Oriana Fallaci vuelve al frente
Oriana Fallaci, que ya no es una ni?a y que se hab¨ªa hecho famosa como reportera de guerra en Vietnam, primero, y, m¨¢s tarde, en Oriente Pr¨®ximo, autora de Insallah, que no es otra cosa que la historia de la guerra de L¨ªbano tal como ella la vivi¨® entre las bombas y los muertos, ha vuelto a la guerra.Tras un silencio absoluto de m¨¢s de siete a?os en su casita de Nueva York, y despu¨¦s del ¨¦xito, de su ¨²ltima obra y de haberse hecho rica, Fallaci, la periodista quiz¨¢ m¨¢s odiada y amada del mundo y probablemente la m¨¢s envidiada, no ha resistido la tentaci¨®n y ha vuelto a vestirse con el caqui militar de esta nueva guerra, de la que, en su primer art¨ªculo, ayer, para Il Corr¨ªere della Sera, ha dicho que es "peor que la II Guerra Mundial". Y eso, porque, explica, "cuando silbaban las sirenas, se corr¨ªa a los refugios, pero sin la m¨¢scara y sin la doble congoja de poder morir aflixiado, es decir, dos veces".
La sola noticia de que Fallac¨ª estaba en Riad, en pleno frente, ha sido ya en Italia un acontecimiento period¨ªstico, hasta el punto de que ha sido la primera enviada entrevistada por los otros periodistas.
En su primer art¨ªculo, cont¨® ayer su experiencia dentro de un avi¨®n de abastecimiento en vuelo, y tambi¨¦n sus peripecias para colocarse la m¨¢scara y c¨®mo no consigue hacerlo en el tiempo reglamentar¨ªo. "Poseer la m¨¢scara", escribe, "es ya un lujo; tenerla puesta, un tormento.
Anoche, la alarma son¨® a las tres de la madrugada. Para vestirme emple¨¦ medio minuto, pero para ponerme la m¨¢scara necesit¨¦ minuto y medio, y otros dos se me fueron en la tentativa in¨²til de ponerme el mono antiNBC.
En resumen, que necesit¨¦ tres minutos y medio para ponerme, y mal, lo que el comit¨¦ de la defensa civil aconseja hacer en cinco o, como m¨¢ximo, nueve segundos".
Oriana confiesa que "el gran miedo", son los gases, y cita la confesi¨®n del general norteamer¨ªcano Richard Neil: "S¨ª, estamos preocupados por el Scud qu¨ªmico, porque es muy probable que nos caiga encima y no lo hemos afrontado nunca".
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