135 minusv¨¢lidos exigen a la Comunidad vivendas protegidas sin barreras arquitect¨®nicas
Unos 20.000 minusv¨¢lidos de la Comunidad de Madrid luchan a diario con las barreras arquitect¨®nicas que impiden el paso de sus sillas de ruedas. De ellos, 135 aguardan la adjudicaci¨®n de una vivienda social adaptada a sus necesidades. La ley estipula que el 3% de los pisos protegidos deben destinarse a este colectivo. Sin embargo, el Instituto de la Vivienda de Madrid (Ivima) no ha informado a¨²n al Servicio Regional de Minusv¨¢lidos encargado de estudiar cada caso de cu¨¢ntas casas adaptadas dispone en Madrid. Algunos dismidos esperan en un quinto piso sin ascensor.
Francisca Sansegundo perdi¨® una de sus piernas en 1978. La segunda, en 1984. Ambas amputaciones fueron consecuencia de una enfermedad denominada arteritis de Takayasu, una hinchaz¨®n que cierra las paredes de las arterias. Desde entonces se mueve en una silla de ruedas por su casa, un quinto piso sin ascensor y alquilado, en la calle de la Oca, en Carabanchel. "Esto es como estar en una jaula, porque no puedo salir a la calle a no ser que me bajen en volandas", asegura esta mujer de,44 a?os que vive con su marido y sus dos hijos."Yo solo no puedo llevarla porque entre ella y la silla son unos setenta kilos de peso", explica Casto Ruiz, el marido de Francisca, carpintero de una dependencia ministerial. "Mis dos hijos me ayudan pero no pueden estar todo el d¨ªa pendientes de m¨ª y con las 100.000 pesetas que gana Casto al mes no podernos plantearnos ni comprar ni alquilar un bajo" asegura Francisca. La familia Ruiz Sansegundo, solicit¨® por primera vez un piso protegido en 1977 al Ministerio de la Vivienda. Su segunda petici¨®n la cursaron en el Ivima en 1984.
"Me parece que lo del piso va para largo", afirma esc¨¦ptica Francisca. "Lo peor es que s¨¦ de buena tinta que en el Fontarr¨®n de Moratalaz hay dos viviendas de minusv¨¢lidos que est¨¢n vac¨ªas, pero yo no valgo para dar la patada", concluye no sin cierta iron¨ªa.
El Servicio de Minusv¨¢lidos dependiente de la Consejer¨ªa de Integraci¨®n Social, es el encargado de estudiar las solicitudes de vivienda de los disminu¨ªdos f¨ªsicos en virtud de un acuerdo firmado con el Ivima en 1990. De los 135 casos que engrosan la lista de espera, 15 son urgentes. "Todav¨ªa no sabernos el n¨²mero de pisos adaptados para incapacitados que ha construido o proyectado el Ivima", explica Nicol¨¢s Garcia, jefe del citado servicio.
"Sistema ca¨®tico"
Pilar Ramiro, secretaria general de la Coordinadora de Minusv¨¢lidos F¨ªsicos de Madrid, califica de "ca¨®tico"' el sistema por el cual se reserva un 3% de los pisos protegidos a los minusv¨¢lidos. "En las actuaciones de Palomeras y Fontarr¨®n se ha respetado el porcentaje, pero no en las del Alto de San Isidro, Pinar de Chamart¨ªn o Tercio del Terol", expone Pilar. "Desde 1985 se habr¨¢n adjudicado unas 250 viviendas a incacitados fisicos, a?ade.
A los minusv¨¢lidos se les exigen las mismas condiciones econ¨®micas para conseguir un piso protegido que al resto de los peticionarios. "Estamos revisando el baremo porque, en estos casos, adem¨¢s de los condicionantes econ¨®micos existe el inconveniente adicional de la movilidad en silla de ruedas", asegura Nicol¨¢s Garcia, encargado de este colectivo en Integraci¨®n Social.
"Yo no pido ni siquiera un piso adaptado, que me concedan un bajo y ya lo adecuar¨¦ yo a mis necesidades", concluye Francisca Sansegundo..
El Ministerio de Asuntos Sociales destinar¨¢ este a?o anos 80 millones de pesetas a ayudas a minusv¨¢lidos que seencuentren atendidos en instituciones especializadas de la Comunidad, seg¨²n informa la agencia .
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