Defensa proyecta sustituir los gobiernos militares por delegaciones provinciales

El Ministerio de Defensa proyecta suprimir los actuales gobiernos militares y sustituirlos por delegaciones provinciales, de car¨¢cter civil y similares a las de otros departamentos, dentro de un plan de reforma y potenciaci¨®n de su estructura perif¨¦rica. El objetivo de dicha reforma, que debe abordarse a lo largo de esta legislatura, es separar las tareas estrictamente militares de las de tipo de administrativo.

A pesar de que las competencias del Ministerio de Defensa son exclusivas del Estado, por lo que no le ha afectado el proceso de transferencias a las comunidades aut¨®nomas, carece, sin embargo, de una estructura perif¨¦rica similar a la de otros departamentos. Los gobiernos militares son, sobre todo, delegaciones del Ej¨¦rcito de Tierra, volcado hist¨®ricamente en la ocupaci¨®n del propio territorio nacional, aunque se ocupen tambi¨¦n de algunas tareas administrativas que desbordan dicho ¨¢mbito.Adem¨¢s, varios organismos dependientes del Ministerio de Defensa, como el Instituto Social de las Fuerzas Armadas (Isfas), con 800.000 beneficiarlos; el Instituto de la Vivienda de las Fuerzas Armadas (Invifas), que administra casi 42.000 casas, o la Gerencia de Infraestructura de la Defensa, responsable de la gesti¨®n del patrimonio inmobiliario del departamento, cuentan con su propia red territorial.

En muchas provincias, el cargo de gobernador militar va unido al de general jefe de la principal unidad del Ej¨¦rcito de Tierra ubicada en su demarcaci¨®n. El prop¨®sito de la reforma que prepara Defensa es liberar a los mandos militares de las tareas administrativas que ahora desempe?an y nombrar delegados que asuman la gesti¨®n de todas las actividades del ministerio en la provincia respectiva.

Oficinas de reclutamiento

En algunas provincias en las que la actividad administrativa del departamento es m¨ªnima, el cargo de delegado provincial podr¨ªa ser ocupado por el militar de superior empleo, pero se tratar¨ªa de una "coincidencia" y, en todo caso, quedar¨ªa desterrado el t¨ªtulo de gobernador militar.

La creciente importancia del personal civil en el funcionamiento del Ministerio de Defensa, que cuenta ya con 43.500 contratados civiles, entre laborales y funcionarios; y el protagonismo que la nueva ley del Servicio Militar atribuye a los centros provinciales de reclutamiento, que se relacionan con m¨¢s de un mill¨®n de j¨®venes, entre disponibles, en activo y reservistas, aconsejan, seg¨²n las fuentes consultadas, dotar al departamento de una estructura perif¨¦rica, dependiente del ¨®rgano central.

De hecho, la inexistencia de esta red territorial no es sino una consecuencia de la falta de tradici¨®n del Ministerio de Defensa, nacido de la unificaci¨®n de los ministerios del Ej¨¦rcito, la Marina y el Aire, y heredero de las estructuras separadas que cada uno de ellos ten¨ªa.

Explicaci¨®n de Garc¨ªa Vargas

Las l¨ªneas maestras de la reforma fueron adelantadas por el ministro de Defensa, Juli¨¢n Garc¨ªa Vargas, durante su comparecencia el pasado 17 de junio en el Senado: 'La organizaci¨®n perif¨¦rica", dijo, "debe ser impulsada en esta legislatura". "En la actualidad", agreg¨®, "existe una estructura militar que tiene un fin espec¨ªfico planteado desde la defensa militar y este fin no debe ser mediatizado con cometidos de administraci¨®n o gesti¨®n que no correspondan a una concepci¨®n log¨ªstica".

La supresi¨®n de la figura del gobernador militar acabar¨¢ con uno de los s¨ªmbolos tradicionales de la Administraci¨®n del Ej¨¦rcito. Otro de estos s¨ªmbolos, el t¨ªtulo de capit¨¢n general, que ostentaban todos los jefes de regiones militares, desapareci¨® con la ley del Personal Militar, en vigor desde 1989, que reserva dicho tratamiento al Rey y a los tenientes generales a los que se les conceda con car¨¢cter honor¨ªfico.

La creaci¨®n de la estructura perif¨¦rica de Defensa, cuyc, coste no ha sido revelado por los responsables del departamento, avanzar¨¢ en la direcci¨®n de restar a los mandos del Ej¨¦rcito cualquier competencia que no sea operativa. Un precedente en esta l¨ªnea fue la reforma de la justicia castrense, a la que se separ¨® de los mandos militares.