El fiscal jefe de Navarra dice que una violaci¨®n no ocurre si la v¨ªctima no quiere

El fiscal jefe del Tribunal Superior de Justicia de Navarra, Jos¨¦ Mar¨ªa F¨¦lez Carreras, afirm¨® que "una persona no consiente en un estupro o violaci¨®n que no quiere; corta y ya est¨¢", durante la vista oral del juicio seguido en Pamplona contra Jos¨¦ Manuel Peru Urtasun, acusado de haber violado a una hija menor de edad en el domicilio familiar de la localidad de Burlada en 1987.Jos¨¦ Mar¨ªa F¨¦lez explic¨® su petici¨®n de seis a?os de prisi¨®n menor por un presunto delito de estupro al indicar que no hab¨ªa encontrado motivos para calificar los hechos como violaci¨®n, "porque en este caso", indic¨® el fiscal jefe, "el padre se prevali¨® de su condici¨®n ante la hija, pero no existi¨® intimidaci¨®n. No vale decir", a?adi¨® F¨¦lez, "que no se est¨¢ de acuerdo si no se hace nada", precisando que hab¨ªa habido un temor reverencial hacia el padre por parte de su hija.

Las palabras del fiscal sorprendieron al letrado de la acusaci¨®n particular, Jos¨¦ Guru?uela, quien se?al¨® ante la sala que "el fiscal no ha hecho una sola acusaci¨®n contra el procesado, sino que ha puesto en tela de juicio la actitud de la agredida justificando al agresor".

La acusaci¨®n pidi¨® 12 a?os de prisi¨®n por un delito de violaci¨®n. La v¨ªctima, que en la actualidad tiene 16 a?os, relat¨® que su padre regresaba a casa borracho "y hubo veces que abus¨® de m¨ª y de mi hermano subnormal". A preguntas del fiscal reiter¨® que "me lo hizo por la fuerza, me desnud¨® y me introdujo el pene".

La esposa del acusado, separada de ¨¦l en la actualidad, ratific¨® esta versi¨®n y se?al¨® que denunciaron los hechos a la polic¨ªa al empeorar el ambiente familiar.

La actitud del fiscal F¨¦lez coincide con las posiciones mantenidas por algunos tribunales en los ¨²ltimos tiempos en materia de violacion y abusos sexuales, cuando exculparon a los presuntos autores de este delito por entender, en unos casos, que la conducta "licenciosa" de la mujer liberaba de responsabilidad a quienes violentaban su Iibertad sexual.

Precisamente, en relaci¨®n con la actitud de los fiscales en los delitos contra la libertad sexual, una reciente circular del fiscal general del Estado (ve¨¢se EL PA?S del jueves 22 de noviembre) se?ala que en los delitos sexuales contra menores la acci¨®n de denuncia del fiscal "ha de concebirse m¨¢s que como una facultad, como una funci¨®n, en cuyo ejercicio han de tenerse en cuenta no s¨®lo los intereses p¨²blicos de la persecuci¨®n del delito, sino tambi¨¦n los intereses personales del menor o incapaz, al que ante todo viene obligado el fiscal a tutelar".