Los jueces no premian la colaboraci¨®n policial
La sentencia del Tribunal Superior vasco, la primera pronunciada en Espa?a por escuchas ilegales, contiene aspectos pol¨¦micos. El principal es la igualdad de trato a los tres condenados cuando uno de ellos, el ertzaina Ram¨®n Epalza, permiti¨® con su confesi¨®n la celebraci¨®n del juicio y sostiene, adem¨¢s, haber frustrado conscientemente la consumaci¨®n del delito.Epalza admiti¨® los hechos ante los jueces en 1988, justo dos a?os despu¨¦s del pinchazo y de la apertura de diligencias, y prest¨® testimonio contra el resto de los participantes. Esta actitud no puede contar como atenuante, seg¨²n la sentencia, porque el arrepentimiento para ser espont¨¢neo debe producirse antes de conocerse el inicio de un procedimiento judicial.
Pero los magistrados no toman en consideraci¨®n en la extensa sentencia, de 24 folios, la declaraci¨®n de Epalza, seg¨²n la cual el frustr¨® la escucha. El ertzaina asegura que, en plena faena en la central de tel¨¦fonos, facilit¨® al tambi¨¦n condenado Javier Aguirre, jefe de comunicaciones del Gobierno vasco, un n¨²mero distinto al previsto. Por ello, la grabadora nunca funcio Por ello, la grabadora nunca funcion¨® y el tel¨¦fono de Garaikoetxea se interfer¨ªa con el de otro abonado.
Los jueces han fallado que el delito se frustr¨® por esta ¨²ltima circunstancia, pero la atribuyen a "razones o motivos desconocidos". Ni siquiera aluden a la versi¨®n de Epalza para explicar su falta de toma en consideraci¨®n. Este hecho justificar¨ªa un recurso, seg¨²n el defensor del ertzaina, Enrique Villa. "Se vulnera la presunci¨®n de inocencia al aceptar su testimonio en otros puntos", afirma, "e ignorarlo en este'".
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