William Burroughs graba un disco con m¨²sicos de rock

Algunas figuras del rock como John Cale, Donald Fagen y Sonic Youth, acompa?ados de la Orquesta Sinf¨®nica de la NBC, se han unido para grabar, con los textos y la voz del escritor norteamericano William S. Burroughs, un disco titulado Dead city radio, que se publica esta semana en Espa?a. Burroughs es el prototipo de escritor maldito, y las acusaciones de homosexual, drogadicto y amoral le convirtieron en un personaje vigoroso cargado de leyendas.

William Seward Burroughs naci¨® en Saint Louis, Misuri (Estados Unidos), el 5 de febrero de 1914. A punto de cumplir 77 a?os, ha grabado un disco con la ayuda de artistas tan diferentes como John Cale, Donald Fagen, Sonic Youth o la Orquesta Sinf¨®nica de la NBC. El disco con tiene 17 canciones, producidas por Hal Willner y Nelson Lyon y editadas en todo el mundo por la compa?¨ªa discogr¨¢fica Island.Sus furibundos ataques a lo establecido, han convertido a Burroughs en un escritor idolatrado por algunos grupos de rock. El grupo Sonic Youth tambi¨¦n ferozmente rebelde, le considera "uno de los escritores m¨¢s l¨²cidos de todos los tiempos". John Cale se refiere a ¨¦l como "una fuente eterna de inspiraci¨®n". Los textos que Burroughs ha escrito para Dead city radio, mantienen la tensi¨®n de su mejor ¨¦poca y se convierten en una precisa disecci¨®n de la sociedad actual. El disco, que no incluye los textos, est¨¢ dedicado "a la memoria, en el apocalipsils, de Keith Haring".

Pesimismo

Vestido siempre con impecables trajes oscuros, Burroughs mantiene en perfecta forma su penetrante mirada de lagarto y su esp¨ªritu rebelde. Esc¨¦ptico por naturaleza, aprovecha cualquier ocasi¨®n para maldecir desde sus dos metros de altura sobre la clase pol¨ªtica y lanzar mensajes de desesperanza. Su pesimismo le ha valido el sobrenombre de Profeta del Apocalipsis, apodo que acepta con placer: "Soy un narrador de miserias", afirma.En los textos de Dead city radio, reniega de los t¨®picos hippies, rechaza la paz y el amor como sistemas para transformar el mundo y recuerda con mal disimulada nostalgia su ¨¦poca dorada. La leyenda que forma parte de su vida cuenta que, cuando en 1942 el ej¨¦rcito norteamericano le rechaz¨® por paranoico, se traslad¨® a M¨¦xico para seguir una imaginaria ruta del peyote; o tambi¨¦n cuando en una gran fiesta intent¨® demostrar a todos sus cualidades como tirador de pistola, y una mujer se coloc¨® una copa en la cabeza y le pidi¨® que disparase. Burroughs suele narrar, con todo lujo de detalles y una sonrisa en los labios, c¨®mo la bala se aloj¨® entre las cejas de la mujer. Despu¨¦s de este incidente, el escritor regres¨® a Nueva York. Allen Ginsberg le oblig¨® a plasmar las ideas, y as¨ª surgi¨® Yonqui, su primera novela, editada bajo seud¨®nimo en 1953. Despu¨¦s vendr¨ªan Almuerzo desnudo y Nova express.

Burroughs fue durante 15 a?os adicto a diferentes opl¨¢ceos y psicof¨¢rmacos sint¨¦ticos, estando profundamente ligado en otros periodos de su vida al alcohol, el hach¨ªs y la hero¨ªna. Cansado del modo de vida norteamericano, instal¨® su residencia en T¨¢nger, donde pasaba los d¨ªas encerrado en su habitaci¨®n. Ahora, una vez desintoxicado, reniega de la generaci¨®n beat y busca la verdad en las entra?as del rock y de la literatura, para as¨ª poder golpear con la "hip¨®crita moral burguesa".