MOPU y Ayuntamiento permiten construir a 10 metros de la ampliaci¨®n de la N-VI

El Ayuntamiento de Madrid ha tramitado y concedido en el ¨²ltimo a?o una veintena de licencias para construir oficinas en los bordes de la actual carretera de La Coru?a, sin que los permisos se hayan visto afectados por la inminente ampliaci¨®n de la v¨ªa. Muchas de las nuevas construcciones se quedar¨¢n as¨ª a una distancia de entre 10 y 12 metros de borde de la nueva carretera.

A mediados del a?o pasado el Consejo de Ministros decidi¨® ampliar la carretera de La Coru?a para paliar su saturaci¨®n. El MOPU, para ello, deb¨ªa expropiar una media de 12 metros a cada lado de la carretera. Piscinas, jardines, terrazas de restaurantes, aparcamientos hasta parte de una discoteca ten¨ªan que dejar sitio al asfalto.Pero la ampliaci¨®n, cuando ¨¦sta termine, no s¨®lo habr¨¢ afectado a las edificaciones que a lo largo de los ¨²ltimos a?os han constre?ido la autov¨ªa. Tambi¨¦n las construcciones recientes quedar¨¢n a ras de la calzada As¨ª lo han consentido el MOPU y el Ayuntamiento, que han seguido concediendo los corres pondientes permisos; el Ayuntamiento, porque nadie le ha pedido el cambio de planeamiento y, por tanto, para este organismo nada ha cambiado; el MOPU porque las nuevas construcciones en marcha no imped¨ªan la ampliaci¨®n de la v¨ªa.

Algunas fuentes municipales consideran que el resultado urban¨ªstico final, una autovia flanqueada por edificaciones a escasos metros, podr¨ªa haberse evitado. El MOPU ten¨ªa en sus manos la posibilidad de obligar al Ayuntamiento a modificar el Plan General con objeto de reducir la edificabilidad en zona. Seg¨²n el Ayuntamiento ello hubiera disparado los costes de expropiaci¨®n.

Una modificaci¨®n de planeamiento para reducir las parcelas en beneficio de la autov¨ªa habr¨ªa obligado a los propietarios de los solares a construir edificios m¨¢s peque?os y m¨¢s alejados de la calzada o incluso a no construir al no tener espacio para ello.

Iniciativa municipal

En este caso el MOPU, responsable de la modificaci¨®n, habr¨ªa tenido que pagar la expropiaci¨®n del terreno y los metros cuadrados de construcci¨®n perdidos. El Ayuntamiento tambi¨¦n podr¨ªa haber cambiado el planeamiento por propia iniciativa, lo que le hubiera supuesto asumir esos costes.El MOPU, en vez de iniciar el proceso, se limit¨® a comunicar al Ayuntamiento el proyecto de ampliaci¨®n de la carretera. Los responsables ministeriales aseguraron entonces que no era necesario el cambio urban¨ªstico, pues no se trataba de abrir una nueva carretera sino de ampliar la existente.

Entre ellos, la Junta Municipal de Moncloa se encontr¨® en la tesitura de conceder o paralizar las licencias que ten¨ªa en marcha para las nuevas construcciones. Tras consultar con la Gerencia Municipal de Urbanismo, continu¨® tramit¨¢ndolas.

Seg¨²n inform¨® Ricardo Peydr¨®, presidente de la Junta de Moncloa, la ¨²nica salvaguardia que se mantuvo para concederlicencias fue que los promotores aportaran el preceptivo permiso del MOPU en el que se fijan las distancias que deben respetar las edificaciones. Peydr¨® a?adi¨® que este informe se viene solicitando desde hace a?os y que en todos los casos el MOPU ha establecido para los edificios una distancia m¨ªnima de 31,5 metros del eje de la carretera o de 20 metros del arc¨¦n m¨¢s pr¨®ximo.

El MOPU ya ha terminado las actas de ocupaci¨®n previa de los terrenos a expropiar para ampliar la autov¨ªa y ha comenzado a recibir de los propietarios las valoraciones hechas por ellos.