Sanidad curar¨¢ la infecci¨®n de la e?e

La Administraci¨®n pretende resolver la guerra de la e?e, reaccionando as¨ª a la conmoci¨®n en la cultura espa?ola. El Ministerio de Industria emiti¨® ayer un comunicado afirmando que la e?e "seguir¨¢ siendo un requisito obligatorio" en los ordenadores vendidos en Espa?a. Industria anuncia la adecuaci¨®n a la legislaci¨®n de la CE, y un decreto en paralelo del Ministerio de Sanidad y Consumo para que los ordenadores no se vendan sin la e?e. El Ministerio de Cultura remite hoy a Industria el informe en defensa de la e?e aprobado ayer por la Real Academia. El vicepresidente de la Comisi¨®n Europea, Manuel Mar¨ªn, neg¨® que el asunto afecte a "la integridad cultural del idioma" ci?¨¦ndolo a la "libre circulaci¨®n de mercanc¨ªas".

El Ministerio de Industria emiti¨® ayer un comunicado bajo el t¨ªtulo El Gobierno garantiza la exigencia de la e?e en los ordenadores. Industria asegura que la e?e "seguir¨¢ siendo un requisito obligatorio" para la venta de ordenadores en Espa?a. De este modo, el Gobierno, seg¨²n el comunicado, "garantiza que la iniciativa del Ministerio de Industria de derogar los preceptos opuestos al Tratado" -los decretos espa?oles que la CE exige suprimir- "se produce en paralelo con la adopci¨®n de un Decreto, a iniciativa del Ministerio de Sanidad y Consumo, por el que se mantendr¨¢ aquella obligatoriedad". El secretario general del Ministerio de Sanidad y Consumo, C¨¦sar Bra?a, estar¨ªa ya trabajando en la nueva disposici¨®n, basada en la protecci¨®n al consumidor y, jur¨ªdicamente, en el art¨ªculo 36 del Tratado de Roma.

Imagen extravagante

Por su parte, Manuel Mar¨ªn, vicepresidente de la Comunidad Europea, afirm¨® ayer haber quedado "muy sorprendido" de que, en la celebraci¨®n del D¨ªa de Europa (por ayer) saltara la luz un tema que "da una imagen extravagante de Europa, que no se merece". Seg¨²n Mar¨ªn, "nadie en Bruselas quiere quitar la e?e a Espa?a". "Cuando me he enterado", dijo, "cre¨ª que era una broma o el D¨ªa de los Santos Inocentes".

El mandatario espa?ol en la CE explica: "No quiero entrar en pol¨¦micas: hasta ahora es obligatorio que los ordenadores vengan con e?e al mercado espa?ol y lo que pretende la CE con una norma com¨²n de estandarizaci¨®n es, en lenguaje llano: 'Usted puede seguir con su e?e pero no puede prohibir a nadie que se compre un ordenador sin e?e y lo use aqu¨ª. Es un problema de libre circulaci¨®n de mercanc¨ªas y de libertad de importaci¨®n".

A la pregunta de si la CE no podr¨ªa legislar que haya una tecla con la e?e en los ordenadores que se vendan en la Europa pr¨®ximamente unida, Mar¨ªn contesta: "No se puede impedir, en un mercado interior sin fronteras, que el fabricante sea libre para hacer lo que quiera y que el p¨²blico compre lo que quiera. Yo no entiendo el problema y considero que esto no afecta a la integridad cultural del idioma de un pa¨ªs. Pero, insisto, a¨²n no hay decisi¨®n en la CE". Por su parte, el ministro de Asuntos Exteriores, Francisco Fern¨¢ndez Ordo?ez, afirm¨® ayer que la Comisi¨®n Europea -vicepresidida por Manuel Mar¨ªn- "debe entender que el Gobierno espa?ol est¨¢ en su leg¨ªtimo derecho de proteger a su consumidor".

Fern¨¢ndez Ord¨®?ez apunt¨® una f¨®rmula. para solucionar el problema: "Me parece m¨¢s f¨¢cil que las multinacionales incorporen una tecla m¨¢s a los ordenadores que complicarnos la vida con el alfabeto espa?ol, que ya tiene bastantes siglos de existencia".

En l¨ªnea de oposici¨®n a la inicitiva de la CE, el Ministerio de Cultura entrega hoy al de Industria el informe en defensa de la e?e aprobado ayer por la Real Academia Espa?ola. "Vamos a defender hasta el final la cultura y la identidad de nuestro idioma", dice Adolfo Garc¨ªa Ortega, asesor de la direcci¨®n general del Libro y Bibliotecas del ministerio. "Apoyarnos a las m¨¢s altas instancias de la lengua y, si las cosas se complicaran, habr¨ªa que tomar m¨¢s medidas".

Emiliano Mart¨ªnez, director general del Grupo Santillana, manifest¨® que "cuando Puerto Rico levanta la bandera del idioma, no se entender¨ªa que Espa?a aprobara la desaparici¨®n en los ordenadores de uno de los caracteres del alfabeto espa?ol". Jos¨¦ Manuel G¨®mez Luque, editor de lengua de la editorial Anaya, dijo que la medida "no parece seria".