Un a?o de abstinencia
El Athletic es incapaz de ganar fuera de San Marn¨¦s
El Athletic de Bilbao vive tiempos de abstinencia fuera de San Mam¨¦s. Desde el 8 de octubre del pasado a?o, fecha de su victoria por 0-1 en terreno del Sporting, el equipo bilba¨ªno s¨®lo ha conseguido una victoria en cancha ajena. La gesta tuvo lugar en M¨¢laga, en marzo. En la trastienda de esta incapacidad se encuentran las dificultades del Athletic para adecuarse a los nuevos tiempos futbol¨ªsticos.
Tres entrenadores (Kendall, Rojo y Clemente), cinco fichajes (Loren, R¨ªpodas, Iturrino, Villabona y, Valverde) y dos competiciones (Liga y Copa) no han bastado para que el Athletic recupere algo de eficacia fuera de San Mam¨¦s.El retorno de Javier Clemente no ha hecho sino culminar la degradaci¨®n de la imagen del equipo en los desplazamientos que tuvo el pasado jueves en Marbella, en la Copa, su efecto m¨¢s desolador. El Athletic s¨®lo fue capaz de empatar sin goles ante un modesto conjunto de Tercera Divisi¨®n tras dejar sobre el c¨¦sped una p¨¦sima impresi¨®n.
A juzgar por las estad¨ªsticas, que contabilizan en un ano 16 derrotas, cinco empates y una victoria, los males rojiblancos son m¨¢s profundos que el hecho circunstancial de qui¨¦n ocupe plaza en el banquillo. A Howard Kendall se le reproch¨® el progresivo languidecimiento del equipo, lo que motiv¨® en las gradas la exigencia del retorno al f¨²tbol racial, y antediluviano en ocasiones, que ejerce a¨²n un Influjo m¨ªtico para afrontar los tiempos de crisis. Txetxu Rojo no tuvo tiempo ni ocasi¨®n para imprimir su filosof¨ªa futbol¨ªstica a un equipo confeccionado a la medida del t¨¦cnico ingl¨¦s. Javier Clemente lleg¨® para resumir las esencias que demandaba la grada y dotar al Athletic del esp¨ªritu de equipo compacto, aguerrido y funcional que ha caracterizado siempre la labor del t¨¦cnico vizca¨ªno.
De la mano de Clemente el Athletic ha exhibido una mejor disposici¨®n f¨ªsica y una propensi¨®n mayor al sacrificio, al destajismo. Sin embargo, su f¨²tbol mantiene intactas las mismas carencias: falta de clarividencia ofensiva, acumulaci¨®n de despistes (individuales o colectivos) y escasez de recursos t¨¦cnicos para afrontar situaciones comprometidas. Estos condicionantes revelan toda su pobreza en las visitas a otros estadios.
Desde algunos sectores se acusa al equipo rojiblanco de alejarse en exceso de la metodolog¨ªa futbol¨ªstica que se abre paso en Europa. Mientras el f¨²tbol observa internacionalmente un creciente esp¨ªritu cient¨ªfico y estrat¨¦gico, San Mam¨¦s se debate en pol¨¦micas est¨¦riles sobre si afrontar los partidos con dos o tres hombres adelantados. Al final, la discusi¨®n se zanja con un f¨²tbol basado en los env¨ªos a¨¦reos desde los laterales, a pesar de la p¨¦rdida notable de poder¨ªo en esa faceta del juego. El mito de Belauste y "a m¨ª el pelot¨®n" se impone por encima de cualquier medida sensata. Las "paredes" est¨¢n prohibidas en San Mam¨¦s y escasean los hombres que tomen la batuta cuando impera el desconcierto.
El nuevo presidente, Jos¨¦ Juli¨¢n Lertxundi, arranc¨® su campa?a prometiendo un cambio del punto de vista ingles, que ha ejercido una funci¨®n sagrada en el Athletie, por un modelo m¨¢s cercano a los planteamientos holandeses. Unos meses despu¨¦s, el Athletic no se parece a nadie en concreto. Su incuestionable abolengo cuenta ya con un nuevo valor hist¨®rico: en sus visitas nunca pone en apuros a su anfitri¨®n.
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