Los planes de pensiones individuales despegan en 1990 al captar 70.000 millones de pesetas

Los planes de pensiones individuales -destinados a complementar las pensiones de la Seguridad Social en la jubilaci¨®n- han logrado despegar en 1990 por primera vez desde su creaci¨®n, en 1988. Seg¨²n el Ministerio de Econom¨ªa y algunas entidades financieras, esos planes han captado entre 65.000 y 70.000 millones de pesetas en 1990 (un 35% m¨¢s que en 1989), lo que trunca la mala acogida con que los espa?oles hab¨ªan recibido el producto.

Sin embargo, las altas aportaciones medias realizadas siguen alejando a los planes de pensiones individuales del car¨¢cter de ahorro popular vaticinado por algunos expertos en el momento de su creaci¨®n, en 1988.Aunque la patronal del sector Inverco no dispone todav¨ªa de datos definitivos porque las aportaciones se intensifican en los ¨²ltimos d¨ªas del a?o para beneficiarse de las fuertes deducciones fiscales previstas, fuentes del sector y del departamento que encabeza el secretario de Estado de Econom¨ªa, Pedro P¨¦rez, estiman que entre 1988 y 1990 los planes de pensiones han acumulado en Espa?a un fondo de 150.000 millones de pesetas, de los que la mitad proceden de aportaciones realizadas el a?o pasado. Los planes de pensiones individuales, creados en diciembre de 1988, captaron ese a?o en torno a 30.000 millones de pesetas y 56.000 millones en 1989.

Fuentes del sector se?alan que la captaci¨®n de planes de pensiones ha sido irregular entre las distintas entidades y se?alan su sorpresa por el desarrollo de estos planes en 1990, en un a?o que ha transcurrido bajo el signo del enfriamiento econ¨®mico y los primeros s¨ªntomas de crisis econ¨®mica.

Las cantidades captadas por algunas entidades revelan que los planes de pensiones individuales s¨®lo parecen interesar o estar al alcance de segmentos de poblaci¨®n con rentas medias/altas o altas. Algunas entidades afirman que durante 1990 han entrado en estos planes personas con un nivel de rentas medio. Las aportaciones medias anuales se est¨¢n situando en torno a las 250.000 pesetas, lo que hace que los planes de pensiones est¨¦n lejos de convertirse en un medio de captaci¨®n de ahorro popular como estimaban algunas entidades promotoras que desencadenaron en 1988 una intens¨ªsima campa?a publicitaria que hoy est¨¢ considerablemente frenada.

Reducir impuestos

Por el contrario, los planes de pensiones parecen haberse convertido en un medio id¨®neo para algunos inversores para pagar menos impuestos. De las aportaciones para constituir planes individuales pueden deducirse las primeras 500.000 pesetas en la base imponible y el resto hasta 750.000 en la cuota ¨ªntegra, siempre con el l¨ªmite general del 30% de la base imponible, lo que les convierte en el producto de ahorro/inversi¨®n mejor tratado fiscalmente en Espa?a si se exceptuan los pagar¨¦s del Tesoro cuyos rendimientos est¨¢n exentos de tributaci¨®n.La mayor¨ªa de las entidades que comercializan planes de pensiones individuales contin¨²an viendo en su iliquidez uno de los mayores inconvenientes para colocarlos entre sus clientes. El dinero depositado en planes individuales no queda disponible hasta la jubilaci¨®n, lo que les hace perder atractivo ante otros productos como los planes de jubilaci¨®n, con menores ventajas fiscales (hasta un 10% en la base imponible), pero completamente l¨ªquidos, seg¨²n manifiestan medios financieros.

Para el subdirector general de Planes de Pensiones, Jos¨¦ Miracle, esta falta de liquidez est¨¢ suficientemente compensada por el excepcional tratamiento fiscal de los planes y garantiza, adem¨¢s, que el inversor contin¨²e aportando fondos.

350.000 suscriptores

Por otra parte, la edad de entrada en el plan sigue tambi¨¦n alejada de las estimaciones realizadas por algunas entidades y est¨¢ siendo m¨¢s alta que lo esperado, del orden de 43/44 a?os.En 1990, alrededor de 65.000 personas se han incorporado a los planes de pensiones individuales, con lo que el n¨²mero de suscriptores ronda ya las 350.000 personas.

Al margen de los planes de pensiones individuales, 122 empresas se han decidido el pasado mes de noviembre a constituir fondos de pensiones externos para complementar la jubilaci¨®n de sus empleados.

Los fondos comprometidos para estos planes rondan los 600.000 millones de pesetas y afectan a unos 100.000 trabajadores.