El tratado de amistad entre Espa?a y Brasil amenaza con carecer de contenido
Espa?a ha empezado a dar los primeros pasos para concluir con Brasil el quinto tratado de cooperaci¨®n y amistad con un Estado latinoamericano. Pero a diferencia de los cuatro anteriores, el que se negocia con el presidente Fernando Collor de Melo corre el riesgo de quedar vac¨ªo de contenido, porque los empresarios espa?oles son poco proclives a invertir en un pa¨ªs descrito como un "gigante con pies de barro".
Color inici¨® ayer a mediod¨ªa en Madrid su primer viaje presidencial a Europa que se limita a Espa?a, aunque la visita s¨®lo empezar¨¢, formalmente hoy con el recibimiento oficial en El Pardo. Despu¨¦s, Collor acudir¨¢ a un almuerzo en el palacio de la Zarzuela con los Reyes, y por la noche asistir¨¢ a la tradicional cena de gala que le ser¨¢ ofrecida en el palacio de Oriente. Ma?ana conversar¨¢ largo y tendido con el presidente Felipe Gonz¨¢lez, con el que tambi¨¦n almorzar¨¢ antes de dedicar el fin de semana a recorrer Granada y Sevilla.El plato fuerte de su estancia ser¨¢, el viernes, la firma del acta de bases que sentar¨¢ las l¨ªneas generales de un futuro tratado de cooperaci¨®n que prev¨¦ la concesi¨®n de cr¨¦ditos blandos y comerciales y de inversiones espa?olas en Brasil durante el pr¨®ximo lustro por valor de 300.000 millones de pesetas, aunque es posible que en el ¨²ltimo momento Gonz¨¢lez revise al alza esta cifra.
A pesar de que los brasile?os ser¨¢n, comparados con los dem¨¢s latinoamericanos, los que toquen a menos por cabeza del man¨¢ espa?ol, en los c¨ªrculos econ¨®micos se palpa cierto escepticismo sobre el cumplimiento de los objetivos del modesto tratado por varios motivos. La dimisi¨®n, hace una semana, del equipo econ¨®mico de Collor no aclara el rumbo err¨¢tico de la pol¨ªtica econ¨®mica de un pa¨ªs con una deuda externa de 120.000 millones de d¨®lares que est¨¢ renegociando con el FMI.
Comercio desequilibrado
Espa?a tiene adem¨¢s con Brasil uno de sus mayores d¨¦ficit comerciales -la cobertura de las exportaciones por las importaciones fue tan s¨®lo del 19% en 1990-, y los brasile?os se han negado a firmar con Espa?a un acuerdo de mutua protecci¨®n de inversiones alegando que ya han suscrito el Multilateral Investment Guarantee Agreement, un acuerdo que para los empresarios espa?oles ofrece un marco jur¨ªdico mucho menos seguro. Collor, que ya pas¨® por Madrid poco antes de su toma de posesi¨®n como presidente, disgust¨® entonces, por ¨²ltimo, a sus interlocutores econ¨®micos espa?oles, a los que dio un plant¨®n.Aun as¨ª, la diplomacia espa?ola cree que debe intentar mantener con Brasil relaciones a un mismo nivel que con los dem¨¢s pesos pesados latinoamericanos. De ah¨ª su empe?o en negociar un tratado en el que Collor tambi¨¦n est¨¢ interesado para presentarlo a su opini¨®n p¨²blica como una prueba de la credibilidad que inspira su Administraci¨®n.
Pero Brasilia tiene un enfoque diferente de lo que deben ser las relaciones entre la pen¨ªnsula Ib¨¦rica y sus ex colonias, y, en el acta de bases, algunos conceptos como el de la Comunidad Iberoamericana de Naciones quedan muy diluidos con relaci¨®n a la ideal que se hace de ellos la diplomacia espa?ola. Es el precio pol¨ªtico a pagar por que Collor estampe su firma en el documento.
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