Con humor

Desconozco si en la ¨²ltima edici¨®n del Libro de estilo de EL PA?S existe alg¨²n apartado o cl¨¢usula que recomiende a sus periodistas y colaboradores introducir m¨¢s dosis de humor en sus art¨ªculos, pero tengo que reconocer que desde hace alg¨²n tiempo estoy disfrutando much¨ªsimo leyendo su peri¨®dico, hasta el punto de atragantarme con las risas que me ha producido su lectura. Desde la fina iron¨ªa del editorial No son ?o?er¨ªas (10 de mayo) hasta el gracejo de Emilio P¨¦rez de Rozas en su cr¨®nica deportiva Carnaval en C¨¢diz a costa del Bar?a (12 de mayo) -que le¨ªmos con gust¨® incluso los que no somos nada aficionados al f¨²tbol y sentimos el mayor respeto hacia el pueblo catal¨¢n-, pasando por el humor m¨¢s mordaz, pero no menos refrescante, de Maruja Torres en Alcaldes (El Pa¨ªs Semanal del 12 de mayo) -por citar s¨®lo tres guindas-, me han hecho pensar que o ¨²ltimamente la luna ha hecho estragos en la Redacci¨®n o realmente se han dado cuenta de que tambi¨¦n el sentido del humor es un signo de madurez humana y democr¨¢tica, que deber¨ªa impregnar todos los aspectos de la vida, incluso los m¨¢s serios y trascendentes. Todo esto me ha llevado a la idea de crear una asociaci¨®n, que se llamar¨ªa algo asi como Dev¨®rame, Pa¨ªs, y que reunir¨ªa a esa legi¨®n de ¨¢vidos e irredentos lectores que tenemos el vicio de devorar su peri¨®dico todas las ma?anas junto con el desayuno.Posdata: recomiende a sus colaboradores del Atlas El Pa¨ªs-Aguilar que se lean los consejos diet¨¦ticos que publica El Pa¨ªs Semanal, ya que son capaces de comerse cualquier cosa, inclusive la ciudad de Tabriz (Ir¨¢n) -casi medio mill¨®n de habitantes, famos¨ªsima industria de tapices mundialmente conocida-, que ha sido completamente devorada de la p¨¢gina 169 del Atlas.-