Bubka brind¨® una noche fant¨¢stica

Sergei Bubka comenz¨® a torcer el morro cuando la prueba de salto con p¨¦rtiga era un calvario para los dem¨¢s atletas. La varillla estaba colocada en 5,60 metros, y Bubka todav¨ªa no hab¨ªa efectuado ningan salto. Durante casi dos horas hab¨ªa permanecido sentado, mientras observaba las evoluciones del resto de participantes en la prueba. Entonces torci¨® la boca, a derecha e izquierda, sac¨® una p¨¦rtiga blanca con espirales rojas y comenz¨® un ligero calentamiento. Bubka siempre tuerce el morro cuando entra en tensi¨®n. Despu¨¦s, brind¨® una noche fant¨¢stica, con un salto de seis metros y tres intentos fallidos sobre 6,10.El sovi¨¦tico salt¨® al primer intento 5,70 y 5,86. Con dos saltos ya era campe¨®n mundial. En su segundo intento, sobrepas¨® los seis metros. El p¨²blico enloqueci¨®. Fue una pirueta fabulosa, plena de potencia y decisi¨®n: un ataque al list¨®n que s¨®lo puede realizarlo Bubka y quiz¨¢ su compatriota Gataulin.

Pidi¨® Bubka que le colocaran la varilla a 6,10, dos cent¨ªmetros por encima de su reciente plusmarca mundial. Su convicci¨®n era absoluta. Hab¨ªan terminado todas las competiciones de la jornada, pero el p¨²blico sevillano vibraba con la actuaci¨®n del pertiguista sovi¨¦tico.

En su segundo intento, debi¨® sentir la posibilidad de conquistar el r¨¦cord del mundo. Cambi¨® de p¨¦rtiga, quiz¨¢ porque quer¨ªa rri¨¢s propulsi¨®n. Se at¨® las zapatillas con fuerza y se lanz¨® a por la plusmarca. No lo consigui¨®, ni en su tentativa posterior. pero en todo momento dej¨® la firma del hombre que arrienaza unas alturas prohibidas para el resto de atletas. Bubka es definitivamente una leyenda viviente, un hombre que ha conquistado todo: campeonatos, juegos ol¨ªmpicos y plusmarcas. Para Bubka, la p¨¦rtiga no tiene l¨ªmites.