Un tribunal entiende que se pueda quemar una bandera espa?ola el d¨ªa de Sant Jordi

La secci¨®n octava de la Audiencia de Barcelona dict¨® el pasado d¨ªa 1 una sentencia en la que se muestra comprensiva por el hecho de que unos j¨®venes independentistas quemaran una bandera espa?ola colocada en la Rambla de Canaletes, de Barcelona, tras participar en una manifestaci¨®n independentista el d¨ªa de Sant Jordi, en 1988.

El fallo absuelve a los 12 procesados por falta de pruebas y para quienes el fiscal hab¨ªa solicitado penas que sumaban 38 a?os de c¨¢rcel por la quema de la bandera, lesiones a polic¨ªas y da?os materiales.En sus fundamentos, la sentencia afirma que la quema de una bandera espa?ola constituye una "acci¨®n perversa de ajar o vituperar". Sin embargo, a?ade que debe "comprenderse ( ... ) aquella acci¨®n [la quema] atendiendo al lugar e idiosincrasia de su pueblo [el catal¨¢n], al momento y a las personas que a aqu¨¦llas asisten [una manifestaci¨®n]. A rengl¨®n seguido, el ponente advierte que los manifestantes no se hallaban concentrados en Canaletes por "el sentimiento hist¨®rico, lenguaje, tradici¨®n y territorio com¨²n que aquella simbolizaci¨®n [la bandera de Espa?a] representa, m¨¢xime atendiendo al d¨ªa tan significativo [Sant Jordi] y con tanta repercusi¨®n interna en todos los asistentes".

El fallo se?ala que la fiesta del patr¨®n de Cataluna causa una conmoci¨®n en los sentimientos m¨¢s ancestrales del pueblo catal¨¢n que "proviene de la devoci¨®n procesada a Sant Jordi, motivadora de su elevaci¨®n patronal, hasta el extremo de figurar su efigie en lugar preeminente y en la fachada principal del edificio propio por anotonomasia de la autonom¨ªa catalana, el Palau de la Generalitat".

Posteriormente, la sentencia detalla los or¨ªgenes legendarios de Sant Jordi, quien, tras ser elegido protector de la lucha contra la invasi¨®n ¨¢rabe -prosigue el fallo-, fue erigido desde Barcelona "en gu¨ªa simb¨®lico del esp¨ªritu nacional del pueblo".

El tribunal hace una prolija relaci¨®n de los lugares donde la ley obliga a que ondee la bandera espa?ola, como organismos oficiales, edificios p¨²blicos militares y policiales, aunque "pese a esa numeraci¨®n exhaustiva y detallada, no se recoge su imperiosa colocaci¨®n en los paseos y calles, habi¨¦ndose instalado la misma al comienzo de la Rambla de Canaletas, lugar de encuentro y reuni¨®n com¨²n tradicional [de sentimientos nacionalistas] desde tiempos anteriores a la citada ley".