Probable reuni¨®n de Benyedid y Hassan II en el desierto para analizar el refer¨¦ndum

Fuentes diplom¨¢ticas espa?olas de Rabat han asegurado que el rey Hassan II de Marruecos viajar¨¢ a Argelia inmediatamente despu¨¦s de las visitas a las ciudades de Smara y Assa, previstas para hoy y ma?ana, para entrevistarse con el presidente argelino, Chadli Benyedid, probablemente en alg¨²n lugar del desierto sahariano.

En medios oficiales marroqu¨ªes no se ha confirmado la celebraci¨®n de esta cumbre. Sin embargo, insistentes rumores tanto en Rabat como en Argel hablan de un encuentro entre los dos jefes de Estado en un lugar fronterizo del desierto, o bien entre Hassan II y dirigentes del Frente Polisario.Hassan II y Chadli Benyedid ya se han entrevistado en otras dos ocasiones en la frontera com¨²n de Marruecos y Argelia, y sus reuniones sirvieron para descongelar las relaciones bilaterales. En este caso, el problema es el del S¨¢hara occidental. Los partidos marroqu¨ªes de oposici¨®n y dirigentes saharauis se oponen a la convocatoria de un refer¨¦ndum de autodeterminaci¨®n que ser¨ªa, seg¨²n palabras de un dirigente socialista, "una aventura a ciegas". Ninguno de ellos se atreve a criticar directamente el principio mismo del refer¨¦ndum, pero ponen en evidencia las dificultades t¨¦cnicas y la p¨¦rdida, por parte de Marruecos, de una parte de su soberan¨ªa al permitir dicha convocatoria.

El rey Hassan II, que ha repetido en varias ocasiones su postura favorable al refer¨¦ndum en la zona, ha guardado silencio desde la votaci¨®n por el Consejo de Seguridad de la ONU el 29 de abril ¨²ltimo de la resoluci¨®n 690, en la que se decide la creaci¨®n de la Misi¨®n de las Naciones Unidas para la Organizaci¨®n de un Refer¨¦ndum en el S¨¢hara Occidental (Minurso).

En su actual viaje a la ciudad santa de Smara, en el S¨¢hara occidental, y a la de Assa, al noroeste de Tinduf, el monarca re¨ªterar¨¢ la misma postura favorable, al mismo tiempo que recibir¨¢ la pleites¨ªa de las tribus saharaui al trono alau¨ª, respondiendo tanto a las expectativas internacionales como a las inquietudes de la oposici¨®n.

Por otra parte, este viaje puede significar la b¨²squeda de una tercera soluci¨®n al problema saharaui. Una opci¨®n que tambi¨¦n se ha barajado como posibilidad en medios pol¨ªticos marroqu¨ªes, que la preferir¨ªan a cualquier aventura a ciegas.