¨¦s de los tres meses de cierre que establec¨ªa la sanci¨®n.
Respecto a la solicitud de la Administraci¨®n para que los responsables de Archy especifiquen "las instrucciones con que deben actuar los empleados en el interior del establecimiento y en el servicio de admisi¨®n", Lozano manifest¨® que se extremar¨¢n las precauciones, "sobre todo tal y como hac¨ªamos antes, cuando en el interior se encuentren personalidades".
Aludiendo a las p¨¦rdidas econ¨®micas que el cierre ha ocasionado, Lozano, que cuenta con una plantilla de 70 personas en la sala, explic¨® que "in¨¢s que el dinero" lamentaba "el desprestigio y el deterioro de imagen" que ha supuesto la -sanci¨®n.
Criterios est¨¦ticos
No obstante, pese a reconocer el elitismo que el lugar pretende, Jos¨¦ Lozano asegur¨® que, excepto a personas con s¨ªntomas de haberse drogado o bebido en exceso, no se impedir¨¢ la entrada a nadie por criterios est¨¦ticos."Sin embargo", a?adi¨®, "si alguna persona hace algo que no vaya con el ambiente normal, como fumarse un porro, ser¨¢ expulsada del local".
Jos¨¦ Lozano asegur¨® que la reapertura del local ya se hab¨ªa comunicado extraoficialmente desde hac¨ªa d¨ªas. Ayer mismo, seg¨²n un responsable de la discoteca, se envi¨® el escrito oficial a la Delegaci¨®n del Gobierno y a la comisar¨ªa del distrito de Chamber¨ª. Esta noche se celebrar¨¢ enla sala una fiesta informal para conmemorar el permiso oficial de llenar de nuevo la parte inferior del local, ya que el restaurante, situado en la primera planta, ha seguido funcionando "estupendamente", seg¨²n Lozano, a pesar de la clausura.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.