El emir impone en Kuwait el estado de emergencia antes de regresar

El emir de Kuwait, Jaber Ahmed Al Sabaj, empez¨® ayer a preparar su retorno desde el exilio kuwait¨ª decretando un estado de emergencia que durar¨¢ tres meses. Adem¨¢s, nombr¨® al pr¨ªncipe heredero y primer ministro, jeque Saad Al Abdal¨¢, administrador general del estado de emergencia, que servir¨¢ "para garantizar la seguridad y los bienes de los ciudadanos y de los residentes extranjeros, y permitir la r¨¢pida y firme vuelta a la normalidad en el territorio de Kuwait".El pr¨ªncipe heredero ser¨¢ tambi¨¦n gobernador militar mientras dure la situaci¨®n excepcional y podr¨¢ tomar cualquier tipo de medida en nombre del emir. En teor¨ªa el jeque ser¨¢ el comandante supremo y coordinador de las fuerzas multinacionales que se instalen en territorio kuwait¨ª.

Aunque quedaban unos pocos n¨²cleos de resistencia, las fuerzas de la coalici¨®n controlaban anoche la situaci¨®n en Kuwait City. Un grupo de marines incluso reabri¨® simb¨®licamente la Embajada de Estados Unidos, seg¨²n,la cadena de televisi¨®n CBS. Pese a las detonaciones que a¨²n se o¨ªan en algunos puntos de la poblaci¨®n, numerosas personas salieron por la tarde a las calles para expresar su j¨²bilo e indicar a los soldados algunos lugares donde se ocultaban los ¨²ltimos focos de resistencia iraqu¨ª. Algunos ciudadanos recibieron a las tropas coligadas ondeando banderas kuwalt¨ªes y entonando himnos patri¨®ticos.

Huida en desbandada

Un portavoz de la resistencia kuwait¨ª en Londres inform¨® a Reuter que los iraqu¨ªes se hab¨ªan marchado en desbandada y que s¨®lo les preocupaba conseguir un veh¨ªculo para escapar. Los soldados del ¨¦j¨¦rcito invasor se hab¨ªan hecho con cualquier cosa que les permitiera alcanzar la frontera iraqu¨ª. Atr¨¢s, en la ciudad arrasada, dejaban su impedimenta e incluso sus fusiles y sus cascos.

Algunos ciudadanos kuwalt¨ªes se ofrec¨ªan ayer voluntariamente a las patrullas que entraban en la ciudad para ayudarles a identificar, por el acento, a posibles fugitivos iraqu¨ªes ataviados con ropas civiles.

Las primeras noticias que llegaban desde la ciudad hablaban de un paisaje dantesco. Los grandes hoteles y los edificios oficiales ard¨ªan o hab¨ªan sido demolidos con explosivos, seg¨²n el embajador de Kuwait ante la ONU, Mohamed Abdulhasan. Parte de la poblaci¨®n padece enfermedades infecciosas y no hay agua ni electricidad.