Un largo camino
El derecho de reversi¨®n a Jos¨¦ Mar¨ªa Ruiz-Mateos de las empresas de Rumasa no implica la devoluci¨®n autom¨¢tica de las acciones al empresario Jerezano. Para que esto fuera as¨ª, el Tribunal Supremo deber¨ªa desestimar los recursos interpuestos por el Estado, lo que convertir¨ªa en firmes las sentencias del Tribunal Superior de Madrid, proceso que puede durar m¨¢s de un a?o.En el supuesto de que efectivamente el alto tribunal diera la raz¨®n a Ruiz-Mateos, ¨¦ste tendr¨ªa que pagar al Estado todo el dinero que la Administraci¨®n ha empleado en el saneamiento de las empresas en litigio m¨¢s los justiprecios abonados a los accionistas minoritarios. En el h1pot¨¦tico caso de que todas las empresas revirtieran a Ruiz-Mateos, el empresario Jerezano deber¨ªa pagar 699.500 millones de pesetas, cifra que, seg¨²n el Tribunal de Cuentas, cost¨® la llamada Operaci¨®n Rumasa.
Si la Administraci¨®n y Ruiz-Mateos no llegaran a un acuerdo sobre las cantidades que ¨¦ste habr¨ªa de abonar para recuperar sus acciones, el contencioso volver¨ªa de nuevo a los tribunales. Por contra, si finalmente se fija la aportaci¨®n que ha de pagar Ruiz-Mateos y ¨¦ste recupera sus acciones, los actuales propietarios de las empresas de la antigua Rumasa podr¨ªan demandar al Estado por "da?os y perjuicios", seg¨²n han se?alado en fuentes de la Abogac¨ªa del Estado.
La reversi¨®n del Atl¨¢ntico -primera decretada sobre una empresa cotizada en Bolsa- "no preocupa en absoluto a la actual direcci¨®n de la entidad", seg¨²n fuentes del banco, que fue comprado en mayo de 1984 por el Arab Banking Co., el Banco Exterior de Espa?a y el Banco ?rabe Espa?ol.
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