El Rey pide a los medios de comunicaci¨®n mesura y respeto a la verdad"
El rey Juan Carlos pidi¨® a los medios de comunicaci¨®n "la m¨¢xima profesionalidad y responsabilidad" en el ejercicio de su tarea y consider¨® leg¨ªtimo que si hay que pedir comprensi¨®n a quienes reciben cr¨ªticas, "es leg¨ªtimo pedir tambi¨¦n mesura y respeto a la verdad a quienes las hacen". Don Juan Carlos, en su tradicional discurso de Navidad, pronunciado en la noche del 24 de diciembre, agradeci¨® a los espa?oles "el apoyo" que se le ha prestado desde que asumi¨® la jefatura del Estado, hace 15 a?os.
El mensaje del monarca espa?ol dice en su n¨²cleo fundamental lo siguiente:"Hace un a?o me dirig¨ª a vosotros con ocasi¨®n de las anteriores fiestas de Navidad, y me atrever¨ªa a decir que en este breve lapso de tiempo se han producido tantos acontecimientos y tantas novedades en el mundo como durante las ¨²ltimas d¨¦cadas. Ha sido precisamente la fuerza incontenible con que emergen los deseos de libertad de los hombres la que ha provocado que sistemas que parec¨ªan inconmovibles se hayan venido abajo con tanta celeridad, dando paso as¨ª a la aparici¨®n, en el centro y en el este de Europa, de sociedades pluralistas estructuradas a partir de valores democr¨¢ticos. Estos valores -ahora compartidos por la casi totalidad de los pa¨ªses- han eliminado la tensi¨®n y han permitido establecer un nuevo sistema de relaciones internacionales basado en la cooperaci¨®n".
"Meses atr¨¢s, una situaci¨®n as¨ª nos hubiese parecido un sue?o. Hemos entrado en el ¨²ltimo decenio del siglo con un mundo en el que ha desaparecido la confrontaci¨®n entre los bloques, que hab¨ªa supuesto ahora el principal motivo de conflictividad. Un a?o, pues, marcado por el esfuerzo colectivo en favor de la paz; un a?o en el que se han registrado grandes avances, el principal de los cuales ha sido la firma del primer Tratado de Desarme Convencional y la Carta de Par¨ªs para una nueva Europa. Hechos que por s¨ª mismos permiten abrigar las esperanzas mejor fundadas acerca del futuro. La opini¨®n p¨²blica internacional, sin embargo, siente en estos ¨²ltimos tiempos una justificada inquietud por la aparici¨®n de una nueva amenaza para la paz derivada del conflicto del Golfo.
La comunidad internacional ha reaccionado con unanimidad ante la desestabilizaci¨®n provocada en esa zona del mundo. Este consenso internacional debe ser el que permita reconducir la situaci¨®n y establecer la paz en la regi¨®n de forma duradera (...)".
Los soldados de Espa?a
No debemos olvidar que para conseguir esa paz algunos compatriotas nuestros defiendan estos d¨ªas, lejos de su hogar, la aplicaci¨®n de las resoluciones de las Naciones Unidas. Para ellos tengo hoy el m¨¢s cordial de los recuerdos y mis palabras de aliento. Desde la alta responsabilidad que me corresponde quiero enviarles, por ello, un abrazo en nombre de todos los espa?oles, porque ellos son los soldados de Espa?a, y todos les apoyamos.
Si en el orden internacional es preciso siempre realizar un gran esfuerzo para conseguir y mantener ese bien tan preciado que es la paz, en el orden interno, el sistema democr¨¢tico, que hoy en Espa?a todos compartimos y disfrutamos, requiere una afirmaci¨®n permanente para que, d¨ªa a d¨ªa, se consolide y enriquezca hasta el punto de que a todos nos parezca algo tan natural como el aire que respiramos.
La libertad, el pluralismo y la solidaridad, elementos constitutivos de la democracia, reclaman de todos una aportaci¨®n constante. La democracia no es un valor est¨¢tico, sino que debe ser renovada con el avance y el progreso (...) Los ¨²ltimos 15 a?os han sido un excelente ejemplo de c¨®mo una sociedad puede recuperar la democracia de la manera m¨¢s pac¨ªfica y constructiva (...)
Una democracia avanzada no se entender¨ªa sin el equilibrio entre la veracidad de la informaci¨®n y el mayor respeto a la libertad de expresi¨®n, derecho consagrado por nuestra Constituci¨®n y a cuyo perfeccionamiento hemos de dedicar, tambi¨¦n, nuestros desvelos.
Si la libertad de expresi¨®n implica por parte de todos capacidad para aceptar las cr¨ªticas y las opiniones diversas, el derecho a la informaci¨®n veraz exige de los medios de comunicaci¨®n social la m¨¢xima profesionalidad y responsabilidad en el ejercicio de su tarea. Si hay que pedir comprensi¨®n ante las cr¨ªticas a quienes las reciben, es leg¨ªtimo pedir tambi¨¦n mesura y respeto a la verdad a quienes las hacen.
Cuando se cumplen 15 a?os desde que asum¨ª mi alta responsabilidad, quiero hacer llegar a todos los espa?oles mi m¨¢s sincero agradecimiento por el apoyo que me prest¨¢is y por el cari?o de que me hac¨¦is objeto (...) Hemos alcanzado, sin duda, grandes metas, pero es mucho lo que nos queda todav¨ªa por resolver.
Es cierto que subsisten problemas: el terrorismo, la droga, el paro, est¨¢n en el centro de nuestras preocupaciones.
Tampoco podemos olvidar que la construcci¨®n europea supone un reto de indudable trascendencia para el futuro. La previsible evoluci¨®n de nuestra econom¨ªa, tras cinco a?os de notable y continuado crecimiento, exige un permanente ejercicio de rigor y responsabilidad de toda la sociedad.
A todo ello hemos de dar respuesta. Los obst¨¢culos hay que superarlos, los desaf¨ªos hay que afrontarlos, y el ¨¦xito en el empe?o depender¨¢, sin duda, del esfuerzo solidario de todos, con la ilusi¨®n y el empuje de la juventud y con la serenidad y la experiencia de la madurez. Estoy seguro de que tenemos fuerza bastante para acometer esta tarea con una clara y elevada consideraci¨®n de nuestro pa¨ªs, del que debemos sentir orgullosos (...)
En la paz de la Navidad cristiana saludamos a todos los pueblos, y muy especialmente a nuestros hermanos de Am¨¦rica.
Los mejores deseos tambi¨¦n para esas naciones que empiezan a respirar el aire de la democracia y el progreso. Que ese progreso alcance a cuantos permanecen a¨²n en la pobreza, en el atraso, en la injusticia.
Y a esta gran familia, la de todos los espa?oles, dentro y fuera de Espa?a, al pedir a Dios que nos proteja y nos inspire sentimientos de paz, env¨ªo, en mi nombre y en el de mi familia, la felicitaci¨®n m¨¢s cordial.
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