Dos profesores radicales

Al¨ª Belhadj, de 34 a?os de edad, capitanea junto con Abassi Madani, de 60, al FIS, la ¨²nica organizaci¨®n integrista autorizada del Magreb, que parece condenada a una pronta ?legalizaci¨®n.Ali Belhadj es el m¨¢s popular de los miembros de la c¨²pula del FIS y ejerce como profesor de matem¨¢ticas en un instituto de la capital.

Es predicador habitual de la mezquita de Sunna, en el barrio de Bab el Oued, y sus palabras son seguidas por millares de fieles que esperan siempre de ¨¦l las consignas m¨¢s radicales. Es director adjunto del semanario Al Hidaya, que edita el comit¨¦ de orientaci¨®n del FIS y que est¨¢ dirigido por Hachemi Sahnounni, otro imam vinculado al grupo paramilitar Tafkir Wa Hijra.

Abassi Madani, el,n¨²mero uno de la organizaci¨®n, es formalmente mucho m¨¢s moderado que su compa?ero. Se dedica tambi¨¦n a la ense?anaza de psicolog¨ªa en la facultad de Ciencias de la Educaci¨®n de Argel. Tras haber luchado junto con el FLN por la independencia del pa¨ªs inici¨® un viaje hacia posturas m¨¢s radicales y nacionalistas. Apareci¨® en la escena pol¨ªtica en febrero de 1989 al legalizarse el FIS. El imam Madani suele predicar desde la mezquita del barrio de Kouba.

Belhadj y Madani son los dos imames m¨¢s odiados por el Ej¨¦rcito, ya que en reiteradas ocasiones se han enfrentado dial¨¦cticamente a los militares y recientemente hab¨ªan llamado a los j¨®venes soldados a la deserci¨®n y a sumarse a la causa integrista. El pasado viernes los dos imames anunciaron conjuntamente desde la mezquita de Kouba que proclamar¨ªan la guerra santa contra el Gobierno si ¨¦ste no suspend¨ªa el estado de excepci¨®n. Estas soflamas provocaron recientemente las cr¨ªticas p¨²blicas del primer ministro Sid Ahmed Gozali.

En octubre de 1988, en una situaci¨®n hist¨®rica similar a la que ahora vive Argelia, Belhadj protagoniz¨® uno de los incidentes m¨¢s macabros y truculentos de la historia argelina cuando areng¨® a los j¨®venes desharrapados a que se enfrentaran con sus cuerpos a las fuerzas del Ej¨¦rcito provocando as¨ª la matanza de Bab el Oued. Nunca se ha sabido el n¨²mero de v¨ªctimas que se produjo en aquel tiroteo.