Los negocios de la compa?¨ªa

Se advierte una deflaci¨®n de activos en todo el mundo y los precios de las compras a cr¨¦dito -Inmobiliario y operaciones de adquisici¨®n con apalancamiento- van perdiendo su volumen l¨ªquido como si se tratara de verduras pasadas por un colador. En la jornada burs¨¢til de ayer pes¨® como una losa la idea de que se mantendr¨¢ el endurecimiento monetario (tipos altos) alimentada por el mismo gobernador Mariano Rubio. Los ecos de las explosiones en el Golfo apenas resuenan en los salones de contrataci¨®n, mucho m¨¢s temerosos de la decisiones de los pools financieros internacionales que del precio del petr¨®leo o de la cotizaci¨®n del oro. Los mercados descuentan una guerra sin econom¨ªa de guerra porque ¨¦sta ya se produjo en los proleg¨®menos reales que durante una d¨¦cada la han alimentado. No hace tanto tiempo que el hoy presidente irani, Rafsanyani, prometi¨® a MeFarlane parar los combates en Basora si la compa?¨ªa favorec¨ªa un golpe de Estado en Irak capaz de acabar con Sadam Husein. No pudo ser y Bagdad mantuvo su fuerza a pesar del Irangate.El pragmatismo de los negocios previos a la guerra ha sido m¨¢s fr¨ªo que la ruta del oro vendido por la Uni¨®n Sovi¨¦tica a la anticomunista Sur¨¢frica.