El riesgo de una gala de estrellas

En la noche inaugural del Festival Internacional de Danza de It¨¢lica, que se celebr¨® el s¨¢bado en las ruinas romanas de Sevilla, actuaron el valenciano Nacho Duato, el escoc¨¦s Michael Clark y el norteamericano Stephen Petronio, con el m¨²sico sevillano Gualberto.La aparici¨®n con el culo al aire del pol¨¦mico Michael Clark no levant¨® murmullos. Tampoco extra?¨® que Stephen Petronio se encaramase a la piedra m¨¢s alta de las ruinas de It¨¢lica para dirigirse al p¨²blico. Nacho Duato no arranc¨® los aullidos de rigor con su esplendidez. Todo tuvo una respuesta extra?a de p¨²blico, fr¨ªa pero complacida.

La noche de la apertura del festival internacional de danza pod¨ªa haber sido un patinazo por la propuesta tan at¨ªpica de gala de estrellas que se eligi¨® para la fiesta y por la brevedad de las actuaciones. Pero no fue as¨ª, y el todo Sevilla que abarrotaba el recinto se fue contento a casa, prueba de que la danza, si se insiste, puede ensanchar mentalidades confrontando estilos. Este es el gran ¨¦xito del festival, que no duda en ensayar riesgos como el de anoche.

Provocaci¨®n

"Dar una de cal y otra de arena", como explicaba su director, Juan Antonio Maeso, es la f¨®rmula que mantiene desde hace cinco a?os. La cal, en cuanto a propuesta provocadora, fue la pareja Clark-Petronio. Clark, con Sed in the clowns, un canto de cisne hist¨¦rico y divertido de este buen bailar¨ªn, montado bajo el acicate de una canci¨®n interpretada por Elizabeth Taylor para el que s¨®lo utilizaba sus el¨¢sticas y bonitas piernas, pues los brazos se inmovilizaban dentro de un gran manguito de piel que s¨®lo permit¨ªa estiramientos de tronco con los que parec¨ªa representar el espectro de una diva.

Pies quietos

El bailar¨ªn Stephen Petronio, por el contrario, hizo una danza a pies quietos, 3, una disertaci¨®n de la expresi¨®n musical que se perd¨ªa en la distancia.La arena en cuanto a lo m¨¢s formalista de la noche fueron las dos piezas de Nacho Duato. Tambi¨¦n las que conten¨ªan m¨¢s danza. Su sentimental y fresco Cor perdut, con m¨²sica de Mar¨ªa del Mar Bonet, que bailaron espl¨¦ndidos Duato y Catherine Allard.

La ¨²ltima pieza, sin identificar en el programa, podr¨ªa ser una llamada al embrujo del flamenco, con l¨ªneas abiertas y extendidas como s¨®lo Duato puede perfilar, y su especial dibujo de manos y de brazos, rapid¨ªsimo, en esta ocasi¨®n favorecida con la expresi¨®n del vuelo de su falda pantal¨®n de volantes. La presencia f¨ªsica del bailar¨ªn fue resaltada en esta coreograf¨ªa que, seg¨²n dijo, era mezcla de kabuki y buler¨ªas, por lo que Su t¨ªtulo probablemente ser¨¢ Kabur¨ªa.